Tegucigalpa – Honduras llamó este martes a su encargada de Negocios en Ecuador a raíz del asalto de las fuerzas de seguridad del país suramericano a la Embajada de México en Quito el pasado 5 de abril, según informó el canciller Hondureño.
El ministro Eduardo Enrique Reina aseguró que por instrucciones de la presidenta Xiomara Castro, «luego del intercambio de la Cumbre de CELAC» (Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños) se procedió «a llamar a Tegucigalpa a la encargada de Negocios en el Ecuador», Clarivel Vallecillo.
Reina dijo en la red social X que la decisión se tomó «como un mensaje claro para promover el respeto al Derecho Internacional ante la violación de la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas de 1961 y la Convención de Caracas de Asilo de 1954, por parte del Ecuador, en la Embajada de México en Quito, lo que no debe constituirse en un precedente funesto en el sistema internacional y que estos hechos no se repitan».
«Asimismo, realizaremos las gestiones necesarias para respaldar las acciones de México ante la ONU y la Corte Internacional de Justicia» contra Ecuador, agregó el funcionario hondureño.
El asalto a la Embajada de México en Quito fue el centro de la agenda de este miércoles de la Cumbre virtual de la Celac, convocada por su presidenta pro témpore, Xiomara Castro.
El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, ordenó el ingreso de la Policía a la Embajada mexicana para detener a Jorge Glas, exvicepresidente en el Gobierno de Rafael Correa (2007-2017), al que México le había otorgado.
El político se encontraba en la sede diplomática desde diciembre, en donde había solicitado asilo y estaba a la espera de un salvoconducto para dejar su país.
El Gobierno mexicano rompió relaciones con Ecuador y lo denunció ante la Corte Internacional de Justicia, al considerar que el asalto a su embajada en Quito violó el derecho internacional y su soberanía.
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, reafirmó que su querella ante la CIJ busca «una expulsión de Ecuador de Naciones Unidas, en tanto no haya una disculpa y un ofrecimiento de no repetición, de nunca más volver a hacer una canallada» como el allanamiento a la sede diplomática.
Este lunes, en una entrevista que ofreció el presidente Noboa al canal australiano SBS, manifestó que no se arrepiente de ordenar el allanamiento de la Embajada de México, y dijo que, para resolver el conflicto, “invitará a López Obrador a comer ceviche” o “probablemente tacos”.
Noboa también argumentó en su entrevista que México violó primero las convenciones internacionales, según su lectura, por proteger desde diciembre en la Embajada al exvicepresidente Glas (2013-2017), procesado por corrupción. EFE
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