Tegucigalpa (Proceso Digital) – El gobierno de la presidenta Xiomara Castro tiene buenas ideas e intenciones, pero tras un año de funciones llegó el momento de implementar su programa de gobierno, ya que al final el pueblo juzga las acciones, señaló el ex embajador de Estados Unidos en Honduras, Hugo Llorens.
-No trabajo como lobista de la administración Castro en Washington.
-La CICIH deberá estar activa ya el próximo año y sus investigaciones deben ser casos de “alto nivel”.
En una plática con Proceso Digital el diplomático planteó que al final las ideologías están bien, cada uno puede tener sus propias ideas y hay que respetarlas, pero al final el éxito de los gobiernos es que se implementen los programas bien concretos y que contengan políticas con sentido común y que resuelvan los problemas de las personas.
Llorens, que se encontraba como embajador estadounidense en Honduras en junio del 2009 cuando salió del poder el entonces mandatario Manuel Zelaya, indicó que favorece una comisión internacional anticorrupción y señaló que la misma debe investigar casos de “alto nivel”, de todos los gobiernos.
En cuanto a lo que se informó que es asesor o lobista de la administración de la presidenta Xiomara Castro en Washington, el ex embajador negó trabajar para la actual administración.
“Quiero decir categóricamente que no tengo ningún papel de trabajo y relación profesional con el gobierno”, dijo Llorens.
A continuación la entrevista de Hugo Llorens dada a Proceso Digital:
Proceso Digital – ¿Cuál es el propósito de su visita a Honduras en el contexto actual del país?
Hugo Llorens – La visita mía es de carácter privado. Después que me retiré del trabajo de gobierno a finales de 2017, mi última misión fue como embajador de Estados Unidos en Afganistán. He creado mi propia pequeña empresa de consultoría, con clientes en Europa, Asia, América Latina y Estados Unidos. Basado en eso, tengo un cliente hondureño basado en San Pedro Sula, es una visita de carácter privado, de mi negocio, pero tú sabes tengo muchos amigos en Honduras, quiero mucho al país.
PD ¿El gobierno actual es parte de su cartera de clientes, es asesor de la presidenta Xiomara Castro?
H LL – Mire, tuve una reunión con la presidenta Castro y el presidente Zelaya, así como su equipo de gobierno, el canciller Reina. Si se habló de tener algún tipo de relación de asesoría, trabajar un poco para el gobierno en Washington, pero la verdad es que por un anuncio de Casa Presidencial no es exactamente correcto, yo no tengo ninguna relación formal, profesional con el gobierno.
No he trabajado para ellos en ningún momento, es importante clarificar eso. He tenido charlas con esa posibilidad y uno no sabe qué podría ocurrir en el futuro, tengo una buena relación con ellos, respeto mucho a la presidenta Xiomara Castro, es una buena persona que tiene buenas intenciones y quiere hacer un buen gobierno para el país.
Pero es bueno clarificar para el pueblo, estuve en el hotel en mis negocios y llegaron como 40 personas para decir que yo era lobista para Honduras y no es el caso.
Quiero decir categóricamente que no tengo ningún papel de trabajo y relación profesional con el gobierno.
PD ¿De la Honduras del 2009 a la Honduras del 2023 cuáles son sus valoraciones?
H LL – Creo que ha habido un deterioro continuó en Honduras, creo que la ruptura, la crisis política que resultó un golpe de Estado ejecutado por las Fuerzas Armadas contra el presidente Zelaya, creó que dañó mucho al país y fracturó las instituciones del Estado. Nosotros trabajamos muy duro para salvar esa situación y fue muy compleja, restaurar el orden constitucional, usted sabe que la secretaria de Estado (Hillary Clinton) me pidió que me quedara, yo era el único embajador que se quedó en Honduras, la secretaria de Estado me pidió que me quedará con el propósito de evitar un baño de sangre en el país y tratar de restaurar el gobierno legítimo, pero después vino la elección y el gobierno del presidente (Porfirio) Lobo y trabajamos muy duro para reintegrar a Honduras en el sistema internacional que había sido excluido después del golpe de Estado y trabajamos muy bien con el presidente Lobo.
Logramos que el presidente Zelaya volviera, creo que esa fue una decisión muy sabia de parte del presidente Lobo como estadista que fue muy de tratar de unir a la familia hondureña, que es lo que más se necesita, una familia unida todo es posible.
Pero desafortunadamente estas divisiones políticas que existían nadie es completamente inocente, hay fallas de todas las partes, pero resultar en un golpe de Estado dañó completamente el país.
Luego tuvimos el gobierno de Juan Orlando Hernández, un gobierno que el presidente Hernández trató de mantener relaciones productivas con Estados Unidos, lo que sabemos fue un gobierno que tuvo una alta incidencia de corrupción, hay unas alegaciones muy serias como sabemos sobre la participación del gobierno y otros miembros del gobierno al tema del narcotráfico que es muy seria y el daño mucho al país.
Todo eso fue muy negativo, un deterioro total, institucional que la gente normal habla como Honduras se convirtió en narcoestado y el pueblo hondureño es trabajador, joven, gente buena que quiere un país mejor y realmente la clase política ha defraudado completamente al pueblo.
Pero uno nunca se rinde, Honduras mostró mucho de su vocación democrática con las elecciones que ocurrieron en noviembre 2021, fueron unas elecciones transparentes, limpias y el pueblo mandó, su voz se escuchó y fue de dar un mandato muy fuerte a la presidenta Xiomara Castro, ella tiene este mandato y tiene un año.
La presidenta Castro heredó una situación muy complicada, no solo en el problema grave de la corrupción, también un sistema de justicia completamente desbaratado, los sistemas de educación y salud pública colapsados, una crisis económica grande, en parte es una crisis global como la inflación, que afecta a Estados Unidos y a Honduras, pero aquí la gente tiene ingresos limitados es un golpe muy grande.
He estado viendo como los precios de la comida están realmente ahogando a las familias hondureñas.
El problema de las finanzas públicas, el gobierno de Juan Orlando Hernández dejó un gran problema de deuda, un gran problema de déficits muy grandes en las finanzas públicas, un gran problema, la presidenta Castro viene con una intención de hacer un gobierno más honesto, tratar de restaurar la fe del pueblo, las instituciones, entonces diría que el primer año es más como establecer el programa de gobierno en la parte económica, de gobernabilidad, la parte contra la corrupción, la parte económica, está eso.
Pero yo lo que sí diría, siempre hablo muy honesto, es que en el año 2023 es el momento de implementar, puedes tener buenas ideas y buenas intenciones, pero en el final el pueblo va a juzgar este gobierno si logra implementar un programa coherente, su programa pero que lo implemente, esas son cosas muy concretas, muy tangibles y enfatizaría que en casi los 40 años que estuve en diplomacia en todo el mundo, de Afganistán hasta Australia, Honduras, Argentina, Canadá, es que las ideologías están bien, todo el mundo tiene sus ideas, hay que respetarse uno a otro, pero al final si quieres ver países que tienen éxitos, son gobiernos que implementan programas bien concretos, que tienen políticas con sentido común y que resuelven problemas del pueblo, como problemas de educación, hablar mucho es lindo, pero las palabras al final cuentan poco.
Ahora el pueblo tiene grandes esperanzas en la presidenta Xiomara Castro que es una buena persona y tiene muy buenas intenciones, por eso es importante que todo el gobierno se una y empiece a implementar el programa de gobierno.
PD. Honduras está en una etapa crucial, tanto para la acción, pero en la institucionalidad, estamos ante la elección de la CSJ. ¿Cómo valora la situación?
H LL – No soy experto, ni abogado constitucional, pero tengo poco conocimiento de la Constitución y conozco la ecuación política bastante bien, pero no estoy íntimamente involucrado en este tema.
Pero venimos de uno de los problemas más graves que tiene Honduras es un sistema de justicia que tiene cero credibilidad, que hay un alto grado de corrupción dentro del sistema y es un sistema que sirve al dinero, que sirve al señor dólar o al señor lempira y no sirve al pueblo, no hace una justicia equitativa, es una justicia que se puede comprar.
Si uno quiere ser algo para el país, entonces la Constitución lo tiene que es un momento de elegir el Congreso una nueva Corte Suprema, la Corte anterior lo que uno tiene que ver es que le dio al presidente Juan Orlando Hernández un segundo período y es una burla uno solo tiene que leer la Constitución y leer los artículos primeros de la Constitución y no se permite reelección, él puso gente, estaban ahí, no había ninguna independencia, no había poderes separados independientes, él básicamente les decía que hacer y ellos le respondieron, esa Corte no tiene ninguna credibilidad, entonces es un imperativo para empezar el camino de crear la restauración de justicia en Honduras es tener la autoridad suprema nueva de magistrados calificados, lo más importante para mí no es si los magistrados son de x partido, yo lo que estoy interesado, he estado viendo el resumen el currículo de la gente, que son gente que tiene experiencia, que son muy calificados en materia judicial al más alto nivel, que son los mejores juristas de Honduras y que tienen buen nombre, que son nombres intachables, que son patriotas y que van a servir honorablemente a este buen pueblo.
Lo que yo espero es que la clase política, el partido Libre, el Nacional, el de Salvador Nasralla y los liberales se unan, que la clase política asuma su responsabilidad y elijan una buena Corte, que el pueblo hondureño esté orgulloso.
Pero si me preguntas la fórmula, yo no soy político, yo no vivo en Honduras, pero creo que si esto no sale es una mala señal, es una mala señal que la clase política de este país no es seria.
PD – ¿Será posible instalar en Honduras una misión anticorrupción independiente?
H LL – Es muy claro que para la presidenta Castro una de sus prioridades es ser un gobierno honesto, es decir la corrupción significativa nunca se elimina completamente, pero reducirla empieza con el Presidente. Mi experiencia en el mundo diplomático es que si un presidente o presidenta es una persona íntegra y honesta se reduce la corrupción, con solo eso se reduce la corrupción en un 50 %, pro si el presidente o presidenta tiene un cuchillo en la boca y es un ladrón de primera categoría entonces es como una orgía de corrupción.
En esa parte me siento bien, de que la parte de corrupción va a bajar en el gobierno de Xiomara Castro, pero lo más importante es crear las bases institucionales para que haya políticas que se puedan sustentar a largo plazo que pueden mermar la corrupción.
Entonces en el tema de CICH, Honduras necesita ayuda internacional, lo más importante es que Honduras lo haga, la presidenta está en lo correcto de pedir ayuda de la CICIH, pero recuerda que comencé que es importante tener la idea, pero lo más importante es implementarla.
Ojala que ya el año que viene la CICIH este bien implantada en Honduras y este no como líder, sino como una herramienta de apoyo a las autoridades legales y del gobierno que puedan embarcar el proyecto anticorrupción, pero lo más importantes es tener la capacidad de investigar casos de corrupción de alto nivel, sea del gobierno o en el pasado, no solo del pasado, uno no puede tener una política que la ley para mi enemigo y el negocio para mi amigo y eso es lo que pasaba en el gobierno de Juan Orlando Hernández, que eso era la filosofía de ellos, la ley para mi enemigo y el negocio para mi amigo.
Las investigaciones que vayan donde tengan que ir y entonces veremos, al final lo concreto se va a implementar, tengo fe que se va a implementar la presidenta Castro quiere hacer esto, pero necesita que el gobierno le ayude mucho. (PD)