Tegucigalpa – La presidenta de Honduras, Xiomara Castro, durante su discurso de independencia patria este 15 de septiembre, ordenó desenterrar el pensamiento de Francisco Morazán, al tiempo que instruir para que la cátedra del prócer hondureño forme parte del sistema educativo.
– Agradeció al pueblo de El Salvador por el hecho glorioso de adoptar en el seno ardiente de su tierra al héroe centroamericano.
“Vida la independencia, viva la refundación, viva el pueblo de Honduras”, pronunció.
Recordó el asesinato, un 15 de septiembre de 1842 en San José de Costa Rica, del héroe de Centroamérica, José Francisco Morazán Quezada, “traicionado y abatido por la fuerza conservadora del mal”.
Dedicó “con conciencia revolucionaria” la celebración de independencia al general Morazán Quezada.
Citó que el prócer hondureño dirigió su propio pelotón de fusilamiento para morir con dignidad frente a una élite opresora que creyó que con su desaparición física también enterraría sus ideales.
“Desde el gobierno del pueblo ordeno desenterrar el pensamiento, la imagen gigantesca de la figura del general José Francisco Morazán Quezada, sus ideales como defensor de la libertad y la justicia y la democracia”, expresó
Asimismo, ordenó no dar más tregua a la traición y a los conservadores, “es urgente el rescate de nuestra memoria y que nunca más la gesta del héroe y el sacrificio de nuestras heroínas, y mártires sean silenciados”.
Giró instrucciones para mantener presente las ideas y la figura del general Morazán en las luchas por la refundación de la patria, “en las luchas por la reconstrucción de un sistema alternativo humanista que salve la vida y la naturaleza destruida”.
En su lista de ordenanzas, pidió a los ministros de Educación, Cultura y Planificación, para que procedan de manera inmediata transformar el modelo educativo e instalar la cátedra morazánica en cada escuela, en cada colegio, en cada universidad.
Pronunció que “la Casa de Morazán debe de ser restaurada, transformaremos los programas educativos de nuestras maestras, maestros, niños y niñas”.
Castró clamó por incorporar en el calendario cívico el estudio de la gesta y la ruta de la victoria de Morazán, al igual que el estudio del 1 de julio de 1823 donde se proclamó la independencia absoluta de Honduras.
Prometió establecer el modelo de rescate de la identidad y los valores de la independencia que ha renacido y está en marcha.
Abogó para que en cada institución del Estado, en cada escuela, en cada oficina municipal a partir de la fecha se debe rendir homenaje y exponer la imagen del héroe y publicar su obra.
Concluyó afirmando que “la lectura debe ser obligatoria en todas nuestras cátedras, el manifiesto de David y la pieza frente al bronce que pronunció en su honor el periodista Álvaro Contreras”. JS
