Tegucigalpa– Una madre, junto a su esposo, exigieron a las autoridades de Barcelona, España que la muerte de su hijo no quede en la impunidad y que sea esclarecida.
El 12 de septiembre, Darling, un joven de 16 años de origen hondureño recibió varias puñaladas en las inmediaciones de la estación de metro Santa Eulàlia, en la zona limítrofe entre Barcelona y L’Hospitalet.
En el mismo incidente, otro menor de 16 años, de nacionalidad colombiana, resultó herido leve en un brazo.
Darling había llegado a España hace tres años con la ilusión de construir un mejor futuro.
Según relató su padrastro el adolescente soñaba con convertirse en ingeniero y recientemente había sido premiado con un viaje a Francia y Suiza por sus destacadas calificaciones académicas.
La madre del jovencito, relató en conversación con HCH, que la noche del lunes, el joven salió de casa para ayudar a unos amigos: primero devolviendo una sudadera y luego asistiendo a otro que había perdido las llaves. Minutos más tarde, su familia recibió la desgarradora noticia del ataque.
Los Mossos d’Esquadra, han iniciado una investigación y, aunque en un principio se especuló con un posible vínculo con pandillas juveniles, la policía catalana descartó esta hipótesis. Durante la jornada, se entrevistó a testigos y a los jóvenes que acompañaban a la víctima.
La madre de Darling, quien recientemente obtuvo la nacionalidad española tras años de esfuerzo, afronta ahora el dolor de perder a su hijo en circunstancias violentas.
La familia pide que el crimen no quede impune, mientras que la comunidad hondureña en Barcelona ha expresado su indignación y solidaridad frente a la tragedia. IR
