Tegucigalpa – Este jueves se desarrolló la audiencia preparatoria al juicio por narcotráfico para el expresidente Juan Orlando Hernández; el exjefe de la Policía, Juan Carlos “El Tigre” Bonilla; y el exoficial Mauricio Hernández Pineda. El juez Kevin Castel mantuvo su postura de arrancar el debate el próximo 5 de febrero, pese a los alegatos de los imputados y sus defensas.
– El expresidente Hernández se quejó de una defensa incompetente, pidió un defensor público tras despedir prácticamente a Colon y denunció amenazas contra su familia en Honduras.
– “No hay tiempo para nuevos abogados”, dijo el juez Castel a solicitudes del expresidente Hernández y el exjefe policial “El Tigre” Bonilla.
– Castel mostró una gráfica sobre la estructura de tráfico de drogas en el continente, que incluye al expresidente Juan Orlando Hernández.
Los tres hondureños acusados por delitos de narcotráfico se presentaron este jueves al estrado ante el juez Kevin Castel, quien en todo momento dejó claro que el inicio del juicio, el próximo 5 de febrero- no sufriría retrasos, pese a los reiterados pedidos de los imputados, según relató el periodista Matthew Russell Lee de Inner City Press.
El expresidente Hernández llegó esposado con su traje de presidiario color verde olivo desteñido, con barba entrecana y aspecto serio. Los otros dos procesados, Bonilla de verde oscuro con camisa blanca, y Pineda de amarillo con camisa blanca, también portaban esposas en sus manos y pies. Únicamente Pineda tenía mascarilla en la boca. Cada uno se sentó a la par entre espacios de una o dos sillas. Se miraban entre sí a medida avanzaba la audiencia.
Solo cuando se sentaron, con una silla de separación entre cada uno, les quitaron la cadena, y se las volvieron a poner al terminar la audiencia en el Tribunal del Distrito Sur de Nueva York (Manhattan).
Al acusado, Juan Orlando Hernández lo acompañaron los abogados, Raymond Colon y Sabrina Shroff. Mientras Juan Carlos Bonilla Valladares estuvo presente junto a los abogados Raoul Zalzberg, Bernarda Villalona y César De Castro. En tanto, Mauricio Hernández Pineda se hizo acompañar del abogado Richard Ma, Ken Womble y Cory García.
En el inicio del debate preparatorio al juicio, se citó que en los libros de contabilidad del capo, que fue exalcalde de Florido (Copán), Alexander “Chande” Ardón, se aprecian las iniciales de JOH.
Además el juez Castel dijo admitiría las fotos del teléfono de Juan Antonio “Tony” Hernández en la que aparece el nombre de JOH en una ametralladora presuntamente regalada, aunque también un cargamento de 650 kilos de cocaína llevaba la misma marca.
De acuerdo al relató, el juez Castel admitió como prueba las comunicaciones electrónicas (correos, fotografías, videos y otros) sobre la cocaína que lleva el sello «TH«, en alusión al hermano del presidente, Tony Hernández, condenado en marzo de 2021 a cadena perpetua y 30 años de cárcel por delitos de narcotráfico.
Se agrega que los co-conspiradores CC-5 y CC-6 (exfuncionario y familiar) no están disponibles y no tenían ningún incentivo para mentir. Cada vez que Castel se refería a Mauricio Hernández Pineda lo hacía con el seudónimo de “Paneira”.
En su intervención y bajo su forma elocuente de hablar, Hernández le dijo al juez que sabía era un hombre justo, por lo que apeló a su conciencia para conceder sus peticiones. En varias ocasiones el exgobernante volteó al público como buscando a algún conocido.
Visiblemente delgado, demacrado y cansado, Hernández bostezó en varias oportunidades durante la audiencia de este jueves.
Hasta evidencias del descalabro al Seguro Social, como parte de la coconspiración, serán aportadas en el juicio porque fueron fondos que se invirtieron en la candidatura de Hernández, se conoció.
Igualmente, se conoció que la Fiscalía presentará dos testigos protegidos (se ocultarán sus identidades por seguridad) que declararán sobre el asesinato de Nery Orlando López, más conocido como Magdaleno Meza, en una cárcel de máxima seguridad en octubre de 2019, presuntamente ordenada por los hermanos Hernández Alvarado.
Posibles testigos
Entre los posibles testigos en el juicio figura Víctor Hugo Díaz Morales alias “El Rojo”, quien habría pagado sobornos al exjefe policial “El Tigre” Bonilla para proteger cargamentos de droga. Asimismo, se mencionaron presuntos pagos de Joaquín “El Chapo” Guzmán para las campañas políticas de los expresidentes Porfirio Lobo y Juan Orlando Hernández.
Otro de los que intervendrá en el juicio es el exalcalde de Florido, Copán, Amílcar Alexánder Ardón, alias “Chande” o “Triple A”, así como “El Cachiro” Devis Leonel Rivera Maradiaga.
Testimonios que salieron a relucir en el juicio del capo Geovanny Fuentes Ramírez también serán usado, se informó.
Estrategia de la defensa
El abogado defensor de Hernández, Raymond Colon, durante su intervención, dijo que el expresidente quería destituirlo, pero Castel fue enfático al asegurar que ya falló en ese sentido.
En ese momento, el exmandatario hondureño se levantó frente al estrado, por lo que Castel lo llamó a que tomara asiento. Hernández insistió que Colón no lo ha representado como es debido porque hace seis meses está con serios padecimientos de salud.
Hernández se quejó que no ha podido hablar con su abogado en Honduras. “Necesito citar a testigos de Honduras. Necesito una computadora portátil. Pero la persona que me refirió a Colón dice que la DEA lo reclutó para infiltrarse en mi defensa”, acusó.
Igualmente, el exgobernante denunció que no le permiten recaudar fondos (GoFundMe) para su defensa legal, al tiempo que insistió: “Necesito un abogado público, no puedo continuar con este juicio”.
También reveló que recién se enteró de las amenazas a muerte contra miembros de su familia, y señaló a los fiscales no haberle informado esos acontecimientos. Reiteró que le urge un defensor público porque EEUU lo llevó para un juicio y lo comparó a los tiempos de la colonia cuando los países sufrían la tiranía de Inglaterra.
Mientras, el abogado Colon insistía que no era apto para continuar con la defensa del caso y que se informó la tarde sobre la amenaza a la familia de Hernández, el debate continuó con la comparecencia de los imputados y la intervención de la Fiscalía.
El expresidente Hernández se quejó de una defensa incompetente, pidió un defensor público tras prácticamente despedir públicamente a Colon y reiteró presuntas amenazas contra su familia en Honduras.
Colon confesó que Jorge Levy fue a Honduras, reportando a la DEA, y dijo que podría obtener un indulto para Tony Hernández por parte del expresidente Donald Trump.
Adicionó que Levy incluso lo mencionó a él -juez Castel- en sus aseveraciones.
Relató que estuvo por Honduras cuando asesinaron a Said Lobo, hijo del expresidente Porfirio Lobo, y Levy lo culpó de estar relacionado con el suceso.
Interviene “El Tigre”
Durante el debate de este jueves, otro de los imputados, Juan Carlos “El Tigre” Bonilla, anunció que apelaría por falta de equipo de defensa.
Además, se quejó de no tener la asistencia médica porque ha estado sangrando de los dientes, una situación que ha debilitado su condición de salud.
En tono de súplica y hablando en voz baja, Bonilla negó ser un delincuente o criminal, como citan los documentos de la Fiscalía de New York. A lo que Castel le respondió que puede testificar ese extremo en el juicio. Bonilla intervino para afirmar: “Te envié una carta el año pasado, que mi abogado no me representa, está indispuesto”.
El defensor de Bonilla relató que llevaron otro abogado, que el material 3500 (evidencia) lo tenía tenso y que semanalmente lo revisaban dos veces por semana. Sin vacilar el juez Castel respondió: “No hay tiempo para nuevos abogados”.
Se adelantó que la mañana de 5 de febrero se escogerá a los miembros del jurado, quienes deben tener la seguridad necesaria por lo complejo del caso.
El juez Castel denegó todas las peticiones de JOH y aceptó las de la Fiscalía: será un juicio con un jurado anónimo y los llamados a declarar entrarán en el programa gubernamental de protección de testigos, dos provisiones que cada vez son más frecuentes en los casos de narcotráfico.
La abogada experta en información clasificada, Sabrina Shroff estuvo presente en la audiencia y al salir de la sala lucía desconcertada y frustrada, incluso se irritó por la pregunta de uno de los asistentes y respondió que no tenía la autorización para hablar al respecto.
El debate, que duro 1 hora y 25 minutos, llegó a su fin dejando valiosa información de lo que se prevé será el juicio dentro de 16 días.
Como anécdota, JOH ha compartido celda con el cerebro de las criptomonedas Sam Bankman-Fried, encontrado en noviembre culpable de un fraude multimillonario y que ahora aguarda la sentencia. JS
*** Está crónica se construyó con algunos detalles de reportes de Carolina Meléndez y Matthew Russell Lee.