Tegucigalpa- Las restricciones que Estados Unidos ha anunciado para los países centroamericanos, especialmente Honduras en materia de cooperación, podría extenderse a los desembolsos de organismos regionales en los que Washington es parte, aseguró este jueves el coordinador del Foro Social de la Deuda Externa y Desarrollo de Honduras (Fosdeh), Mauricio Diaz Burdett.
Tras las declaraciones de la coordinadora de la frontera sur de la Casa Blanca, Roberta Jacobson quien dijo que ni un dólar de los cuatro mil millones que el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, quiere entregar a Centroamérica acabará en manos de sus presidentes, Díaz Burdett analizó que la medida puede extenderse a fondos que emanan de órganos como el Banco Mundial (BM), Fondo Monetario Internacional (FMI), y Banco Interamericano de Desarrollo (BID), en los que EEUU tiene representación.
En declaraciones radiales el coordinador del Fosdeh, expresó que la deteriorada imagen del gobierno hondureño también se extiende a los otros poderes del Estado y especificó Legislativo y Judicial.
Aseguró que otro de los problemas por los cuales Estados Unidos busca canalizar su ayuda por otras vías, es el desmontaje de la Misión de Apoyo Contra la Corrupción y la Impunidad en Honduras (Maccih), la Cicig en Guatemala y el exceso de concentración de poder en El Salvador.
Asimismo, dijo que la gran cantidad de diputados que buscan reelegirse y que tienen cuentas pendientes con la justicia y a los que todavía no les han dado un sobreseimiento, hace que haya un hartazgo del gobierno norteamericano.
“Esta gente está harta de estar lidiando con estos problemas porque al final las principales consecuencias del deterioro democrático, porque no está resuelto el tema de la reelección, el tema de la segunda vuelta, hay dificultades hasta con la entrega de las identidades, entonces ellos están canalizando las ayudas a través de otras vías donde haya un nivel de confianza alta”, reiteró.
En ese sentido, el funcionario advirtió que los actos de corrupción traerán consecuencias porque si hay desconfianza, el riesgo de poder invertir y ofrecer recursos se incrementa, por ende el resto de la cooperación lo va pensar mucho en entregar recursos.
“Esto es tan grave que el Fosdeh ha solicitado al presidente del poder Ejecutivo (Juan Orlando Hernández), se aparte, es decir que se retire de la presidencia y la delegue en un designado mientras se realizan las elecciones generales, esto para evitar que el país se quede sin recursos y no tener la forma de cómo pagar las vacunas por la pandemia de la COVID-19 y hacer frente a otros problemas del país”, sostuvo.
Agregó que en este momento se debe trabajar en lo que requiere la emergencia, no se puede estar pensando en reconstrucción porque no habrá fondos para ello como sucedió en su momento con el huracán Mitch.
“Seguramente habrá un esfuerzo para presentar algo a la comunidad internacional, pero vemos que en este momento se está pensando en cómo defenderse de las acusaciones de los fiscales federales y por otro lado está la atención de una pandemia que realmente está matando a la gente y que no se ve por donde se puede salir de la dificultad”, arguyó.
Agregó que la situación es grave y delicada, en realidad pasará una factura de muerte muy grande y poder recuperar la credibilidad para un nuevo gobierno no será sencillo, apostilló.
Señaló que desde junio del año pasado, el Fosdeh advirtió que si no se recuperan los ingresos por impuestos y la credibilidad internacional, Honduras tendría un déficit muy grande, pero al mismo tiempo el nuevo gobierno tendrá que pensar en un programa de ajuste estructural y esto empobrecerá más al país, concluyó. IR