Tegucigalpa – El Consejo directivo de Invest-H, pidió este viernes al Ejecutivo la destitución del director de ese ente, Marco Bográn, ante sonadas denuncias de presunta corrupción que agudizan la situación sanitaria de los hondureños, dramáticamente afectados por el coronavirus.
– Pese a los escándalos en la compra de equipo e insumos médicos, apenas un alto funcionario ha sido destituido. Se trata de Gabriel Rubí, extitular de Copeco, que fue apartado y volvió a su cargo de diputado en el Congreso Nacional.
– La ejecución de los recursos para contrarrestar la emergencia de COVID al 19 de junio asciende a 4,497.7 millones de lempiras, de acuerdo a la Secretaría de Finanzas.
La recomendación llega con retraso tras los presuntos y desproporcionados actos irregulares en las compras realizadas en el marco de la pandemia.
Ya son 108 los días desde que el COVID-19 se instaló en Honduras y desde entonces el camino ha sido tortuoso, la pandemia ha mostrado un crecimiento que no para y las respuestas se ven opacadas por la presunta corrupción en las compras que han sido reiteradamente denunciadas por organizaciones de sociedad civil y por los propios médicos y otros trabajadores sanitarios, protagonistas clave en la primera línea de combate contra el mal.
Desde el paciente cero hasta la fecha, los contagios por COVID-19 en Honduras ya son 15 mil 366, mientras las muertes reportadas por Sinager indican 426 fallecimientos. Estas cifras contrastan con datos también oficiales, dados a conocer a diario desde las propias salas hospitalarias, cuando los directores y jefes médicos alzan su voz para reportar a los muertos y los contagiados por la pandemia.
Mientras la gente en las calles y en sus entornos no acata adecuadamente las medidas de bioseguridad, en muchos casos por falta de conciencia pero también porque la pobreza no les permite hacerse de lo elemental para protegerse y salen a la calle a buscar el pan de cada día, la economía parece hundirse.
Entre tanto, las compras más importantes para paliar la pandemia ni siquiera llegan al país, pese a haber sido pagadas con antelación y tener costos por arriba de los 47 millones de dólares en el caso de siete hospitales móviles pedidos a una empresa dudosa en La Florida, EEUU, según las denuncias de las organizaciones civiles como la ASJ y el CNA.
Esa opacidad se profundiza por la falta de diligencia de los entes contralores como el Tribunal Superior de Cuentas (TSC), cuyos informes al respecto aún están en el tintero pese a la urgencia de respuestas frente al aumento creciente de pacientes afectados por el coronavirus, así como por los muertos que cada día son más.
En tanto, el Ministerio Público, realiza investigaciones en varias líneas, pero una ley recién aprobada le ata para actuar expeditamente si no se conoce antes, el reporte del TSC.
Destitución de Rubí
Gabriel Rubí se produjo el 21 de abril -40 días después de comenzada la emergencia- por el mal manejo de compras que realizó en Copeco. El Ministerio Público investiga desde hace semanas el hecho. La destitución de
De acuerdo a los argumentos del Poder Ejecutivo, Rubí fue apartado para garantizar el proceso de investigación que entabló el Tribunal Superior de Cuentas. También estos informes están pendientes.
Únicamente de manera previa, el TSC emitió un informe en el que encontró “serias irregularidades” en la compra de materiales para hacerle frente a la pandemia de COVID-19.
La Fiscalía hondureña también tomó declaración del funcionario cesado y comenzó una investigación en esa vía.
Rubí dejó el cargo y volvió a sus labores parlamentarias como diputado en el Congreso Nacional.
Demoledor informe de ASJ
La Asociación para una Sociedad más Justa (ASJ), ha presentado dos informes relacionados a las compras relacionadas a la pandemia.
En el primer informe presentado el 18 de mayo señala imprecisiones que se resumen en decisiones rápidas, no hay penalidad en la entrega tardía de los productos comprados y la falta de un plan maestro para enfrentar la pandemia.
Este informe encontró “deficiencias” en compras de emergencia por COVID.
El segundo informe, que se presentó el 24 de junio, denunció que Invest-H compró cada hospital L.50 millones arriba del precio de mercado y fueron adquiridos mediante un proveedor de “USB”.
Se denunció que el señor Axel López, el intermediario al que Honduras compró los hospitales, fue demandado en Estados Unidos por un banco porque no pagó sus tarjetas de crédito, “este hombre fue sacado de un departamento porque no pagó el arrendamiento y lo procesaron, es decir, al empresario que le dimos mil millones de lempiras no paga sus tarjetas ni su renta”, denunció Carlos Hernández, director de ASJ.
Seis informes del CNA
El Consejo Nacional Anticorrupción (CNA), ha presentado seis informes durante la pandemia, relacionados a compras sobrevaloradas de mascarillas, insumos médicos, ventiladores mecánicos, hospitales móviles, entre otros bienes y servicios.
El primer informe del CNA -17 de abril- detectó el presunto perjuicio de 3.6 millones de lempiras en compras de insumos descartables durante el inicio de la emergencia. Aquí se desnuda cómo se “inflaron” los precios de guantes y mascarillas.
En tanto, el 27 de abril, el ente de sociedad civil presentó lo que llamó: “La corrupción en tiempos del COVID-19, parte II”. Aquí se retrata la presunta compra sobrevalorada de mascarillas N-95 que derivó en un perjuicio de 57.5 millones de lempiras a las arcas del Estado.
Mientras, el 12 de mayo se publicó el tercer informe en el que el Consejo Nacional Anticorrupción (CNA), identificó la fragilidad de más de 19 millones de lempiras. Aquí se plasmó la inconsistencia es de un total de 19 millones mil 011 lempiras con 89 centavos, de las cuales 15 millones 500 mil son por la compra de ventiladores de transporte Breas Vivo 65 y cuatro millones 252 mil 011 lempiras con 89 centavos en la construcción y remodelación del Instituto Nacional Cardiopulmonar “El Tórax”.
El cuarto informe -15 de junio- el CNA señala una serie de presuntas inconsistencias en el proceso de adquisición de 740 ventiladores mecánicos por Invest-H, de los que apenas 20 habían llegado en ehttps://proceso.hn/cna-presenta-informe-la-corrupcion-en-tiempos-de-covid-19-y-cuestiona-compras/se momento al país.
El CNA en su quinto informe presentado el 22 de junio denuncia la ineficiente gestión e incumplimiento de plazos en la entrega de hospitales móviles. Se evidencia que la adquisición de los siete hospitales móviles representa una compra ineficiente por parte de Invest-H, sin tener derecho a poder reclamar por las vías legales a la empresa proveedora.
El sexto informe, presentado este viernes, el cuerpo de sociedad civil asegura que el director ejecutivo de Inversión Estratégica de Honduras (Invest-H), Marco Bográn, favoreció con contratos millonarios a empresas que están ligadas a funcionarios públicos, entre ellos a un pariente, su tío Napoleón Bográn Idiáquez, según el reporte de CNA.
Desmarque
La titular de la Secretaría de Finanzas (Sefin), Rocío Tábora, pidió a varias instituciones involucradas en las compras de insumos y equipos médicos, publicar un inventario conjunto de las compras realizadas, así como informar de lo entregado a los hospitales.
“Pedimos a Invest-H y a la SESAL publicar un inventario unificado de los insumos sanitarios comprados y lo existente y lo entregado a los Hospitales”, expresó esta semana la corta publicación de la ministra Tábora.
Asimismo, este viernes Finanzas emitió un comunicado manifestando que no es responsable de aprobar órdenes de compra ni participar en ningún proceso o gestión de adquisición de otras instituciones.
“Son las unidades ejecutoras las responsables de administrar el presupuesto tal como les fue aprobado por el Congreso Nacional”, cita el comunicado.
Señalan que Finanzas no autoriza órdenes de pago de otras instituciones.
Según datos oficiales, tras más de 100 días de emergencia nacional, 4 mil 366 millones 600 mil lempiras, han sido destinados para la compra de equipo médico, insumos de bioseguridad, contratación de recurso humano, asistencia humanitaria, subsidios temporales para aquellos hondureños que han sido suspendidos de sus trabajos por la pandemia, entre otros.
El Banco Central de Honduras (BCH) señaló en un comunicado que los depositarios de fondos públicos son sus cuentahabientes y que dentro de los servicios que presta está atender las “ordenes por transferencias locales y al exterior a favor de terceros”, que son realizadas de acuerdo a las instrucciones giradas por los cuentahabientes.
Señaló la institución que la administración de los recursos públicos corresponde a las instituciones descentralizadas o a los demás organismos estatales que por ley tuvieran esa facultad.
La cabeza de Bográn
En tanto el director del Foro Nacional de Convergencia (FONAC), Omar Rivera, dijo que el consejo directivo de Invest-H recomendó al presidente Juan Orlando Hernández separa de su cargo al director de la institución Marco Bográn, para que la investigación pueda realizarse de la forma más transparente y expedita.
La decisión del consejo directivo de Invest-H, presidida por la ministra de Coordinación de Gobierno Martha Doblado, tomó la decisión de pedir la salida de Bográn hasta que las denuncias de organizaciones civiles y la salida de la dirigencia del ente trascendieran a la opinión pública.
Las organizaciones civiles ASJ, CNA y Foprideh, una coalición a la que pertenecen más de 80 afiliadas, decidieron retirarse del consejo directivo de Invest-H, debido a que las decisiones tomadas por Bográn, como él mismo reconoció ante una comisión de la Cámara legislativa, fueron tomadas unilateralmente sin habérseles consultado. Igualmente la Cruz Roja Hondureña, que trabajaría en los hospitales móviles que aún no llegan al país, también decidió retirarse después de denunciar opacidad en el proceso.