Tegucigalpa/New York – El noveno día del juicio contra el expresidente Juan Orlando Hernández por narcotráfico promete mantener la intensidad que ha caracterizado las jornadas anteriores.
En esta ocasión, Fabio Lobo Lobo, hijo del expresidente Porfirio Lobo Sosa, continuará en el estrado de la Corte de Nueva York como el testigo estrella de la fiscalía.
Tras el acostumbrado saludo del juez Castel y la presencia del jurado, se prosiguió con la nueva y última jornada correspondiente a la segunda semana del juicio, denominado juicio del siglo.Es importante para el sistema judicial estadounidense que llevemos este caso hasta el final, de manera eficiente y justa. Señor Lobo, todavía está bajo juramento, anotó el juez al iniciar.
Las expectativas son altas, ya que Fabio Lobo ha sido una pieza clave en el desarrollo del caso hasta ahora. En el octavo día de juicio, sus revelaciones sobre presuntos sobornos recibidos por su padre para su campaña política por parte de Los Cachiros sacudieron la sala de audiencias y desencadenaron reacciones tanto de los acusados como de los señalados.
En Honduras se destacó la declaración del expresidente Porfirio “Pepe” Lobo, quien calificó a su hijo como «otro delincuente declarando en New York», pero reconoció que estas declaraciones generan momentos de tensión porque la gente cree lo que dicen los hijos de los padres.
Uno de los puntos más esperados del día será el contrainterrogatorio por parte de la defensa, donde se espera que se profundice en los detalles de las declaraciones de Fabio Lobo y se busque desacreditar su testimonio.
La defensa mantiene su postura, expresada por el abogado Raymon Colón, quien a su llegada a la corte este viernes dijo que esperan que el testimonio de Fabio no sea contundente.
La atención también se centra en la posibilidad de que Fabio Lobo pueda implicar a otros políticos hondureños, dado su linaje y la influencia que este factor podría tener en la percepción del jurado.
La presencia de más testigos anunciada tanto por la fiscalía como por la defensa, indica que aún hay más por revelar en este complejo entramado judicial, que enfrenta el expresidente Juan Orlando Hernández.
Con al menos media docena de testigos pendientes por parte de la fiscalía y una estimación de unos 10 testigos por parte de la defensa, se espera que el juicio continúe revelando detalles sobre los presuntos vínculos entre el narcotráfico y la élite política en Honduras, manteniendo en vilo a la opinión pública tanto nacional como internacional.PD
