De acuerdo con la fuente, la acción fue ejecutada por la Fuerza de Seguridad Interinstitucional Nacional (Fusina), con la participación de 120 miembros.
Más de un centenar de muertes violentas se han registrado en el Bajo Aguán en los últimos años, muchas de ellas ligadas al conflicto agrario que se vive en el zona.
En ese sentido, las autoridades de seguridad de Honduras, crearon la unidad especializada para investigar los crímenes que se han registrado en la zona.
Esa unidad está integrada por miembros élite de la Policía Nacional hondureña, junto a analistas de investigación y personal auxiliar del Ministerio Público.
Además, se busca determinar las causas reales de los crímenes cometidos en el marco del conflicto suscitado en esa zona del país y también se pretende establecer quiénes son los responsables, y lograr su enjuiciamiento mediante su captura.