La Habana.- El expresidente cubano Fidel Castro, que hoy cumple 90 años, llamó a preservar la paz y alertó de que «la especie humana se enfrenta al mayor riesgo de su historia».
«Hay que martillar sobre la necesidad de preservar la paz, y que ninguna potencia se tome el derecho de matar a millones de seres humanos», escribió el líder de la Revolución Cubana en un artículo titulado «El cumpleaños» y publicado en el portal oficial Cubadebate.
Castro, retirado del poder por problemas de salud desde hace una década, aborda en este nuevo escrito cuestiones como el problema de la superpoblación mundial, las armas nucleares, los intentos de Estados Unidos de liquidarlo y la importancia de la educación, pero también se remonta en tono nostálgico a episodios de su infancia.
«La especie humana se enfrenta hoy al mayor riesgo de su historia. Los especialistas en estos temas son los que más pueden hacer por los habitantes de este planeta, cuyo número se elevó, de mil millones a fines de 1800, a siete mil millones a principio de 2016. ¿Cuántos tendrá nuestro planeta dentro de unos años más?», se pregunta el exmandatario.
Sostiene que «los científicos más brillantes, que ya suman varios miles, son los que pueden responder esta pregunta y otras muchas de gran trascendencia».
«Los medios técnicos modernos han permitido escrutar el universo. Grandes potencias como China y Rusia no pueden ser sometidas a las amenazas de imponerles el empleo de las armas nucleares. Son pueblos de gran valor e inteligencia», prosigue Castro.
Un año y medio después del comienzo del histórico proceso de deshielo diplomático entre Cuba y EEUU, Fidel Castro considera que al discurso del presidente estadounidense, Barack Obama, «le faltó altura» en su visita a Japón en mayo pasado.
«(…) Le faltaron palabras para excusarse por la matanza de cientos de miles de personas en Hiroshima, a pesar de que conocía los efectos de la bomba (atómica lanzada por Estados Unidos sobre esa población en 1945)», sostiene Castro.
Y agrega: «Fue igualmente criminal el ataque a Nagasaki, ciudad que los dueños de la vida escogieron al azar. Es por eso que hay que martillar sobre la necesidad de preservar la paz, y que ninguna potencia se tome el derecho de matar a millones de seres humanos».
En un artículo que se inicia con la frase «Mañana cumpliré 90 años», el líder cubano recuerda su nacimiento en Birán, en la hoy provincia oriental de Holguín, y también a su padre, Ángel Castro, de origen español.
«¡Cómo le gustaba conversar cuando salía de la casa de Birán! Allí era el dueño de las tierras donde se plantaba caña, pastos y otros cultivos de la agricultura. Pero en los Pinares de Mayarí no era dueño, sino arrendatario, como muchos españoles, que fueron dueños de un continente en virtud de los derechos concedidos por una Bula Papal», sostiene.
Una bula, prosigue, «de cuya existencia no conocía ninguno de los pueblos y seres humanos de este continente».
Castro rememora también las características geográficas de la zona, desvela cómo su padre sufrió antes de morir, pocos años antes del triunfo de la Revolución y, en otro párrafo, defiende que la falta de educación «es el mayor daño que se le puede hacer a un niño».
«De sus tres hijos varones, el segundo y el tercero estaban ausentes y distantes. En las actividades revolucionarias uno y otro cumplían su deber. Yo había dicho que sabía quien podía sustituirme si el adversario tenía éxito en sus planes de eliminación. Yo casi me reía con los planes maquiavélicos de los presidentes de Estados Unidos», escribe Fidel Castro.
El expresidente agradece también las prolíficas «muestras de respeto, los saludos y los obsequios» recibidos por su 90 cumpleaños y asegura que le dan fuerzas «para reciprocar a través de ideas» que trasmitirá a los militantes del Partido Comunista de Cuba (PCC, único) y «a los organismos pertinentes».
Cuba celebra el 90 aniversario del líder de su Revolución desde hace meses con todo tipo de eventos y homenajes, que culminarán este sábado con un acto en el teatro Karl Marx La Habana del que no han trascendido detalles.
La última «Reflexión» de Fidel Castro difundida en medios estatales se remonta al pasado 28 de marzo y llevaba por titulo «El hermano Obama».