Tegucigalpa (Por Isis Rubio) – Más de 400 pacientes con cáncer claman por sus vidas y sus tratamientos en el Hospital San Felipe, de la capital hondureña, una historia que se reedita con frecuencia en el sistema sanitario público.
– En los próximos ocho meses se estará habilitando un búnker con dos aceleradores lineales nucleares para atender a los pacientes de cáncer.
– El abastecimiento de medicamentos para la atención de la enfermedad oscila en un 70 %, aseguró el subdirector del San Felipe.
El casi medio millar de pacientes, que sus vidas dependen de los tratamientos a tiempo, demandan acciones urgentes que les permita asegurar sus procesos clínicos.
Se prevé que en las próximas semanas se estarían realizando las quimioterapias en el Centro de Cáncer Emma Romero de Callejas, lo que representa una luz para estos pacientes que diariamente luchan por sus vidas.
Proceso Digital conoció de la propia voz de los pacientes cuáles son sus demandas, sus quejas y sus temores. Para el caso, doña Abigail del Carmen Valdés, una paciente oncológica que se encuentra ingresada en el Hospital San Felipe a la espera que se le puedan realizar sus radioterapias para continuar luchando con su vida.
Su hija Maryori relató que su mamá tiene cáncer en la mandíbula izquierda, por lo que el médico le recetó 36 radioterapias, de las cuales sólo ha recibido seis.
Indicó que tras la última radioterapia su progenitora ha quedado débil, por lo que se encuentra ingresada en la Sala de Oncología de ese centro hospitalario.
Agregó que ya le corresponde a su madre colocarse la séptima radioterapia, pero la máquina aún no está funcionando, por lo que el médico le dijo que están a la espera que se firme un convenio con el Centro de Cáncer Emma Romero de Callejas.
Detalló que familiares de otras pacientes que se encuentran ingresadas en ese nosocomio fueron a cotizar al Centro Emma Romero y cada radioterapia es muy cara por lo que no disponen con la cantidad de dinero que se necesita.
“Yo le pido a las autoridades que se pongan la mano en el corazón ya que todos tenemos necesidades, pero no el dinero para solventar las mismas, las condiciones del país no son las mejores y venimos desde La Paz, contamos con escasos recursos para pasar los días que mi mamá pueda estar ingresada”, confesó.
Reflexionó que la pena en estos casos se debe de hacer a un lado, hay que empezar hacer actividades para recolectar dinero y poder seguir en esta lucha contra el cáncer que libra mi mamá.
“No queremos morir”
De su lado, la paciente Rita Figueroa compartió que hace cinco meses fue operada y hace tres meses debió iniciar su tratamiento oncológico, pero no cuenta con los recursos necesarios.
Figueroa consideró que no es necesario esperar que un paciente muera para iniciar a ayudar.
Comentó que las radioterapias tienen un costo mayor a los 65 mil lempiras, mientras que el tratamiento de seis ciclos asciende a 48 mil lempiras.
En su caso requiere de 25 radioterapias, retrató, al tiempo que lamentó que en los hospitales públicos también se enfrenta al enorme desafío de maquinaria en mal estado.
Sin embargo, consideró que existen otros pacientes que requieren mayor ayuda, por lo que expresó: “Si no me pueden ayudar a mí, ayuden a otros pacientes que lo necesitan”.
De su lado, la paciente Gladis Colindres, consideró que la ayuda debe ser urgente ya que la enfermedad avanza a pasos agigantados.
Compartió que ella requiere de 25 radioterapias y si no las realiza su vida peligra. “Yo no quiero morir”, imploró entre lágrimas.
Al igual que ellas, decenas más de pacientes no pueden costear ni los medicamentos, ni los costos de los estudios y el tratamiento oncológico.
Convenio con el centro Emma Romero
El subdirector del Hospital San Felipe, José Elías Mendoza, en conversación con Proceso Digital dijo que las máquinas de cobaltoterapia son obsoletas de los años 70, 80, y han tenido desperfectos mecánicos y se han ido reparando, pero ya están desfasadas.
Detalló que durante los tres meses anteriores se ha venido haciendo gestiones de un convenio con el Centro de Cáncer Emma Romero de Callejas para que las pacientes del San Felipe puedan ser atendidas en ese lugar.
Recordó que todo trámite tiene que ir cumpliendo la Ley de Contratación, por lo que en las próximas semanas ya se estarán atendiendo a estos pacientes en dicho lugar para ir saliendo con la mora que se tiene con las pacientes. Señaló que la mora oscila entre los 400 pacientes.
Sostuvo que el convenio será por el tiempo que dure la construcción e instalación de los dos aceleradores lineales que podrían durar entre siete a ocho meses.
Construcción de búnker
Explicó que ningún gobierno anterior se preocupó por hacer una nueva licitación para la adquisición de las máquinas, es por ello que el ministro de Salud (Manuel Matheu), ha estado trabajando con las autoridades del hospital para modernizar el área de diagnóstico y tratamiento de la sala oncológica y otras áreas.
La adquisición, a través del Organismo de Medicina Nuclear, de una donación de dos aceleradores nucleares que son para brindar atención de radiación de última generación a los pacientes que tienen cáncer, es en lo que se trabaja, manifestó.
Agregó que el convenio lleva a la construcción de un búnker que ya fue adjudicado a través de Sedecoas y Finanzas.
En ese sentido, dijo que la construcción del mismo empezará en los próximos días, esto va a venir a modernizar el tratamiento de los pacientes con cáncer en Honduras.
Son dos aceleradores lineales por lo que el búnker tendrá dos espacios para la instalación de las máquinas, arguyó.
Repuesto de máquina
Asimismo, dijo que han tenido problemas obviamente porque las máquinas con que cuentan no tienen repuestos, son dos máquinas una de 80 y otra de 100, la de 80 caducó por lo que a través de la Organización Mundial de la Salud (OMS), se trasladará la misma hacia un cementerio de Cañada ante la radiación que emana.
Se logró conseguir el repuesto de la otra máquina de cobaltoterapia de 100 por lo que este repuesto está en la fase de compra y vendrá al país en las próximas semanas.
Aseguró que el centro hospitalario tiene un 70 % de abastecimiento de medicamentos para la atención de los pacientes.
A esta realidad se suman centenares de pacientes que reciben tratamientos de diálisis en el Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS), donde al menos dos murieron en los últimos días aunque las máximas autoridades del centro asistencial afirmaron que se trató por otras enfermedades y no por falta de sus procedimientos médicos. IR
