Scotti señaló que la presidencia checa sigue estudiando la idea, y que la decisión final de llevarla a la cumbre se tomaría en el Consejo de Ministros de Justicia e Interior del próximo 4 de junio.
Italia, Grecia, Malta y Chipre pidieron el pasado jueves en la reunión de embajadores que la inmigración en el Mediterráneo y el refuerzo de los operativos de vigilancia en la zona se traten en la reunión de jefes de Estado y Gobierno.
España se sumó a la iniciativa y ningún país comunitario se opuso entonces a la idea, por lo que se da por hecho que finalmente se tratará en el Consejo Europeo.
El ministro español de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, consideró hoy «muy importante» que la Unión Europea se involucre en cuestiones de inmigración y apoyó que haya «una discusión al más alto nivel».
Los países del centro y este del Mediterráneo han pedido que la cumbre trate esta cuestión ante lo que consideran falta de acción de algunos países del norte de África, especialmente Libia, para frenar la salida de embarcaciones con inmigrantes irregulares con destino a las costas europeas.
Además, Italia y Malta han tenido en las últimas semanas algunas disputas acerca de sus responsabilidades respectivas en la acogida de inmigrantes detectados en alta mar, ya que ambos países tienen saturados sus centros de recepción de inmigrantes (en el caso italiano, los de la isla de Lampedusa).