Tegucigalpa (Especial Proceso Digital /Por Lilian Bonilla) – El hablar de pérdidas de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE), quizá hasta parezca un tema trillado, pero los millones que pierde el Estado o mejor dicho los hondureños en este renglón es una cantidad nada despreciable, tomando en cuenta las grandes necesidades del país.
– En lugar de disminuir pérdidas de ENEE subieron más de un punto porcentual en 2022
– Se estima que en 2022 cada punto porcentual de pérdidas tuvo un costo de 21 millones de dólares.
– En 2023 viene la implementación plena del Programa de Control de Pérdidas, asegura ministro de Energía.
– “Es absurdo evaluar un plan de rescate en un año”, externó el ministro de energía.
Según cálculos de expertos solo en 2022 no haber reducido pérdidas le costó a Honduras unos 400 millones de dólares.
La ENEE ha perdido unos 3,500 millones de dólares, en las últimas dos décadas, debido a que de la energía que produce, es consumida por alguien, pero no es pagada. Por lo que cada año el gobierno debe rescatar a la estatal con nuestros impuestos, dijo a Proceso Digital el especialista en tema energético Kevin Rodríguez.
La historia se repite
Para no perder la costumbre de las pérdidas que año a año se vienen registrando el último año también se incrementaron pese a que se anunció un novedoso plan de reducción de pérdidas que se esperaba diera los primeros resultados en 2022.
En 2021 las pérdidas de la ENEE eran de 34.2 %, sin embargo, al cierre de 2022 las pérdidas aumentaron un 35.5 %, es decir, en lugar de disminuir subieron más de un punto porcentual, esto implica las pérdidas que ya referimos de 400 millones de dólares.
Se estima que en 2022 cada punto porcentual tuvo un costo de 21 millones de dólares anuales, refirió Rodríguez.
Con estas cifras Honduras se mantiene dentro de los países con el nivel más alto de pérdidas, sólo superados por República Dominicana que registró un 34.4 % en 2021.
Para los más técnicos, si las pérdidas se miden en unidades o producción que se perdió, en 2022 se perdieron 2 millones de megavatios hora (MWh), a un valor mucho más alto que el de 2021.
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Las pérdidas de ENEE afecta a todos y en todo
La Asociación para una Sociedad más Justa (ASJ), presentó su último informe denominado “Estado de país 2023: la realidad del subsector eléctrico en Honduras”, mismo que revela que las pérdidas y mora en alza, el año pasado, las pérdidas de energía sumaron 18,213 millones de lempiras, la cifra más alta de los últimos seis años.
La situación de la estatal no se reflejó, dijo el director de ASJ, Carlos Hernández, pese al Programa Nacional de Reducción de Pérdidas (PNRP) para el cual se destinaron L.1,515 millones de lempiras, de los cuales sólo 354 millones fueron ejecutados.
El informe también reveló que no hubo mejoras en el acceso y la calidad en cuanto a cobertura, 13.7 % de los hogares en Honduras seguían sin acceso a la energía, esto equivale a 367,304 hogares lo que impacta a más de 1 millón 500 mil hondureños, un problema que afecta en la productividad, la salud, la educación, el agua potable y los servicios de comunicación.
El subsector eléctrico tampoco ofrece un servicio de calidad y comparado a 2021, el número de apagones en 2022 aumentó de 8,561 a 8,859, eso deja millonarias pérdidas particularmente al sector comercial.
Nuevamente la promesa deja abierta la esperanza
La esperanza es lo último que se pierde, se suele decir a manera de consuelo, está aplica en el tema del rescate de la ENEE, y particularmente en el tema de las pérdidas.
“Ya este 2023 viene la implementación plena del Programa de control de perdidas”, ya se inició en cuatro zonas de un total de siete regiones, ya se trabaja en la región uno, en la cinco, también en la región de Comayagua y la región de Choluteca, y se está en una curva de ascenso de implementación del programa y a medida este llegue a su clímax de implementación se obtendrán mejores resultados en la reducción de pérdidas, dijo a Proceso Digital el gerente interino de la ENEE, Erick Tejada.
Seguidamente, reiteró que “nosotros esperamos reducir 4 % en el indicador interanual de reducción de pérdidas este año, es nuestra meta central y la instalación de 300 mil medidores este año para paliar toda la mora que heredamos de 12 años”.
En cuanto a la inversión, para desarrollar el plan, dijo que tienen presupuestado 3 mil millones de lempiras para este año.
El funcionario, agregó que se ha reconocido que el tema de pérdidas es clave y es un problema toral.
Según proyecciones el 87 % del flujo de caja de la ENEE se va justamente en pagos de costo de generación y mejorar ese flujo sólo será posible en la medida que se reduzcan las pérdidas, acotó.
Hay un plan desarrollado y se considera que es factible, adicionó Tejada, para ello ya se han identificado las zonas que actualmente tienen la mayor concentración de las pérdidas, por ejemplo, la mayor está en el departamento de Cortés con un 52 % seguido de Francisco Morazán y Choluteca; por ello primero se centrará atacar primero los circuitos de mayores pérdidas y altos consumidores.
Además, para mayor transparencia se contempla que se habilite una plataforma que contenga los datos y los avances que se van obteniendo en el programa de control de pérdidas, donde se informe de manera semanal.
“No se puede evaluar un plan de rescate si no se mira todo el contexto”, defendió Tejada para luego mencionar que los que defienden a los intereses privados lo que pretenden es quedarse con la estatal.
Citó que los activos de la ENEE rondan los 3 mil 600 millones de dólares y tienen que ver con las centrales hidroeléctricas, redes de transmisión y el sistema de distribución que compró el pueblo hondureño.
Sin embargo, los estudiosos del tema energético piden que este año las acciones sean contundentes, porque ya pasó un año y no hubo resultados, y el alto porcentaje de pérdidas técnicas y no técnicas de la ENEE, son inmanejables y en definitiva es grosero que el pueblo siga financiando una empresa que debería rendir ganancias como lo hizo en el pasado.
Aunque es de todos sabido que la crisis de la ENEE, es profunda y son muchas las variables a tomar en cuenta para su recuperación, es claro que uno de los puntos torales sigue siendo el control de pérdidas y solo queda no perder la esperanza en que los planes anunciados de resultados positivos. LB