Tegucigalpa – El reciente desmantelamiento de una célula del cártel mexicano de Sinaloa, de Joaquín «El Chapo» Guzmán, en El Salvador con nexos en Guatemala ligados al cartel del guatemalteco Marlon Franceso Monroy, alias “El Fantasma” y extraditado a Estados Unidos, evidencia la fuerte presencia de ese grupo transnacional del narcotráfico en los llamados países del Triángulo Norte que conforman Guatemala, El Salvador y Honduras.
El cartel de Sinaloa, considerado como la organización criminal transnacional de narcotráfico más importante del momento por sus conexiones con países de otros continentes, trazó en los países del norte de Centroamérica una fuerte presencia, siendo la última de las sorpresas El Salvador, país que se creía indemne de la presencia de estas bandas transnacionales de la droga.
Las sorpresas en El Salvador
«El Fantasma»La Fiscalía General de la República, en conjunto con las autoridades policiales salvadoreñas, desarticuló una red del cartel de Sinaloa liderada por un guatemalteco del cartel de “El Fantasma”, y en la misma capturaron a 26 personas a quienes decomisaron dinero, armas y bienes inmuebles desde donde planificaban supuestamente sus operaciones. Entre los capturados destaca una conocida presentadora de televisión identificada como Pamela Posada, según la fiscalía. Posada dijo que todo en su contra será desvanecido.
Según las autoridades, esta célula del cartel de Sinaloa está ligada al decomiso de 400 kilos de cocaína con un valor de 10 millones de dólares incautados a mediados del año pasado. La célula operaba en los departamentos de Sonsonate, La Libertad, Usulután y la capital San Salvador.
Las conexiones del cártel en el triángulo
La mayoría de los integrantes de este grupo ligado al cártel de Sinaloa son pescadores artesanales que ayudaban a transportar a los narcotraficantes que llevaban droga o combustible hacia Guatemala u otras zonas que conectaban a los países del Triángulo Norte.
De acuerdo a las autoridades, en El Salvador las bandas ligadas al narcotráfico utilizan lanchas motoras y barcos comerciales para introducir drogas ilegales a lo largo de la costa de ese país y para proveer gasolina a los barcos que se dirigen al norte.
El cartel de Sinaloa ha sido identificado como socio del grupo llamado “Los Perrones” de El Salvador, uno de los grupos de transportistas de drogas más fuertes en ese país, de acuerdo a un informe de la Oficina especializada Contra el Delito y Narcotráfico de Naciones Unidas conocido como UNODOC. Este grupo moviliza drogas entre Costa Rica, Nicaragua, Honduras, Guatemala y Panamá.
Cinco estructuras guatemaltecas y los lazos familiares
InSight Crime AnalysisEn Guatemala, informes de la DEA de Estados Unidos, indican que el cartel de Sinaloa ha operado con al menos cinco organizaciones, algunas de ellas familiares y a quienes se ha golpeado en sus estructuras. Destacan entre estos grupos, Los Mendoza que operan en El Petén e Izabal; el cartel de Los Lorenzana, en Zacapa. Este último cartel también ha hecho trabajos para Los Zetas, según las autoridades guatemaltecas,
En Honduras, Sinaloa se fincó en el noroccidente
Siempre en ese país, el cártel de Sinaloa ha tenido vínculos también con el grupo de Los Chamales que operan en el pacífico guatemalteco, en especial en San Marcos y en un sector limítrofe con Honduras.
Tomado de: .24-horas.mxEn Honduras, los vínculos del cartel de Sinaloa se afincaron básicamente en el occidente del país, en particular con el desarticulado cartel de los Valle Valle en Copán, según reportes de las autoridades, pero se afirma que opera también en los departamentos de Cortés y Santa Bárbara, donde se investiga si el líder del cartel de Sinaloa, “El Chapo” Guzmán tiene propiedades. Pero sus brazos no dejaron de tocar casi todo el país, dicen expertos que trabajan en la región.
Unidad contra el blanqueo
El Chapo Guzmán ha sido extraditado a Estados Unidos y el cartel empieza a presentar las primeras fricciones, aunque una buena parte de ese grupo mafioso se decanta por el liderazgo del amigo de Guzmán, Ismael “El Mayo” Zambada, quien al parecer logró salir ileso, junto a los hijos de El Chapo, de una emboscada tendida por uno de sus lugartenientes en la lucha por controlar el cártel, no faltan potentes alas del cartel que quieren la supremacía.
Las ramificaciones de este cartel del narcotráfico, más otros colombianos y mexicanos que también tienen sus nexos en el Triángulo Norte, ha llevado a las autoridades de los tres países a cerrar filas a nivel de sus fuerzas operativas del orden con fuerzas policiales militares trinacionales, pero también ha llevado a las Fiscalías Generales o Ministerios Públicos a blindarse en sus estrategias anticrimen.
Los Ministerios Públicos han detectado que no solo estas redes criminales deben ser enfrentadas, también otro grupo criminal que está atemorizando con la extorsión a las familias centroamericanas del Triángulo Norte como son las maras o pandillas.
Tanto el narcotráfico como las maras o pandillas están haciendo uso del blanqueo o lavado de dinero en los países del triángulo, y los fiscales generales de Guatemala, Thelma Aldana, Honduras, Fernando Chinchilla y El Salvador, Douglas Meléndez, anunciaron la creación de una Unidad Regional Contra el Lavado de Dinero.
Este es el segundo movimiento conjunto que anuncian en menos de un año. El primero fue la constitución de un bloque para identificar formas y patrones de trabajo del crimen organizado y las maras o pandillas, mediante cooperación en investigación, capacitación e intercambio de bases de datos en casos específicos frente a capturas determinadas.
Ahora anuncian la creación de una unidad especial contra el blanqueo de dinero, la cual tendrá un componente directo para seguir el tema de las extorsiones, sin dejar de lado las acciones del crimen organizado y el narcotráfico.
A medida que los equipos fiscales del Triángulo Norte otorgan fuertes golpes a la criminalidad organizada y de la corrupción, afloran los vínculos de las redes ilícitas en la esta región del istmo.
