Según los científicos del JPL, el cráter Victoria, con un diámetro de unos 800 metros, tiene en sus paredes lo que podrían ser muestras de la interacción de la atmósfera marciana y la superficie del planeta hace millones de años, cuando esa atmósfera era diferente a la de hoy.
«Spirit», el vehículo gemelo de «Opportunity», ascendió el pasado 5 de septiembre a una zona llana llamada «Home Plate» donde los científicos proyectan estudiar indicios de una mezcla explosiva de lava y del agua que hubo en el planeta en su pasado remoto.
Las tormentas de polvo que se desataron sobre el planeta en julio bloquearon los paneles solares de ambos vehículos y los ingenieros del JPL se vieron obligados a detener sus actividades y reducir las comunicaciones con la Tierra para ahorrar energía.
Los vehículos de seis ruedas independientes han permanecido más de 43 meses sobre la superficie marciana y pese a que sólo se les dieron tres meses de vida útil «están listos para continuar su trabajo en Marte», manifestó Alan Stern, uno de los directores de la misión.
Durante sus más de tres años de trabajo en Marte, los vehículos constataron que el planeta albergó agua en su pasado remoto, han analizado su geología y su atmósfera y han enviado más de 150.000 fotografías a los científicos del JPL.







