San Pedro Sula – El golpeado Valle de Sula, ubicado en el norte de Honduras, se mantiene expectante ante el invierno que comenzó activo y prevé el embate de fenómenos naturales que traen a la memoria las tormentas Eta y Iota, las últimas que azotaron esta zona hace dos años y que aún dejan daños que no han podido ser superados por sus pobladores.
– Poco trabajo se ha realizado en los bordos para contener eventuales inundaciones.
– Los trabajos anunciados por el gobierno para mitigar la vulnerabilidad en el Valle de Sula podrían demorar hasta 30 meses, previó Roberto Zablah.
– La actual temporada de lluvias deja 3 mil 500 afectados y siete muertos en Honduras.
– La nueva represa “El Tablón”, es una iniciativa del gobierno de la presidenta Castro, que pretende ser un alivio a los problemas de años que ha presentado el Valle de Sula, en tiempos de lluvias.
Un par de lluvias registradas a finales de mayo y en la primera quincena de junio son apenas el preludio de lo que podrían enfrentar los habitantes de esta zona del país, donde se genera más del 60 % del Producto Interno Bruto (PIB) de la nación.
El Valle de Sula continúa siendo una zona de riesgo por la alta vulnerabilidad ante las recurrentes y persistentes lluvias que podrían derivar en potenciales inundaciones ante la emergencia y necesidad de reparar los daños en los bordos de contención.
Ante un cambio de gobierno, la situación en el Valle de Sula sigue igual, sufre los daños que dejaron el paso por el territorio hondureño de las tormentas de Eta y Iota.
E incluso algunas zonas todavía presentan los daños que provocó el huracán Mitch en 1998, mientras los residentes mayores tienen en mente los embates del huracán Fifí que golpeó el país en 1974.
Una de las promesas de campaña de la presidenta Xiomara Castro fue reactivar la economía, por lo que el Valle de Sula representa una de las principales zonas de producción del país y la cosecha puede perderse por la vulnerabilidad ante el pronóstico lluvioso para este 2022.
Ya iniciada la temporada de lluvias en Honduras, el Valle de Sula sufrió los primeros daños dejados por las precipitaciones, específicamente en el municipio de Villanueva, donde dos menores fallecieron tras que colapsara un muro de su vivienda.
En ese sentido, las actuales autoridades abordan la problemática de la vulnerabilidad del Valle de Sula.
Tanto el gobierno como el Congreso Nacional han sostenido reuniones mientras los distintos sectores demandan que se tomen acciones para que no suceda una tragedia como la ocurrida en noviembre de 2020 cuando el Valle de Sula quedó anegado.
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Primeras acciones del gobierno
La presidenta Xiomara Castro anunció el pasado 4 de junio la aprobación del proyecto de la construcción de la cortina “El Tablón” para prevenir las inundaciones del Valle de Sula.
Durante ese fin de semana, una comitiva de funcionarios del gobierno recorrió el lugar para inspeccionar el estado de los bordos del Valle de Sula y la zona donde se construirá la represa.
La represa “El Tablón” siempre fue una las medidas que se discutieron junto a los proyectos de Los Llanitos y Jicatuyo para prevenir las inundaciones en el Valle de Sula. Se trata de un sueño largamente acariciado por los habitantes de esa zona, que se acercan a las dos millones de personas.
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Asimismo, una de las primeras medidas tomadas a corto plazo por el gobierno fueron las acciones de emergencia para la rehabilitación de los bordos, limpieza de canales y planificación preventiva.
También se reforestarán las cuencas hidrográficas e identificación de saneamientos humanos para ayuda humanitaria y reparación de albergues.
El gobierno anunció una inversión de 600 millones de lempiras para la reconstrucción de los bordos en la zona metropolitana del Valle de Sula.
Bordos en estado crítico
El titular del Fondo Hondureño de Inversión Social (FHIS), Octavio Pineda Paredes, indicó que los trabajos comenzaron con la construcción de 50 kilómetros de bordos de “14 proyectos de estados críticos”.
“Lo que queremos es mitigar y tenemos 120 días para empezar a actuar antes de que vengan las lluvias fuertes en septiembre y octubre”, dijo el funcionario.
Detalló que las obras cuentan con una partida inicial de unos 60 millones de lempiras, según nota difundida por el gobierno central.
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Altamente vulnerable
Para el ingeniero Robert Zablah, actualmente el Valle de Sula es una zona “altamente vulnerable” porque no se hicieron las medidas de mitigación necesarias para restablecer los bordos tras los pasos de las tormentas de Eta y Iota.
Manifestó que la reconstrucción de los bordos en los márgenes de los ríos Chamelecón y Ulúa no se hicieron con la calidad de los estándares de ingeniería.
Zablah aconsejó que para el próximo verano las autoridades deban restablecer los estándares de ingeniería en los niveles de protección como realizar obras adicionales en los puntos donde hay enorme presión hidráulica.
“Hay que establecer la presión hidráulica de los canales, principalmente como el Canal Maya, Canal Chotepe, Canal Campín”, enumeró Zablah.
Cuestionó el papel que desempeñó en la pasada administración la Comisión para el Control de Inundaciones del Valle de Sula (CCIVS) nombrada por el gobierno tras los huracanes de Eta y Iota.
“Empezaron muy tarde, su reacción fue tardía y empezaron cinco meses posterior a las tormentas”, reclamó el exfuncionario de la AMDC.
No se logró priorizar los que eran los puntos más vulnerables donde se podía garantizar la vida humana a acercamientos humanos al margen del río Chamelecón, criticó.
El Tablón ayudará en la seguridad
Asimismo, Zablah reaccionó al anuncio de la presidenta Castro de construir la represa “El Tablón” y lo calificó como una buena noticia para contener la crecida del río Chamelecón.
Destacó que con la construcción de esta cortina ayudará a que la seguridad del Valle de Sula no sea perjudicada con las precipitaciones aunque no serían para el invierno del presente año.
“Es una medida que hay que reconocer y aplaudir, su ejecución tardará alrededor de unos 30 meses, pero se terminará en su administración”, resaltó.
Además, Zablah mencionó que el gobierno debe identificar albergues con condiciones dignas para las familias que requieren reubicación por residir en las zonas de amortiguamiento hidráulico.
El ingeniero comentó que se debe tomar en cuenta las construcciones de las represas Jicatuyo y Los Llanitos para contener el caudal del río Ulúa.
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Sistema vial comprometido
A criterio del director de la Cámara Hondureña de la Industria de la Construcción (Chico), Silvio Larios, la red vial del país está comprometida y se vuelve más vulnerable con las lluvias registradas en el inicio del invierno.
“El tema humanitario, la seguridad vial y la productividad está comprometida”, dijo el director de la Chico, que agregó que las decisiones tardías no permiten estar preparados ante una intensa temporada de lluvias.
Empezar de cero a reconstruir las diferentes vías en los puntos de distribución importantes del país, con ello no se logrará que el trabajo se haga en tiempo, dijo Larios que remarcó las lluvias están encima.
Retrató que si las obras se ejecutan en horas de la mañana, las lluvias de la tarde deshacen lo realizado previamente, entonces el trabajo es infructuoso. AG
