Tegucigalpa – La discordia entre Libertad y Refundación (Libre) y el Partido Salvador de Honduras (PSH), llegó a uno de sus puntos de fricción muy elevados, cuyo conflicto involucra a los principales líderes que en su momento forjaron la alianza política que los llevó al poder.
Libre comenzó su gobierno con un fuerte conflicto interno por la presidencia del Congreso Nacional, la mayoría le apostaba a Luis Redondo, siguiendo las instrucciones de Xiomara Castro, y otra a Jorge Cálix, desde entonces el partido oficialista se encuentra en el ojo del huracán porque la polémica le rodea aun en el poder.
El partido político surgido después de la crisis política del 2009, dirigido por el expresidente Manuel Zelaya Rosales, creció desde la oposición para acceder al poder 12 años después, pero por medio de una alianza con Salvador Nasralla.
Conflictos históricos y recurrentes
En su novel existencia política, mantuvo fuertes discrepancias con el Partido Nacional, que gobernó por 12 años, también con el Partido Liberal de donde surgió, ahora desde el podio del poder, Libre no ha logrado dejar en el pasado la polémica, sino que esta se amplía aún con sus propios aliados.
Aún hay diputados oficialistas que aseguran que las fracciones internas en el partido Libre, son más evidentes que nunca, porque están siendo marginados, no son tomados en cuenta y que incluso, son obligados a votar por proyectos legislativos con los que no están de acuerdo.
Ahora la discrepancia, sin superar las internas y las desavenencias con liberales y nacionalistas, abarca al Partido Salvador de Honduras, su principal aliado político, con que lograron formar dos veces una alianza y con la última lograron ganar las elecciones de manera contundente.
Es oportuno decir que sobre las polémicas que rodean a Libre, la presidenta Xiomara Castro, no se pronunció, si apareció cuando una parte de la bancada de su partido, tomó una postura distinta a la que ella había pactado respecto al Congreso Nacional con Salvador Nasralla.
La gota que derramó el baso
Nasralla reclama de manera constante que es ignorado por la presidenta Xiomara Castro, que el acuerdo que firmaron hace un año previo a las elecciones no se cumple porque hasta ahora sus ideas y propuestas no han sido consideradas por el gobierno de Libertad y Refundación.
Al paso ha salido, Manuel Zelaya, coordinador de Libre y ahora asesor presidencial, quien le ha recordado a Nasralla las secretarías que se le dieron a dirigentes de sus partido y hasta le dijo que devolviera el dinero que la presidenta Castro le otorgó.
A eso, Nasralla respondió que no le han dado nada, que el dinero se lo da el pueblo, que además esa cantidad no se compara con los miles de millones que maneja la mandataria y añade que algunas personas que él propuso para algunas instituciones fueron rechazadas por Zelaya.
Zelaya, desde el pasado 24 de septiembre pidió a Nasralla ser honesto, el designado presidencial por su parte no ha dejado de dar declaraciones para reclamar que se cumpla el acuerdo firmado previo a las elecciones generales, mismas que ganaron con más de 1.8 millones de votos.
Los hijos de la pareja presidencial, Xiomara Hortensia, diputada y Héctor Manuel secretario privado de la presidencia, también se han sumado a las posturas contra Nasralla, lo acusan de traidor y de conspirar para desestabilizar el gobierno de Castro de Zelaya.
Se pronuncian: Pinu-SD, PSH y Libre
Pero además, líderes políticos de otros partidos se han manifestado, unos critican las acciones de Libre, incluso siendo parte de ese organismo político, la oposición por su parte, asegura que el actual gobierno improvisa y no tiene capacidad para conducir los destinos de este país.
Doris Gutiérrez, es designada presidencial por la alianza, representan al Partido Innovación y Unidad Social Demócrata (Pinu-SD), fue consultada sobre la fricción existente entre Nasralla y Libre, asegurando que debe prevalecer la voluntad popular porque esta es sagrada.
Destacó que fueron electos para gobernar y trabajar por los problemas de Honduras, no para estar en pleitos, incluso dijo que no presta atención a ese tipo de temas porque no son de alta prioridad “yo a eso no le pongo interés, no le pongo mente”, externó.
Los pronunciamientos de líderes afines a Libre, dejan entrever como que su partido no pierde nada con la ruptura con Salvador de Honduras, incluso estiman que de finalizar la alianza esta podría darse con otros partidos políticos con que coinciden en algunos temas.
¿Libre celebra o lamenta?
Marco Eliú Girón, es diputado de Libre y nunca estuvo de acuerdo con que la presidencia del Congreso quedara en manos del PSH, no descarta que las cosas se puedan arreglarse “pero en caso que ese paso no se dé, ahí está el Partido Liberal, venimos de ahí, somos hermanos”.
Linda Donaire, también diputada oficialista, se pronunció y dijo que se mantiene firme con la línea de la presidenta Xiomara Castro, esto para poder cumplir con las promesas que se le hicieron al pueblo hondureño y cree estar en el camino correcto.
Jari Dixon Herrera, es de los pocos que lamenta que la relación haya llegado a ese nivel de confrontación “es una lástima la ruptura de la alianza con el PSH, pero una cosa es la teoría y otra la práctica, esto no significa que no podamos dialogar sobre los temas que nos unen”.
Por su parte Fabricio Sandoval, dice que su alianza con Luis Redondo, sigue inquebrantable porque es el cumplimiento de la palabra de la presidenta Castro, incluso asegura que quien viene incumpliendo los acuerdos es una parte del PSH y señala a Salvador Nasralla.
PSH defiende reclamos de Nasralla
A todo esto, diputados del PSH también han reaccionado, en cierta parte coinciden con las posturas de Nasralla y aseguran que debe haber un papel más protagónico de la presidenta Castro frente a las decisiones del gobierno que integran tres partidos políticos.
Ligia Ramos, fue de las primeras diputadas que reaccionó a las declaraciones de Zelaya, sobre el fin de la alianza; incluso pidió conocer la postura de la presidenta Castro, para saber si en realidad ella comparte lo manifestado por su esposo y asesor presidencial.
Nasralla cree que es Xiomara Castro y no Manuel Zelaya, es quien debe dar por terminada la alianza con el PSH. Además reclama respeto del asesor presidencial, a quien le recuerda que su posición en el gobierno tiene mejor rango que la de él porque fue electo de manera popular.
La parlamentaria Suyapa Figueroa, defendió a Nasralla y asegura que los reclamos que este ha hecho al gobierno han sido correctos, porque el partido de gobierno debió respetar el acuerdo y más que eso velar por su cumplimiento, porque el país merece un gobierno unido.
Partido Liberal, Nacional y Sociedad Civil
Yuri Sabas, es diputado por el Partido Liberal, es del criterio que la campaña política terminó y ahora deben concentrarse en atender las demandas poblacionales, porque de lo contrario seguirán perdiendo el tiempo en discusiones que no dejan nada bueno a Honduras.
Tomas Zambrano, jefe de la bancada del Partido Nacional, insiste en que la alianza de Libre-PSH, conduce a Honduras por el camino equivocado porque no estaban preparados para gobernar, pues a su juicio siguen improvisando y en nueve meses no han dejado más que división.
Hasta hoy no se sabe, de qué lado está Luis Redondo, Nasralla dice que no le contesta el teléfono y el titular del Congreso argumenta que ni siquiera lo llama. Recientemente el 13 de octubre se cumplió un año de haberse firmado la alianza, Redondo lo festejó sin la presencia de Nasralla.
Desde la sociedad civil se perciben escenarios distintos, atribuyen la crisis política al mismo partido Libre, de quien se cree vive de la polémica, así lo manifestó Julieta Castellanos, ex rectora de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH).
Castellanos, cree que Libertad y Refundación, solo puede sobrevivir en medio de la polémica, por eso tienen muchos adversarios que son constantes a sus políticas y cuando estos no existen, el propio partido Libre los creo.
Todo esto transcurre a escasos meses en que el Congreso Nacional, deberá conformar la nueva Corte Suprema de Justicia y Fiscal General de la República, sobre estos temas existen muchos desacuerdos, Libre pretende los 15 magistrados, dice la oposición, que cree estar lista para impedirlo, por su parte el oficialismo dice le apuesta a un proceso correcto y transparente. JP