Tegucigalpa – La encargada de la oficina de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) en Honduras, Likza Salazar, advirtió sobre a los migrantes connacionales sobre los peligros en la ruta migratoria, producto del cambio climático.
– Temperaturas en algunos estados fronterizos de México ha superado los 45 grados centígrados, según autoridades.
– Desde la implementación del Plan Frontera Sur en México los migrantes, los migrantes deben buscar nuevas rutas aunque signifique mayor riesgo.
En una breve entrevista con Proceso Digital y su portal especializado en temas migratorios, Departamento 19, la representante de OIM en Honduras reflexionó sobre los peligros que deben sortear los migrantes hondureños en la ruta migratoria.
“Los hondureños deben estar claros de los riesgos que se corren”, expresó ante la consulta de los riesgos de tratar de cruzar la frontera estadounidense a través del desierto.
Cabe señalar que, las altas temperaturas que se registran en Arizona en los últimos días ha cobrado la vida de por lo menos 11 inmigrantes, cuyos cadáveres fueron descubiertos en el desierto y permanecen en la morgue de Tucson.
Según cifras oficiales, de enero a la fecha unos 50 inmigrantes han perdido la vida en el desierto de Arizona y por su alto grado de descomposición al momento de su hallazgo la mayoría de ellos no han sido identificados.
Los migrantes hondureños que cruzan el desierto en su afán de cumplir el sueño americano “se arriesgan a morir de esta manera producto del cambio climático que se da en la zona y que puede generar este tipo de situaciones”, explicó la alta funcionaria de OIM.
Acto seguido, agregó que las altas temperaturas son “situaciones climáticas evidentemente naturales”.
Por su parte, el Instituto Nacional de Migración (INM) de México ha alertado acerca de las altas temperaturas en las fronteras norte y sur en zonas desérticas, así como lluvias permanentes en la zona sur y centro del país.
En lo que va del año, los Grupos Beta del INM han brindado atención y orientación a 104 mil 558 migrantes, de los cuales se ha rescatado a dos mil 884 en diferentes situaciones de riesgo, atendió a 130 con lesiones o heridas, localizó a 23 extraviados, brindó ayuda humanitaria a 78 mil 594 y proporcionó asesoría legal a 55, según reportes de prensa del país azteca.
Tanto las altas temperaturas como las copiosas lluvias son producto del cambio climático y ambos fenómenos meteorológicos afectan directamente a los migrantes en tránsito ya que las primeras pueden provocar la muerte por deshidratación y las lluvias provocan desbordamientos en los ríos que son parte de la rutas que los migrantes toman para acortar distancias o para evadir los puestos policiales.
Es oportuno mencionar que el 20 de junio tres menores migrantes perdieron la vida por sumersión, entre la frontera de Guatemala y México, luego que su balsa zozobrara. Dos de los infantes de nacionalidad hondureña fueron repatriados el pasado viernes y sepultados el sábado.
De su lado, la vicecanciller para asuntos consulares y migratorios de Honduras, María Andrea Matamoros, ha enfatizado que emprender la ruta migratoria de forma irregular “poder ser demasiado trágico y peligroso”.
Subrayó que, las secuelas de los traumas que sufren los migrantes les acompañan para toda la vida.
Con base en lo anterior, reiteró el llamado a no emprender la ruta migratoria de forma irregular y buscar las oportunidades que necesitan en su propio país.