Tegucigalpa – El Tribunal Superior de Cuentas (TSC), concluyó un informe donde se encontraron indicios de enriquecimiento ilícito en contra de un ex presidente de la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel), y ahora diputado al Congreso Nacional, Rasel Tomé, por más de ocho millones de lempiras, expediente que fue enviado al Ministerio Público, se informó hoy.
El portavoz del Ministerio Público, Yuri Mora, confirmó que este ente judicial, recibió este expediente y que será asignado a un cuerpo de fiscales para que trabajen en él.
El expediente enviado al Ministerio Público fue realizado mediante oficio 416-2015-SG-TSC, mediante el cual se informa sobre la responsabilidad al encontrar indicios de enriquecimiento ilícito a efecto que proceda a entablar las acciones penales correspondientes ante los órganos jurisdiccionales del Estado.
De acuerdo a lo informado por la unidad de comunicaciones del TSC, las acciones de investigación por presunción de enriquecimiento ilícito desde 2008, se iniciaron cuando recibieron una denuncia por parte de un ciudadano, la que fue registrada con el número 0801-08-190.
La denuncia ingresó el 20 de octubre de 2008, y en ella se aseveró que el denunciado presentaba un notable aumento de capital superior al que normalmente hubiera podido percibir en el ejercicio de la función pública.
En vista a lo anterior, el TSC inició un proceso de investigación con el único objeto de determinar la existencia o no de indicios de enriquecimiento ilícito.
Luego de valorar todos los elementos de prueba recabados en la investigación, el TSC concluyó que el exfuncionario no logró justificar la procedencia legal de ocho millones, 20 mil 43 lempiras, por lo que se determinó la existencia de una presunción del delito de enriquecimiento ilícito.
Se llegó a esa conclusión luego de evacuar todas y cada una de las diligencias propias de la investigación, relacionada a los bienes patrimoniales del ex funcionario, que implicó revisión de informes de la Comisión Nacional de Bancos y Seguros, Instituto de la Propiedad y la Dirección Ejecutiva de Ingresos, solicitados por los auditores.
El resultado de la investigación plantea que durante el período revisado, se refleja un incremento de capital de tres millones, 321 mil lempiras, un faltante de ingresos para cubrir tal incremento de un millón 286 mil 950 lempiras, faltante que se adiciona al incremento de capital anteriormente citado más los depósitos no justificados que ascendieron a tres millones, 621 mil 770 lempiras.
En ese sentido, se determinan indicios de enriquecimiento ilícito por ocho millones 20 mil 43 lempiras, cantidad que no pudo ser justificada de acuerdo a los ingresos netos disponibles.
El TSC consideró que el ahora ex presidente de Conatel obtuvo un incremento de capital por esa cantidad que resulta superior a la que normalmente hubiere podido obtener en virtud de los sueldos y emolumentos que haya percibido legalmente en ese cargo y de los incrementos de su capital por cualquier causa lícita, durante el período auditado.
Tras emitirse un informe provisional, el 12 agosto de 2010, el hoy ex funcionario impugnó el mismo el 2 de junio de 2011.
En respuesta, la Dirección de Impugnaciones del TSC dictaminó que después de un análisis a los documentos y medios de prueba presentados por el ex funcionario éste no logró desvanecer la responsabilidad, por tanto se confirmó el enriquecimiento ilícito por ocho millones 20 mil 43 lempiras.
Cabe referir que en este, como en todos los casos, el TSC concedió el tiempo para que el investigado presentara sus argumentos de descargo, en respeto a las garantías del derecho constitucional del debido proceso, entre ellas la defensa.
Conforme lo establece el marco legal, al confirmarse la presunción de la comisión del delito de enriquecimiento ilícito el ente contralor procederá a remitir el expediente al Ministerio Público para que proceda conforme a la ley.