Tegucigalpa – Con 42 días sesionados de 142 hábiles y con sólo 59 decretos aprobados, “inoperante incluso cuando estuvo abierto”, el Congreso Nacional de Honduras es autoritario, ineficiente, corrupto y burdo, concluye un informe presentado hoy en Tegucigalpa por el Consejo Nacional Anticorrupción (CNA).
– Los diputados son un minúsculo grupo de hondureños que pueden darse el lujo de viajar sin trabajar, cuestionó Gabriela Castellanos.
– Los parlamentarios de técnica legislativa saben lo que sabe un corrupto de honestidad, parafraseó.
– Legislar en Honduras es vivir en un mundo de felices fiestas, externó Castellanos durante la presentación del informe.
El informe titulado “Del Congreso que votamos, al Congreso que tenemos”, analiza toda la productividad de este Poder del Estados y concluye que “No hay Congreso” y que a los diputados del país “nunca les cayó el 20”.
Así lo refirió la directora del CNA, Gabriela Castellanos, quien destacó que los hondureños sólo obtuvieron del Congreso Nacional en el 2023, espectáculos del más bajo nivel.
“Lo que tenemos son diputados y diputadas que se la pasan más viajando que legislando”, apuntó la directora del CNA.
Dentro del periodo de sesiones ordinarias el Congreso debió reunirse durante 104 días, pero sólo hizo 42 días, el 40 % de lo establecido en la ley, acotó Castellanos.
“El ejercicio del Poder se ha convertido en una dictadura en donde nueve congresistas someten al resto”, acotó.
A falta de mecanismos de transparencia que les exijan cumplir con la calidad de la información, ahora se han inventado una rendición de cuenta que avalan con sus postales de viajes, reprochó la directora del CNA.
Concluyó que existe un contraste en la cantidad exorbitante en pagos de sueldos y salarios en comparación a la baja producción legislativa.
Recordó que anualmente el Congreso hondureño le asignan un presupuesto de mil 448 millones de lempiras, de los cuales 508 millones 550 mil 228 son destinados al pago de los parlamentarios.
Sin embargo, 139 millones 910 mil 248 lempiras fueron entregados a los diputados por concepto de pasajes, viáticos y otros gastos de viajes, destaca el informe.
Pese al anterior gasto solo se ejecutó el 57.16 % del presupuesto asignado, lo que obliga a preguntar sobre los fondos que no se ejecutaron, cuestionó el informe presentado en Tegucigalpa.
“Se fueron de vacaciones de verano, de Semana Morazánica y de Navidad con gastos pagados y con bonos que pueden derrochar a su antojo sin rendirles cuenta a nadie”, refirió la directora del CNA.
Tachó de penoso que el Congreso Nacional terminó el año 2023 con tan solo 59 decretos aprobados versus los 157 aprobados en el 2022.
Lo que es más lamentable es que la mayoría de los 59 decretos aprobados están enfocados a condecoraciones y días nacionales, agregó.
«Al cierre de esta legislatura el CNA califica al Congreso Nacional como autoritario, ineficiente, corrupto y burdo”, zanjó Gabriela Castellanos.
A continuación Proceso Digital reproduce el informe presentado por el CNA: