Santa Bárbara – El subcomisionado de la Policía Nacional, Raúl Mejía Erazo, confirmó la detención de 17 custodios penitenciarios y un policía militar por pretender introducir 245 mil lempiras a la cárcel “El Pozo” en Ilama, Santa Bárbara, occidente de Honduras.
Mejía Erazo detalló que el dinero fue encontrado en el último asiento de un microbús coaster propiedad del Instituto Nacional Penitenciario (INP), dedicado a transportar a custodios penitenciarios.
Explicó que inicialmente, la orden de captura era para seis agentes penitenciarios, sin embargo, ninguno de ellos aclaró la procedencia del dinero, por lo que el fiscal ordenó la detención de todos los presentes en el microbús.
“Nos había dado la orden que se detuvieran las seis personas que estaban circunvecinas alrededor del dinero dentro del bus donde estaban los 245 mil lempiras, debido a que ninguno arroja ninguna evidencia el fiscal ordenó la detención de 18 personas que venían dentro del bus”, declaró el oficial a la emisora radial HRN.
El dinero decomisado este lunes a los agentes penitenciarios que lo queríN introducir a la cárcel El Pozo. pic.twitter.com/riyMztWRpf
— Proceso Digital (@ProcesoDigital) 14 de octubre de 2019
El INP emitió un comunicado revelando que al momento de la inspección de la unidad de transporte encontrando una bolsa negra conteniendo en su interior fajos de dinero, papel higiénico y pasta dental.
La Dirección Policial de Investigaciones (DPI), contabilizó 249 billetes de 500 lempiras, mil 179 billetes de 100 lempiras y 52 billetes de 500 lempiras.
El subcomisionado Mejía Erazo confirmó que el dinero iba con el objetivo de ingresar el centro penal siendo destinatario un grupo de estructura criminal.
Indicó que los detenidos serán acusados por el delito de lavado de activos al no poder justificar la procedencia del dinero.
El fin de semana, cinco agentes penitenciarios fueron capturados por pretender ingresar cinco granadas a la cárcel de “La Tolva” ubicado en Morocelí, El Paraíso.
Más de 21 internos componen el sistema penitenciario hondureño, que en los últimos años ha sufrido cambios en su administración. Se han construido cárceles de máxima seguridad para aislar a los jefes del crimen, sin embargo estos grupos se las ingenian para seguir ordenando crímenes desde el interior de estos recintos.
El subdirector del INP, Germán McNiel dijo que no tolerarán que se vulnere el sistema penitenciario del país.
Advirtió que no importa que se trata de familiares e incluso agentes de seguridad los que pretenden vulnerar el sistema, la conducta será la misma para evitar que los reos conviertan los recintos en escuelas del crimen.
El funcionario penitenciario mencionó que el crimen se las ingenia todos los días para poner a prueba las capacidades de las autoridades, por lo que deben estar preparados en todo momento para detectar estas operaciones ilícitas.
