Tegucigalpa – Norma Rodríguez, madre de Keyla Martínez, manifestó este martes que los involucrados en la muerte de su hija tienen muy buenos abogados, mientras que su familia ni si quiera tiene dinero para pagar a sus apoderados legales.
– No tenemos ni para pagar el abogado, lamentó doña Norma Rodríguez.
“Hemos venido por los resultados de la autopsia de mi hija, pero no nos han dicho nada, vamos a regresar la próxima semana porque al parecer no están listos todavía”, dijo inicialmente tras salir del Ministerio Público.
El MP blindó los resultados de la autopsia a pocos días de ocurrir el hecho violento donde Keyla perdió la vida y en el mismo confirmó que la joven no se suicidó y que la muerte fue un homicidio.
Agregó que seguirán exigiendo justicia por la muerte de su hija, pese a considerar, que la investigación no avanza a su curso normal, porque a su juicio, ya debería haber resultados más contundentes.
Rodríguez considera que “la justicia de Honduras, es una vergüenza, porque a los involucrados los tienen escondidos y resguardados, mientras nosotros seguimos expuestos, sin ningún tipo de protección”.
El MP ha mantenido desde el inicio una investigación del caso en la que ha recabado pruebas testificales y científicas y sus portavoces han recalcado que las indagaciones no se detienen.
La madre de Keyla indicó que “nosotros no tenemos ni para pagar abogados, pero ellos si tienen buenos abogados pagados por el Estado, pero claro, nosotros tenemos que estar buscando ayuda, lo seguiremos haciendo hasta en instancias internacionales”.
En tal sentido, manifestó que ahora han tenido que recurrir a apoderados legales del Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras (Cofadeh) para poder seguir exigiendo justicia.
Concluyó diciendo que no se regresará a España, hasta que los culpables de la muerte de su hija Keyla Martínez Rodríguez “paguen y vayan a la cárcel”.
Según versión de los policías, se suicidó dentro de la celda a la que fue confinada luego de ser detenida por supuestamente protagonizar escándalo en la vía pública, andar en estado de ebriedad junto a un médico y violentado el toque de queda ya que fue requerida a las 11:45 de la noche del sábado 6 de febrero.
El presunto suicidio nunca fue aceptado por la familia y amigos de Keyla, quienes aseguraron en el suceso hubo mano criminal, por lo que demandaban que los resultados de la autopsia fueran entregados los más pronto posible para conocer en qué condiciones murió su pariente.
De acuerdo con el reporte médico de la Secretaría de Salud, a través del centro asistencial donde fue trasladada la joven, la estudiante ingresó a la sala de emergencias a las 2:55 de la madrugada del día 7 de febrero, traída por la Policía, pero ella ingresó al hospital ya fallecida. JP