París.– La organización de lucha por la libertad de prensa Reporteros Sin Fronteras (RSF) denunció este jueves que la decisión del Kremlin de clasificarla como «organización indeseable» es parte de la «cruzada para silenciar las voces libres», pero aseguró que no la callará.
«Al clasificar a RSF -una organización que lucha por el periodismo- como ‘organización indeseable’, el mensaje del Kremlin es claro: continúa su cruzada para silenciar todas las voces libres que denuncian su censura y propaganda. Pero no nos callará», prometió el director general de RSF, Thibaut Bruttin, en un comunicado difundido por la organización.
Bruttin aseguró que RSF seguirá investigando y denunciando la guerra contra la información del régimen de Vladímir Putin, así como los crímenes contra los periodistas, tanto en Rusia como en Ucrania.
«En cierto sentido, formar parte de esta lista de unas 250 organizaciones es un honor para RSF. La ausencia de motivos sugiere que esta decisión es un reconocimiento al conjunto de la labor de la organización, desde la exfiltración de periodistas rusos hasta las emisiones por satélite (del proyecto) Svoboda», agregó.
La clasificación como organización indeseable es, para RSF, una «etiqueta deshonrosa» que el Kremlin utiliza para «silenciar las voces independientes, con el pretexto falaz de proteger a Rusia de supuestas ‘amenazas'».
«En este caso, lo que considera una amenaza es el derecho a la información», criticó la organización.
RSF indicó también que no cuenta con «ninguna presencia en el territorio ruso», por lo que «no ha sido nunca informada» oficialmente de la decisión que anunció este jueves el Ministerio de Justicia ruso.
Pese a eso, la medida tiene consecuencias, ya que todas las personas que cooperen en Rusia con esa clase de entidades o que contribuyan a su financiación son susceptibles de ser perseguidas administrativa y penalmente.
Eso incluye, según advierte RSF en el comunicado, incluso hacer la menor referencia o republicar informaciones procedentes de alguna de ellas. EFE/ir