Tegucigalpa – Desde 2013, que operan tres radares en zonas estratégicas de Honduras, se detecta “un narcovuelo” cada cinco días en promedio, conoció Proceso Digital por fuentes oficiales de la Secretaría de Defensa, aunque en la actualidad estos aparatos tecnológicos están inoperativos.
– La operación de los radares le cuesta 40 millones de lempiras anuales a Honduras y los mismos se adquirieron con fondos de la Tasa de Seguridad a un costo de 612.5 millones de lempiras.
– Este 2022 apenas una narcoavioneta ha sido incautada por las autoridades hondureñas.
– Desde 2005 Honduras ruega a EEUU para la reparación de los aviones F-5, pero no hay respuesta.
Lo anterior contrasta con las declaraciones de altos funcionarios de gobierno, incluido el secretario de Defensa, José Manuel Zelaya, quien se quejó que es difícil luchar contra el narcotráfico en las condiciones que encontraron las Fuerzas Armadas y prácticamente sin radares operativos.
“Queremos tener los escudos aéreos completos porque cómo podemos hablar de una lucha contra el narcotráfico real, si recibimos unas Fuerzas Armadas con deficiencias”, dijo hace unos días el ministro de Defensa.
El secretario Zelaya abogó por escudos aéreos completos para combatir el flagelo de la narcoactividad, al tiempo que aseguró que existe “una doble moral” en la política antidroga que este gobierno está dispuesto a cambiar.
Las declaraciones del ministro de Defensa van en la misma línea que lo expresado por su tío, el expresidente y ahora asesor del Poder Ejecutivo, Manuel “Mel” Zelaya, quien disparó las alarmas al revelar que los radares están inoperativos y por lo tanto no puede existir combate al narco.
“Si no hay radares aquí (Honduras) cómo identificamos el paso de la droga, a saber cuántas pasarán (avionetas), no hay radares”, confesó el exmandatario hondureño.
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Situación actual de los radares
En las consultas hechas por Proceso Digital a la Secretaría de Defensa, se informó que los radares funcionan, pero algunos están en fase de mantenimiento de acuerdo con orden técnica.
Los tres radares instalados desde 2013 en las costas del Caribe hondureño consumen un presupuesto anual de 39 millones 987 mil 980 lempiras para mantenerse operativos.
Es importante mencionar que en 2014 Estados Unidos suspendió su cooperación para compartir información de radares aéreos con Honduras en su lucha contra el narcotráfico, después de que este país centroamericano aprobara una ley que le permite derribar aviones sospechosos de transportar drogas.
La fuente oficial dijo que Honduras ocupa más radares para detectar el paso de la droga que viene desde el sur del continente y que va rumbo a Estados Unidos, pero ahora mismo el impasse es la inoperatividad de los tres que existen.
En los últimos 11 años el número de vuelos ilícitos detectados es de 78 aeronaves por año, reveló la fuente de la Secretaría de Defensa.
Los radares encargados de detectar vuelos ilícitos son operados exclusivamente por personal hondureño, agregó la fuente.
La compra de los radares se realizó a la empresa de Israel MER SYSTEM Security and Communications Solutions, por lo que se asignaron 25 millones de dólares (612.5 millones de lempiras) realizando los pagos a través de la Tasa de Seguridad para la compra de estos instrumentos.
Nulos los narcovuelos este año
Lo que era una constante en años anteriores, el decomiso de avionetas utilizadas para el transporte de drogas, este 2022 prácticamente ha sido nulo en ese sentido.
Apenas el pasado 4 de febrero, la Policía Nacional informó que investigaba dos videos que circulaban en redes sociales y que tendrían que ver con una narcoavioneta que fue encontrada una semana antes en San Esteban, departamento de Olancho.
El jueves 27 de enero, mientras se producía la toma de posesión de Xiomara Castro como presidenta de Honduras, la Policía encontró una narcoavioneta en San Esteban, Olancho.
El informe oficial actualizado da cuenta que en el presente año se han registrado fuertes golpes contra el narcotráfico, con el corte e incineración de más de 4 millones 277 mil 639 arbustos de hoja de coca, la inhabilitación de 13 áreas clandestinas de aterrizaje, el desmantelamiento de 23 narcolaboratorios y el decomiso de más de 4 mil 600 paquetes de cocaína, no así la intercepción de narcovuelos. PD
