Tegucigalpa – Con el paso del tiempo los incentivos a las inversiones se convirtieron en un privilegios y abusos, señaló este miércoles el ministro de la Presidencial, Rodolfo Pastor de María.
Inicialmente, destacó la derogación de fideicomisos y afirmó que ahora se transparentará el uso de los recursos públicos desde una cuenta pública del gobierno.
Recordó que cuando los recursos públicos estaban en un fideicomiso eran operados con discrecionalidad.
Pastor de María enfatizó que el Estado debe tener la capacidad de hacer la inversión pública que permita el acceso a salud, educación, energía eléctrica a precios competitivos y una buena infraestructura.
Aunque aclaró que el incentivo a la inversión, pero que no puede a ser costas de los ingresos del Estado y el bienestar de la población.
Los incentivos tienen que darse de manera específica, puntal, por un período de tiempo determinado, añadió.
Ejemplificó que incentivos que pueden ofrecer a los inversionistas es un país seguro, infraestructura y energía del que puedan depender y seguridad jurídica.
“Lo que en algún primer momento pudo haber sido un incentivo a la inversión, se convirtió en un privilegio, abuso y corrupción”, condenó.
Señaló que el gobierno no puede tener un Estado que no reciba impuestos y no puede dar salud y educación a su población porque no le alcanza el dinero. AG