Tocoa (Honduras) – La Iglesia católica de Honduras, familiares, organismos de derechos humanos y amigos exigen justicia por el asesinato del ambientalista Juan López, ocurrido hace cuatro meses, pese a que contaba con medidas cautelares locales y de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
«En este momento estamos viviendo un silencio que yo le llamo silencio cómplice por parte del Estado, por parte del Ministerio Público (Fiscalía), porque estamos a cuatro meses del asesinato y lo único que sabemos es de estos tres imputados que tuvieron una primera audiencia y que están en la cárcel», dijo a EFE el párroco de la Iglesia católica en Tocoa, departamento caribeño de Colón (este), Carlos Orellana.
López, quien era concejal de la Alcaldía de Tocoa, por el gobernante partido Libertad y Refundación (Libre), fue asesinado en el interior de su vehículo en horas de la noche del 14 de septiembre de 2024, luego de salir de un servicio religioso en el barrio Fabio Ochoa.
Orellana recordó que después de la captura de los presuntos autores del crimen contra López vino una «audiencia preliminar» que «se suspendió porque el Ministerio Público solicitó más tiempo, pero ya llevamos cuatro meses y estamos en zozobra, en la incertidumbre, no sabemos nada».
Agregó que en Tocoa «se respira un ambiente de silencio» y que «solamente aquí en la Iglesia es donde recordamos a Juan», de 46 años, quien también «era delegado de la palabra de Dios» y parte del Consejo de la Parroquia».
Orellana considera que detrás del asesinato de Juan López «algo se esconde», por lo que en la Iglesia «exigimos a las autoridades competentes, al Ministerio Público, al señor fiscal, Johel Zelaya, que no archive este caso, que no lo engavete porque creemos que ya tiene pruebas y argumentos suficientes de todo un proceso de enjuiciamiento».
En Tocoa «es mejor estar callado»
A los lados del altar de la parroquia San Isidro, de Tocoa, resaltan dos fotografías grandes del ambientalista asesinado con los mensajes «Justicia para Juan» y «Juan López una luz de esperanza».
En Tocoa, donde el narcotráfico ha operado con libertad, la gente prefiere no hablar sobre el asesinato de López, algunos por «miedo», otros porque «aquí es mejor estar callado», o «la situación es peligrosa», como dijeron escuetamente a EFE algunos ciudadanos que prefirieron el anonimato.
La esposa de López, Thelma Peña, también ha preferido no hablar, pero asiste a la parroquia de Tocoa bajo la custodia de dos elementos de la Policía Nacional, provistos de fusiles automáticos, que le brindan seguridad luego del crimen contra el ambientalista.
Entre la Iglesia católica, organismos ambientalistas y de derechos humanos, y otros sectores, alegan que en el asesinato están implicados ejecutivos de la empresa minera Pinares Ecotec y el alcalde de Tocoa, Adán Funez, también del partido Libre y muy cercano al coordinador general de ese instituto político, el expresidente del país, esposo y asesor de la presidenta de Honduras, Xiomara Castro.
A inicios de septiembre pasado, Juan López le pidió a Adán Funez que renunciara como alcalde, luego de que éste apareciera en un vídeo, de 2013, con Carlos Zelaya, hermano del expresidente hondureño, y narcotraficantes, negociando sobornos para la campaña electoral de Libre de ese año, en un nuevo escándalo sobre nexos entre el narcotráfico y políticos hondureños, de varios partidos, de vieja data.
El párroco de Tocoa reiteró a EFE que «como Iglesia responsabilizamos a don Adán Funez y a sus regidores (concejales) más cercanos que son afines a él».
«Creo que entre estos actores de la Municipalidad, en confabulación con la minera, son los autores. La minera -Pinares Ecotec- sin duda alguna está favoreciendo dando algunos, vamos a decir dineros, a la Municipalidad para que se venda a favor de la operación de la minera, entonces, creemos que son los autores principales», añadió.
Juan López, quien además lideraba el Comité Municipal en Defensa de los Bienes Comunes y Públicos de Tocoa, era un defensor de las montañas, los ríos y la vida de las comunidades ante el modelo extractivista, capitalista, depredador y el proyecto minero energético Pinares Ecotec. JS
