Tegucigalpa/San Pedro Sula– La esperanza volvió a latir con fuerza en las últimas horas en el Hospital Regional del Norte del IHSS, en San Pedro Sula, donde se llevó a cabo una nueva jornada de evaluación pediátrica como parte del programa de cirugía cardiovascular “Sanando Corazones”, impulsado por la Fundación Mensajeros de la Paz.
Durante la jornada, se evaluó a un grupo de niñas y niños con cardiopatías congénitas, provenientes tanto del Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS) como del sistema público de salud. Tras las valoraciones médicas, entre 10 y 14 menores fueron seleccionados para ser sometidos a intervenciones quirúrgicas la próxima semana.
Las cirugías serán realizadas por un equipo multidisciplinario del HRN–IHSS, con el apoyo de la brigada internacional Gift of Life, procedente de Estados Unidos, y los equipos médicos de las fundaciones Heart Gift y Latidos de Esperanza de El Salvador.
Este avance fue posible gracias a la coordinación entre el Hospital Regional del Norte del IHSS, la Secretaría de Salud dirigida por la Dra. Carla Marina Paredes, y el Hospital Nacional Mario Catarino Rivas, bajo la dirección del Dr. Gabriel Paredes. En un gesto de cooperación institucional, el Hospital Catarino Rivas facilitó en calidad de préstamo un equipo quirúrgico clave que permitió habilitar un segundo quirófano especializado en el HRN–IHSS, ampliando así la capacidad de atención durante esta brigada.
El programa “Sanando Corazones” se ha consolidado como un esfuerzo integral de atención cardiovascular infantil en la región noroccidental del país. Gracias al apoyo de benefactores internacionales y convenios de usufructo, los quirófanos de cirugía cardiovascular en ambas instituciones han sido equipados con tecnología especializada, permitiendo intervenciones de alta complejidad que salvan vidas.
La alianza entre el HRN–IHSS, el Hospital Catarino Rivas, la Secretaría de Salud, la Fundación Mensajeros de la Paz, la Fundación Ruth Paz, el Club Rotario Ulúa, y la empresa Technology Medical, reafirma el compromiso de construir un futuro más humano y solidario para los niños hondureños.
Con cada jornada, el programa “Sanando Corazones” da un paso más en su misión: devolver la esperanza y la salud a los corazones más pequeños del país.LB