Tegucigalpa – El flagelo de la extorsión cobró otra muerte este domingo. La víctima es una vendedora de verduras, a quien dos sujetos asesinaron presuntamente por negarse a pagar el mal llamado “impuesto de guerra”.
La mujer fue acribillada en el propio negocio de verduras que todos los días atendía en los mercados de Comayagüela, ciudad gemela con Tegucigalpa, capital de Honduras.
Según se informó, dos antisociales se apersonaron al puesto y luego le quitaron la vida a la trabajadora mujer.
Datos preliminares de la Policía Nacional indican que la fémina habría sido asesinada por no pagar el mal llamado impuesto de guerra.
La mujer fue identificada como Alejandra Alvarenga (28), residente en la colonia Nueva Suyapa de la capital.
Agentes de investigación trabajan en la identificación de las personas que le provocaron la muerte a Alvarenga, pero testigos oculares se negaron a proporcionar información por miedo a represalias.
En lo que va del año, más de 300 mujeres han sido asesinadas en Honduras, lo que las convierte en un sector altamente vulnerable ante la criminalidad común y organizada.
