Tegucigalpa- El ministro de Seguridad, general (r) Julián Pacheco Tinoco, señaló este lunes que la cartera ministerial a su cargo cambiará la estrategia de limpieza de la Policía y se pronunció porque el director general de la institución tenga nuevas facultades, pues en la actualidad es un funcionario que “manda y no manda”.
Toda la escala jerárquica debe estar comprometida con la depuración de la Policía Nacional, a fin de que sus efectivos sean honestos y comprometidos con el servicio a la población, advirtió el funcionario.
Proceso Digital reproduce la entrevista brindada esta mañana por el general Pacheco Tinoco a la radioemisora capitalina HRN.
P-¿En su gestión ministro cuántos miembros del alto mando y de la escala básica están en la mira por haber reprobado las pruebas de confianza?
PT- R/El tema de la depuración policial es un tema muy complejo y no es fácil, desde hace años se está actuando y hablando del proceso de depuración, sin embargo, puedo decir que todos los días salen policías por cometer diferentes faltas en sus actividades diarias.
Para esta semana vamos a iniciar en el Congreso Nacional la reforma a la Ley Organiza de la Policía, igualmente se está trabajando en la implementación de una nueva ley que llamamos Ley de la Carrera Policial, la cual será una ley personal que dará las pautas para controlar la jerarquía, disciplina y el orden dentro de la institución.
Hemos encontrado que la depuración concluye en un tema legal que al final uno tiene que demostrar que el efectivo ha cometido un delito y si uno no tiene como demostrarlo aun sabiendo que es delincuente, tiene que continuar adentro y ese es un problema complicado, porque no basta con hacer una prueba de confianza, también hay que hacer audiencias de descargo y demostrar que la persona es culpable.
Entonces, este proceso es engorroso y siguiendo esa misma ruta será difícil sacar las manzanas podridas como decimos popularmente, sin embargo, ha habido un cambio importante dentro de la institución, porque son más los policías buenos que están trabajando por la institución y muy pocos los malos que están solapados y protegidos en el uniforme utilizando una chapa para trabajar.
P-¿Qué tanto daño le genera a la institución oficiales que reprobaron las pruebas y que han sido señalados en actos ilícitos y se mantienen en su cargo e incluso hayan hasta ascendido?
PT-R/Desconozco de la actual cúpula policial, puedo hablar del director general (Félix Villanueva), que han pasado los procesos, sabemos que nadie es perfecto y pueden cometer algún error, pero la mayoría de los oficiales que tenían problemas con su credibilidad han salido o están suspendidos de la actividad policial.
Igual, hemos cambiado internamente una metodología para investigar y tenemos dentro de la institución la investigación de algunos casos que son sospechosos, por lo que el director Villanueva está haciendo un gran trabajo en ese aspecto.
El tema de la depuración es permanente, es de todos los días y no solamente que en un año se registre la separación de 100 policías se va a resolver el problema, por eso es urgente la reforma legal, porque puedo decir que tenemos cuatro casos este año, los efectivos salieron por delincuentes y un juez los sobreseyó quizás porque sustentamos mal la información, los reingresamos, pagar salarios caídos, entonces para estar tirando gente a la calle que después la tenemos que reintegrar y darle sus derechos, es mejor cambiar la estrategia e iniciar un proceso interno.
Hay cosas buenas que están pasando en la Policía Nacional; en diciembre se graduarán mil policías nuevos, por lo que el próximo año se trabajará con cuatro mil 600 nuevos policías para tener una Policía decente, comprometida con el pueblo.
P-¿Para usted el proceso de depuración ha fracasado sí o no?
PT-R/No ha fracasado, está dando resultados, lo que pasa que la gente quiere ver un montón de policías en la calle y no se trata de eso, la Dirección de Investigación y Evaluación de la Carrera Policial realiza las pruebas de confianza si alguien sale mal, se tiene que llamar a una audiencia de descargo, y es un proceso legal, complejo y lento.
Tenemos una Policía más decente, una nueva unidad de investigación como lo es la Dirección Policial de Investigaciones (DPI), entonces no queremos que unos 10 delincuentes que tenemos todavía estigmatizarán a la mayoría de los policías que son buenos.
P-¿Cómo se fortalecerá la Policía, mejorará la estructura si el director de la institución sea el que tenga luz verde para cancelar policías vinculados en actos ilícitos?
PT-R/Este es otro tema en el que el ministro era el comisario, el subcomisario, era general director, nadie podía tomar decisiones en las escalas intermedias de la Policía, y eso es lo que queremos que en los niveles intermedios todos tomen decisiones y asuman responsabilidades, porque aquí es fácil pasar toda la responsabilidad al ministro y que él tome las decisiones, cuando a veces son cuestiones disciplinarias que las tienen que resolver los oficiales en su nivel.
Tenemos un director general que manda y no manda, que tiene facultades que la misma ley se las obstaculiza, por eso queremos que el director tenga facultades como las que tiene el jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas, que es un general que tiene las facultades de decidir dentro de su institución, pero en el marco de la ley.
El ministro no puede estar resolviéndolo todo, es un problema que tiene la ley y lo que estamos tratando de resolver.
Estos dos proyectos que se discutirán en el Congreso Nacional fueron consensuados en todos los niveles de la Policía Nacional porque se necesita ya un instrumento jurídico.
El director general debe tomar las decisiones internas dentro de la institución, decidir en la salida de un policía que ha cometido un acto ilícito, o si la buena labor de otro miembro de la institución es muy buena pues premiarlo, crear un sistema que los incentive para asumir los mejores cargos.
P-¿No habrá ningún riesgo sobre esta medida ya que se volvería al pasado, dándole facultades al director de la Policía?
PT-R/El que conoce a sus suboficiales es el director general, un ministro es transitorio en su puesto, entonces en cuatro años uno no va a poder conocer a todos los miembros de la institución, quienes se conocen son ellos y son ellos los que tienen que limpiar la cara de la Policía, el ministro solo debe de apoyarlos y respaldar las decisiones.
Además, no solo será el director general el que tomará las decisiones, tiene que ser autorizado por el ministro y entre ambos tomar las decisiones, pero el director debe hacer un informe detallado de antemano antes de llegar la información al ministro, porque si no, al ministro le toca ser hasta de agente de investigación, entonces debe comprometerse toda la escala jerárquica de la Policía para impulsar la depuración.
El gran problema de la Policía pasa por dos cosas; uno es el tema de la jerarquía, y el otro es el tema de la actitud y la responsabilidad de los oficiales; los oficiales con estos temas que ha habido, se hacen los locos y no toman una decisión, hoy en día quien no toma una decisión se hará cómplice de sus subalternos si no toman decisiones, porque todos tienen miedo, todos se escudan y se esconden en el miedo, pues el que tenga miedo que se vaya, porque el que no puede tomar decisiones, aquí no puede estar.
