San Salvador – El enviado especial del Gobierno de Estados Unidos para el Triángulo Norte de Centroamérica, Ricardo Zúñiga, intentó sin éxito reunirse este miércoles con el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, según declaraciones de un funcionario de la embajada de ese país a un medio local.
El sitio en internet elsalvador.com, perteneciente a El Diario de Hoy, señaló en una publicación que el jefe de Asuntos Públicos de la embajada estadounidense, Matt Boland, dijo al medio que «el enviado especial Zúñiga esperaba reunirse con el presidente Bukele durante su visita a El Salvador y se solicitó una reunión».
No obstante, según ese medio, «Boland añadió que esperan se presente una nueva oportunidad en el futuro».
Varias horas antes en una rueda de prensa en Washington, el portavoz del Departamento de Estado de EE.UU., Ned Price, se negó a aclarar si Zúñiga se reuniría con Bukele durante su visita de dos días.
«No tenemos ningún encuentro del que informarle, pero si eso cambia estaremos encantados de hacerlo», se limitó a decir Price al ser preguntado por Efe.
El único alto funcionario del Gobierno de Bukele que se reunió con Zúñiga fue la ministra de Relaciones Exteriores, Alexandra Hill, según lo dio a conocer en Twitter el encargado de negocios del país norteamericano, Brendan O’Brien.
«Todos coincidimos en la necesidad de mejorar la situación económica y de seguridad para que los salvadoreños no se sientan obligados a emprender #UnViajeEnVano en busca de oportunidades», señaló el diplomático.
También «discutimos cómo fortalecer aún más nuestra excelente cooperación bilateral», agregó.
Ni el presidente Bukele ni la canciller Hill han hecho referencia a la visita de Zúñiga en sus redes sociales.
El martes Zúñiga manifestó en Guatemala que Estados Unidos busca que ese país cree «condiciones habilitantes» para sus ciudadanos como el Estado de derecho, empleo, salud y educación, para minar así la migración irregular.
Antes de partir hacia territorio salvadoreño, donde continuará y culminará su visita por la región sin llegar a Honduras, Zúñiga subrayó que esas nuevas condiciones que buscan ambos Estados son necesarias «para que los guatemaltecos y otras personas de Centroamérica y México no tengan qué hacer sus futuros en los Estados Unidos».
El Triángulo Norte de Centroamérica, compuesto por Guatemala, El Salvador y Honduras, es una de las regiones más pobres y violentas del planeta, según diversos estudios de organismos internacionales.
Cada año, más de 500.000 personas procedentes de estos tres países intentan emigrar de manera ilegal a Estados Unidos en busca de mejores condiciones de vida, incluyendo miles de menores de edad. JP