Tegucigalpa- Se trata de la implementación de un nuevo modelo en materia de asistencia humanitaria en la región del país denominada Corredor Seco, para la implementación de este novedoso programa se ha tomado como caso piloto el municipio de Tómala, jurisdicción del departamento de Lempira.
-El proyecto se inició en Tómala, Lempira y pretende atender a 57 mil familias en situación de vulnerabilidad en los próximos 30 días.
El proyecto es dirigido por el Gobierno de Honduras, a través del Programa de Reactivación del Sector Agroalimentario FIRSA con el apoyo el Programa Mundial de Alimentos PMA y la asistencia de BANASUPRO y los gobiernos locales.
El nuevo modelo consiste en el uso de bouchers, mismos que se extendieron en las últimas horas a mil 200 familias ya beneficiadas.
Con este baucher las familias se presentaron a las tiendas BANASUPRO donde recibieron una ración de alimentos, cada ración contiene dos mil kilo calorías por persona (2,000 Kcal) para poder alimentar a una familia de cinco miembros, por un periodo de treinta días.
Previo hacerse acreedoras a esta asistencia, las familias beneficiadas pasaron por un estudio, con énfasis en la atención a niños menores de cinco años a fin de velar por la parte alimenticia y nutricional de los infantes para que cuenten con pleno desarrollo físico y mental en un futuro.
Con esta iniciativa el gobierno ratifica su política de transparencia y efectividad, con el propósito de beneficiar a las familias hondureñas que han sufrido las consecuencias del fenómeno de sequía en esta zona del país.
La primera entrega de alimentos en el municipio de Tómala se llevó a cabo el jueves y posteriormente se implementaría una segunda fase para el mes de octubre resultado de un proceso de monitoreo en el factor climático y las condiciones de vida de las miles de familias que viven en este sector de Honduras.