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Al límite de tiempo, la zozobra ronda en más de 40 mil vacunados con Sputnik V

Tegucigalpa – (Proceso Digital /Joel Perdomo) – Vacunar a 46 mil inoculados con una dosis de la vacuna Sputnik V en Honduras, es un paso importante que ahoga en el nerviosismo y la zozobra a sus protagonistas directos. Los desesperados esfuerzos por contener el virus y dar respuestas a las personas, entre ellos más de un millar de periodistas nacionales, no logran traer la tranquilidad de una respuesta cierta a quienes, de alguna manera, tienen expuesta su salud ante un proceso inconcluso de inoculación.  

     El gobierno anunció en abril la compra de 4.2 millones Sputnik V pero solo 46 mil dosis han llegado.

–     Expertos piden a la población esperar que haya evidencia científica para combinar la vacuna rusa.

–     El profesor Salvador Moncada acompaña la investigación y dice que vale la pena que la UNAH se involucre.

–     Especialista en neurociencia asegura que estudio es una pérdida de tiempo y de recurso. 

El debate sobre el tema es más vigente que nunca cuando la presencia de la variante Delta es inminente y los casos de coronavirus están en un ascenso constante en Honduras.

Desde ese 23 de mayo pasaron 71 días y la llegada de la segunda dosis de la vacuna sigue siendo incierta. La escasez de fármacos dejó al país en el limbo; a muchas naciones del continente, entre ellas Argentina o la cercana Guatemala, la vacuna rusa ha empezado a llegar a cuentagotas, mientras que Tegucigalpa sigue a la espera. En tanto, las autoridades de Salud tienen más preguntas que respuestas sobre la llegada del componente dos de la Sputnik V.

La directora del PAI Ida Berenice Molina.

Según información del Programa Ampliado de Inmunizaciones (PAI), de la Secretaría de Salud, las 40 mil vacunas se aplicaron en cuatro de las 22 regiones sanitarias del país, 33,066 del Distrito Central, 3,000 de Puerto Cortés, 3,000 de San Pedro Sula y 400 en el departamento de Valle, sur de Honduras.

La jefa del PAI, doctora Berenice Molina, indicó que más del 96 % de los 40 mil hondureños son adultos mayores de 65 años, quien aseguró que lo más conveniente para esta población es recibir el segundo componente de la vacuna rusa Sputnik V.

Molina dijo que ya hay algunas recomendaciones con evidencia científica, sobre el cruce de vacunas que, desde su punto de vista, quisiera no tener que combinarlas en Honduras, porque lo que se espera es que llegue el segundo componente el próximo 18 de agosto.

Pero ¿Qué es lo que va a pasar con las personas vacunadas con la Sputnik V? ya que desde el gobierno se agotan los esfuerzos por encontrar una solución y ante ello es la academia quien ha salido al paso para realizar un estudio que pese a los avances de la ciencia en el mundo entero aún no muestra respuestas contundentes.  

Incluso los fabricantes de la Sputnik V aseguran que la segunda dosis puede aplicarse entre 21 y 90 días; Honduras se comprometió a aplicarlas en el tiempo mínimo, sin resultado.

¿Entonces cuál es el camino ahora?, pues entre propuestas del gobierno y médicos, se habla de tres opciones: esperar que lleguen las segundas dosis; otros piden comenzar de nuevo con una vacuna distinta, pero desde la academia prometen un ensayo sobre la combinación de Sputnik y Moderna.

Será entonces el comité de COVID-19 de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras y la Cruz Roja Hondureña,  con su ensayo quienes tendrán una potencial respuesta, que podría trascender las fronteras para servir a otros pueblos del mundo que tengan las mismas dificultades, estiman los propios investigadores.

Para que este estudio se lleve a cabo, la UNAH echará mano de unas mil personas que bajo la modalidad de voluntarias quieran participar, cuyo único requisito es haber recibido la primera dosis de la vacuna Sputnik V, luego la venia de la Secretaría de Salud a los científicos de la máxima casa de estudios.

El científico hondureño Salvador Moncada

Esta propuesta ha generado un amplio debate nacional, ya que desde las diversas ramas de la ciencia hay quienes aplauden, avalan, condenan, rechazan la iniciativa, otros consideran que debe optarse por la cautela y estudiar posibilidades que den más certidumbre.

La propuesta vale la pena

Proceso Digital condensó opiniones de varios expertos inmiscuidos directamente en el mundo de la ciencia y la investigación, como ser el hondureño Salvador Moncada, que desde sus valoraciones pretende orientar sobre un tema que hasta hoy es confuso y desconocido.

A juicio de Moncada, vale la pena realizar el ensayo, arguyendo que Honduras no puede quedarse de brazos cruzados, mientras el mundo entero está avanzando de manera significativa respecto a la combinación de vacunas.

Tras avalar la iniciativa de la UNAH, reveló que él no tendría inconveniente en “apoyar completamente” la investigación sobre la combinación de la Sputnik V, que es una plataforma de adenovirus con AstraZeneca, que cuenta con RNA mensajero, una composición similar a la combinación de Pfizer y Moderna que ha dado muy buenos resultados. 

No obstante, aclaró que lo más recomendable es aplicar la segunda dosis de la vacuna con el componente original, pues ninguna vacuna protege tanto ante la variante Delta, que circula en Centroamérica y es la más común en el mundo, por ello urge tomar decisiones que permitan una protección adecuada.

Ante la escasez urgen soluciones

El científico hondureño Marco Tulio Medina.

“Buscamos soluciones, aportes –no solo para Honduras, sino para el mundo-, porque la pandemia requiere respuestas concretas enmarcadas en la ciencia y la investigación, el país tiene esa entre otras capacidades”, dijo a Proceso Digital Marco Tulio Medina, un médico hondureño en buido en la investigación.

El Departamento de Virología de la UNAH, es coordinado por la exterta Wendy Elizabeth Murillo, que es la encargada de liderar la investigación en referencia “este departamento es único en el país y particularmente creo que un proyecto de tal magnitud no pudo quedar en mejores manos”, dijo Medina.

Apostilló que en Honduras urge encontrar soluciones y desde la ciencia vamos a investigar si es conveniente una combinación con Moderna que tiene 94% de efectividad contra el virus y no podemos descartar que estamos frente a una gran oportunidad.

El doctor Daniel Dávila Nolasco.

El estudio inicia esta semana y los resultados estarían listos en 21 días, en ese tiempo los investigadores habrán evaluado el comportamiento en la producción de anticuerpos, prevén los proponentes.

De pasar los tamices de rigor, el trabajo científico liderado por la UNAH permitirá saber ¿Qué hay detrás de la combinación de vacunas como la Sputnik V con la Moderna? Y más allá de ello dar certidumbre a los que esperan la segunda dosis de la inoculación.

Es una pérdida de tiempo y de recurso

Sin embargo, el médico especialista en neurociencia, Daniel Dávila, discrepa de la iniciativa que propone la máxima casa de estudios, pues desde sus puntos de vista es una decisión buena pero que podría requerir la modificación de elementos sustanciales y casi sagrados en el manejo de los fármacos.

“Yo supongo que los teóricos de la UNAH no querrán jugar modificando las dosis, ni condiciones de la red fría, pues lo que quieren es demostrar que aplicando Moderna a quienes fueron vacunados con Sputnik, se obtendrá una respuesta inmunológica satisfactoria”, inició contando el científico.

El galeno sostiene que en principio la propuesta está bien, pero no del todo, ya que la farmacéutica no establece ese intervalo entre la primera y la segunda dosis a la par: Externo que en estos temas los tiempos son críticos para alcanzar la máxima eficacia en los días ya establecidos.

Según Dávila el ensayo no es más de una pérdida de recursos y de tiempo pues tardaría más de dos meses en obtener resultados y si se concluye que el cruce de vacunas da máxima inmunidad, cuando se pretenda vacunar a las personas habrán transcurrido cuatro meses, sobre un estudio hecho con intervalo de dos meses, es decir que esa investigación ya no aplicará.

Asimismo, considera que es importante que la UNAH investigue los efectos secundarios que produce el cruce de vacunas, porque se trata de una contribución al mundo en un momento tan oportuno, expresó.

“Para conocer sobre los efectos secundarios que dejan las combinaciones no se necesita el factor tiempo, pero para saber la eficacia, si se necesita (…) no se puede llamar a 40 mil personas para aplicarles Moderna, eso sería irresponsable, para ello se necesita un estudio, es como querer ver a un perro morderse la cola, el tema es delicado”, precisó.

Para Dávila, el comportamiento más lógico es esperar el segundo componente y que la OMS recomiende, tras estudios, si la combinación de vacunas se aplica con eficacia y sin mayores riesgos.

“Buscar vacunas y evitar combinación”

Ante ese escenario, desde el Observatorio COVID-19 de laUniversidad Tecnológica Centroamericana (Unitec), se recomienda evitar la combinación y utilizar la vía de la diplomacia para conseguir prestado el segundo componente de la Sputnik V.

Según la doctora Reyna Durón, frente a la falta de evidencia científica valdría la pena esperar y agotar todas las instancias posibles para que las personas que recibieron esta vacuna puedan completar su inmunización con los lineamientos establecidos por la OMS.

Recomendó a la población a ser paciente y no desesperarse ante la dificultad para conseguir el segundo componente, ya que se podría dar el caso que personas se estén vacunando con otra vacuna distinta la Sputnik – V “no se auto receten por favor”- remarcó.   

Sin embargo, insistió al gobierno de Honduras, a utilizar los mecanismos de cooperación internacional, para pedir prestada las dosis de Sputnik que le hagan falta a países que sí la tienen”.

COVID y la pausada vacunación

Pero la incertidumbre frente a la ausencia de la segunda dosis de la vacuna Sputnik V solo es un componente de la crisis sanitaria que enfrenta Honduras, donde la pandemia sigue causando estragos, los contagios siguen al alza, los hospitales de las principales ciudades están colapsados y la vacunación contra el COVID aún no cubre ni al 3% de la población. Este fin de semana los esfuerzos oficiales han realizado una campaña conocida como “Vacunatón” en la que previó inmunizar a unas 50 mil personas, pero se alcanzaron más de 120 mil.

Este país centroamericano cumplirá 17 meses en emergencia sanitaria, desde marzo de 2020, los esfuerzos por contener el virus se fueron diluyendo por inéditos sucesos que marcaron las pautas de la pandemia, entre ellos el aumento de contagios, las muertes, la corrupción y la intransigencia.

Según cifras oficiales, Honduras registra 297 mil 111 contagios, 7 mil 834 decesos y 100 mil 697 personas recuperadas del virus. Se aplicaron 1, 912,190 vacunas, de las que 1, 639,892 con una dosis y 272,298 completaron su proceso de inoculación.

Eso representa que apenas el 2.88% de una población de 9, 458,767 de personas lograron recibir las dos dosis del inoculante contra el mortal padecimiento. Honduras inició su proceso de vacunación el pasado 25 de febrero. JP

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