Tegucigalpa – El secuestro de una hondureña de apenas 19 años de edad revive el drama de este flagelo contra los migrantes que transitan por México con el propósito de llegar a Estados Unidos en busca de una mejor vida.
– El secuestro es solo uno de los múltiples flagelos que los migrantes deben sortear en su tránsito por México en la búsqueda del denominado “sueño americano”.
De acuerdo a la Organización No gubernamental Alto al Secuestro, este flagelo aumentó 10.5 % en mayo, cuando se registraron 115 casos frente a los 104 de abril.
La hondureña Katerine Ochoa de apenas 19 años de edad, da rostro a uno de estos números, tras haber sido privada de su libertad en el estado mexicano de Tamaulipas.
Su madre, Karina Aguilar, realiza jornadas de recolección de fondos en Honduras para lograr ajustar la cantidad de 10 mil 600 dólares (265 mil lempiras), cantidad que exigen sus captores como rescate.
El llanto de una madre
La madre hondureña no puede más derramar lágrimas al hablar de su hija que como miles de connacionales decidió emigrar de forma irregular en busca de mejores condiciones.
“El miércoles pasado una persona me llamó, me dijo que tenía a mi hija y me estaba pidiendo 10 mil 600 dólares para regresármela”, relató la madre a periodistas en Tegucigalpa.
Manifestó que les pidió una reducción del monto solicitado por los supuestos autores del rapto de su hija, pero éstos le respondieron “que no eran mercado para pedir rebaja”.
“Ellos me la comunicaron por un minuto, ella me dijo madre estoy bien, estoy confiando en Dios para salir adelante”, continuó Aguilar.
La madre expresó que diariamente con su familia recorre las calles, las casas y cada mercado, solicitando ayuda en botellones para recolectar el dinero para pagar la liberación de su hija.
Narró que la razón que motivó que su hija emprendiera la ruta migratoria era porque quería seguir estudiando y que no pudo encontrar empleo en Honduras.
Más casos
Esta semana familiares de cuatro hondureños de una misma familia que buscaban llegar de manera irregular a EE.UU. fueron secuestrados por grupos criminales en México, según denunciaron familiares de los migrantes.
Los familiares de los afectados, llegaron desde la localidad de Naco, en el departamento de Santa Bárbara, occidente de Honduras, a la Terminal de Metropolitana de San Pedro Sula para pedir ayuda económica.
“El viernes por la noche nos llamaron para decirnos que los tienen secuestrados, ese día recibimos esta triste noticia, lo peor de todo es que nos dicen que solo tenemos dos días para pagar todo ese dinero”, dijo una fémina identificada como una hermana de los migrantes.
La desconsolada mujer precisó que le están pidiendo 13 mil dólares por la liberación de sus parientes y asegura es una suma muy grande porque no tienen para pagar todo ese dinero y por eso apelan a la buena voluntad de los hondureños para que les apoyen.
Indicó que tras conocer del secuestro de sus familiares, salieron de sus casas para recolectar dinero en las calles, pero hasta la fecha apenas han logrado recoger cerca de 10 mil lempiras.
En ese sentido, detalló que entre los secuestrados están dos menores de edad, “una niña de 9 años y la otra de 7, además el papá y la mamá de las infantes, solo sabemos que están bien, porque han logrado comunicarse con familiares en Estados Unidos”.
Flagelo en aumento
La cifra de víctimas de secuestro en México aumentó 10.5 % mensual en mayo, cuando se registraron 115 casos frente a los 104 de abril, reportó el pasado lunes la ONG Alto al Secuestro.
El reporte de la organización No Gubernamental señala que además, el número de detenidos relacionados con este delito en México se incrementó un 32.3% con un total de 135 en mayo, en comparación con los 102 presuntos responsables del mes anterior.
Los estados con mayor incidencia en secuestro en el quinto mes de 2021 son el Estado de México (12), Veracruz (11) y Chihuahua (7).
Sin embargo, según cifras oficiales, en lo que va del Gobierno de Andrés Manuel López Obrador (2018-2024) los secuestros han disminuido alrededor de un 37 %.
En 2020 se registraron 34 mil 554 víctimas de homicidio doloso frente a las 34 mil 682 de 2019, año en el que hubo un récord histórico.
El drama de un hondureño
“A mí me habían comentado que el camino hacia EEUU era muy complicado, sin embargo, yo decidí irme en busca de una mejor oportunidad para vivir en ese país, pero nunca creí que ahí podría encontrar la muerte», dijo Amílcar, un joven hondureño que intentó irse de manera irregular en busca del mal llamado “sueño americano”.
El primer día del secuestro fue de terror, relata Amílcar, el joven intibucano que, junto a otros muchachos, vivió el horror de la tortura de sus captores, especialmente en las primeras 24 horas de haber permanecido cautivo.
Lo que era toda una quimera, se convirtió en una de las peores congojas para este joven de apenas 21 años, quien abandonó su humilde hogar, en El Portillo, San Juan, departamento de Intibucá; con la meta de llegar a EE.UU. por la ruta migratoria; entonces emprendió un largo y peligroso viaje, que pese al riesgo que representa, sigue siendo un camino común entre jóvenes de su edad.
Ese espinoso trayecto, es transitado diariamente por miles de niños, jóvenes, mujeres y adultos de Centroamérica. Para el caso de Honduras, donde muchos huyen de las miserables y precarias condiciones de vida, que afectan a cerca del 70 % de la población. Solo durante la pandemia la pobreza se ha incrementado en el país 7 puntos mientras existen un millón de puestos de trabajo perdidos, según datos del Consejo Hondureño de la Empresa Privada, mientras el cementerio de MiPymes es de 40 %. (RO)
