Tegucigalpa – Un enfrentamiento entre soldados y civiles dejó el saldo de siete personas heridas en la Laguna de Ibans, Gracias a Dios, donde fue incautada una embarcación que transportaba varios barriles de combustibles.
– De acuerdo a lo informado por las autoridades militares, se trata de actividades del narcotráfico que son comunes en esa zona de La Mosquitia hondureña.
Portavoces de las Fuerzas Armadas (FFAA), informaron que mediante una alerta de traza marítima se detectó una lancha con tres motores fuera de borda, por lo que se procedió a darle seguimiento, pero los tripulantes huyeron dejando atracada la embarcación en el sector de la Laguna de Ibans.
Posteriormente, se reportó un enfrentamiento entre células ligadas a la narcoactividad que pretendían descargar la droga disparando a los uniformados y el helicóptero oficial que participaba en la operación.
Hasta el momento se reportan siete personas heridas en el enfrentamiento, quienes fueron auxiliados y trasladados en el mismo helicóptero hacia el hospital de Puerto Lempira para brindarles asistencia médica.
Entre los heridos se identificó preliminarmente a tres personas: Mardoqueo Williams Gómez, Franklin Casildo Harris y Erick Rivera.
Asimismo, se comunicó que la embarcación está asegurada a la espera de hacer una inspección en los barriles y el fuselaje de la lancha.
El instituto castrense divulgó imágenes en las que se aprecian disparos en el fuselaje de la aeronave en la que viajaban los soldados que participaron en la operación.
Dos misquitos fallecidos según informe de representante de Masta
Por su parte, el representante de Muskiti Asla Takanka (Masta), Modesto Morales, en declaraciones al noticiero TN5 estelar lamento lo ocurrido en la Costa de La Mosquitia, asegurando que las victimas no tienen nada que ver con droga.
“Tenemos misquitos humildes que salieron a ver una lancha perseguida por las Fuerzas Armadas y helicópteros hondureños desgraciadamente en esta persecución pierde la vida en este momento ya 2 misquitos inocentes y tenemos más de 7 heridos”, amplio.
Según Morales, las FFAA, deben ser más cuidadosos y perseguir a los verdaderos delincuentes y no estar combatiendo personas inocentes.
Narcopistas y cultivos de coca
El departamento de Gracias a Dios, que tiene una extensión de 16 mil 630 kilómetros y que lo convierte en el segundo más grande de Honduras, es una ruta obligada del tráfico de drogas que se produce desde el sur al norte del continente.
La mayor parte del departamento se conoce como La Mosquitia y colinda con Olancho y Colón, otros puntos importantes en la ruta del narcotráfico. Además, Gracias a Dios también colinda con Nicaragua.
Este segundo departamento más grande de Honduras, se compone de seis municipios: Ahuas, Brus Laguna, Juan Francisco Bulnes, Puerto Lempira, Ramón Villeda Morales y Wampusirpi.
En los últimos años, la zona de La Mosquitia hondureña ha sido escenario de destrucción de narcopistas y el reciente hallazgo de cultivos de arbustos de coca.
(LEER) La Mosquitia, de gran narcopista a tierra de cultivos de coca
Solo este año se han destruido 17 Áreas Clandestinas de Aterrizaje (ACA) en Honduras, la mayoría en el municipio de Brus Laguna, que se convierte en una especie de parada obligatoria de los vuelos ilícitos que descargan la droga para que continúe su ruta hacia Estados Unidos.
A inicios de agosto de este año, la Agencia Técnica de Investigación Criminal (ATIC), destruyó una nueva plantación de arbustos de hoja de coca cultivados en tres manzanas, así como un narcolaboratorio en La Mosquitia.
La interconexión de Colón, Olancho y Gracias a Dios -zonas inhóspitas- se convierten en especial atractivo para que los grupos criminales siembren coca en Honduras.
(LEER) Una mansión en el núcleo de la biosfera y 10 haciendas bordean carretera en La Mosquitia
Una narcocarretera en la zona
La zona de La Mosquitia también ha estado en la palestra en los últimos meses, al conocerse la construcción de una narcocarretera, que incluso afecta la zona núcleo de la biosfera del Río Plátano.
Entre las aristas de la construcción de esta polémica arteria vial dejó al descubierto al menos 10 haciendas, entre ellas una con un taller de carpintería con maquinaria de uso ganadero, detectada por operadores de justica, y otra mansión en el núcleo de la biosfera del Río Plátano, descubierta por militares.
La construcción “clandestina” de la carretera que unirá los departamentos de Olancho desde Culmí y Gracias a Dios, en sus poblados Wanpusirpi, Krausirpi, así como extender sus ramales hasta el núcleo del pulmón de la Biosfera del Rio Plátano, es calificada por ambientalistas y expertos, como un camino trazado por narcos y los depredadores del bosque, que terminará impactando en esa reserva, declarada patrimonio de la humanidad desde 1981 por la UNESCO.
La carretera que se comenzó a construir durante la pandemia ya avanzó 28 kilómetros desde Culmí y faltan 20 kilómetros para unir Wampusirpe con Krausirpi, ambas localidades de La Mosquitia. La intención, según actores del proyecto, es tender un lazo terrestre entre Dulce Nombre de Culmí en Olancho, hasta Wampusirpe en el departamento de Gracias a Dios para aliviar las emergencias sanitarias que se convierten en una pesadilla en la zona. El olvido y la ausencia de la mano del Estado a las necesidades básicas de las poblaciones de la región, conformadas por tolupanes, tawahkas, pech, misquitos garífunas y ladinos, ahora pone en riesgo uno de los pulmones verdes del planeta.
Pese al rechazo de diversos sectores que se oponen a la construcción de la carretera, los impulsores del proyecto han dejado claro que “no todo está dicho”.
JS
