
La acción de implementar un bono climático no es una mala idea, de hecho, en otros países se ha implementado pero con otros fines, siendo algunas de ellos los siguientes: para financiar proyectos ambientales y cumplir sus metas de reducción de emisiones, como lo hacen en El Reino Unido, con el llamado bono «Green Gilts» o bono verde; los fondos recaudados se destinan a proyectos que ayudan a cumplir con el objetivo de cero emisiones netas para 2050 y otros objetivos ambientales.
¿Pero que significa y para que son los bonos climáticos?
Los bonos climáticos son un instrumento financiero que persigue la movilización de capital para mitigar el cambio climático y conseguir los objetivos del Acuerdo de París para limitar el calentamiento mundial a 1,5 grados centígrados.
En América Latina se han emitido bonos parecidos, pero con otra finalidad, como los bonos verdes con los casos de los siguientes países:
- Chile: Emitió el primer bono verde soberano de América Latina, que destina fondos a infraestructura como energía renovable y transporte electrificado.
- Brasil: Es uno de los mercados más grandes de bonos verdes de la región y emitió su primer bono soberano sostenible en 2023.
- Perú: Ha visto emisiones de bonos verdes, como la de Consorcio Transmantaro, para financiar proyectos de energías renovables.
- Colombia: Ha emitido bonos verdes, como los del banco público Bancóldex.
- México: También participa activamente en el mercado de bonos verdes, con emisiones de empresas como Coca-Cola Femsa.
Por otra parte hay una gran cantidad de compromisos adquiridos como los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), de los cuales podemos mencionar los siguientes: Fin de la pobreza, Hambre cero, Salud y bienestar, Educación de calidad, Igualdad de género, Agua limpia y saneamiento, Energía asequible y no contaminante, Trabajo decente y crecimiento económico, Industria, innovación e infraestructura, Reducción de las desigualdades, Ciudades y comunidades sostenibles, Producción y consumo responsables, Acción por el clima, Vida submarina, Vida de ecosistemas terrestres, Paz, justicia e instituciones sólidas y Alianzas para lograr los objetivos.
Como podrá observarse existe una gran cantidad de temas bajo las cuales se debió anunciar el Bono Climático Hondureño, el no hacerlo y dejarlo en suspenso o a la imaginación del soberano, da lugar a pensar muchas cosas, y peor aún a pocos días de elegir las nuevas autoridades del aparato administrativo gubernamental; al respecto, he tratado de escuchar algunas entrevistas sobre el particular y resultan ser una serie de contradicciones entre los beneficiarios hasta en los mismos empleados de la secretaria ofrecen distintas versiones, al parecer la orden fue “ regar dinero obviamente con algún propósito y que no se necesita ser muy inteligente para darse cuenta cual es…”
Que bien que la gente ha logrado obtener un respiro financiero para comprar lo básico de la canasta básica ya que, para obtener todos los insumos necesarios para sostener una familia, el costo es más que los 7,000 Lempiras regalados, Según la Secretaría de Trabajo y Seguridad Social, el costo en julio de 2025 era de 12,923 lempiras para una familia de cinco personas y es muy posible que al finalizar el año subirá un incremento y llegue a los 14,000 Lempiras.
Lo malo de la entrega del “Bono Climático” de Honduras es el mensaje que se deja en la población, ya que se esta atacando un efecto y no el problema (causas) en realidad como se ha planteado en los demás países, es decir, entre más afectado por las inundaciones y sequias serán beneficiarios del bono climático, mientras el problema de base continua de mal a peor.
También, hay que decir que este tema no debe de tomarse como un bingo, hay que explicarle que significa el tema del calentamiento global y como podemos ayudar a mitigarlo, no es así de esta forma que estamos contribuyendo en algo, parece muy poco serio y profesional, sus criterios tendrán para seleccionar a estos grupos de personas y obviamente deberían estar ligados al tema de alguna forma.
Al parecer, el tema del medio ambiente y cambio climático es la gallina de los huevos de oro, el medio por el cual se obtienen recursos financieros nacionales e internacionales para salir en caballo blanco y obtener la simpatía de la población, “al mostrarse misericordioso el gobierno al regalar en las concentraciones poblacionales en donde estiman que no cuentan con la simpatía popular”, pero ésta estrategia es en realidad abominable por el hecho que identifican al ser humano no como una persona que la ha visto negra durante cuatro años de gobierno, sino más bien como un número para sumar los votos en las próximas elecciones presidenciales.
La verdad no se entiende lo que esta pasando, ya que esta acción contradice, algunas notificaciones oficiales en donde el Gobierno de Castro ha sacado de la pobreza a más de un millón de personas; sin embargo, el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) mide la pobreza en Honduras a través de la Encuesta Permanente de Hogares de Propósitos Múltiples (EPHPM), que toma como referencia los ingresos familiares y el costo de la canasta básica. Esta metodología no calcula la pobreza a nivel de personas, sino de hogares y los resultados de la encuesta muestran que, en 2021, poco antes de que Castro tomara el poder, había 1,566,698 hogares en condición de pobreza. Mientras que el último estudio, realizado en 2024, indica que la cifra subió a 1,587,698 hogares pobres.
Además, este aumento de personas pobres coincide con las investigaciones del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (COHEP). Según sus encuestas, el país pasó de tener 6.33 millones de personas pobres en 2021 a 6.43 millones en 2024. Es decir, un incrementó de 100.000 personas. (fuente: Sharon Ardón / Expediente Público).
Es decir, que el bono climático no se está utilizando para los fines o propósitos que se creó en otras naciones, creo que deberían ser más honestos y disfrazar la entrega con otro pretexto, ya que el bono en referencia se usa para otras acciones y actividades; el problema en esta entrega y uso es el hecho que al momento de solicitar el apoyo financiero a otros países se habrá contaminado el tal bono y se perdería la credibilidad internacional, en ese sentido, se estaría poniendo en riesgo la cooperación internacional al momento de solicitarla, cuando en realidad así sea.
Como viene la época de navidad y año nuevo, no me extrañaría que saliera un bono navideño o un bono de año nuevo, aunque no se cual seria la excusa a utilizar, podría ser una despedida de gobierno o “un agradecimiento por haber depositado el voto masivamente en las próximas elecciones”, lo cual dejaría un mal sabor de boca, porque se miraría no como un bono climático sino como una compra o venta del voto popular.
Lo cierto de todo este espectáculo es que hay dinero para tirar para arriba como una piñata a quien le caiga o capture más dinero, mientras el país sigue en caída libre, las empresas cerrando operaciones, el país más vulnerable, más comunidades incomunicadas, calles y carreteras destruidas y la mayoría de ciudadanos sobreviviendo el día a día.
Honduras no puede seguir en esta improvisación y uso de los recursos estatales, hay que iniciar un gobierno que planifique y que publique lo que pretende realizar en los 4 años para los que fue electo. Terminemos con esta improvisación y mal uso de los recursos nacionales, con cuentas claras.
Como lo refería al inicio del artículo, el bono climático existe a nivel mundial, claro en otras naciones esta orientado exclusivamente a los temas relacionados para mitigar o reducir el calentamiento global, y con la finalidad de dar luces en las acciones que se debería implementar les recomiendo estas actividades: Reforestación de avenidas, restauración de parques y corredores biológicos mediante arborización, organización de viveros en colonias y barrios, plantación de las orillas de ríos quebradas, charlas en comunidades y barrios sobre como ayudar a mitigar el cambio climático, organización de brigadas protectoras de áreas verdes, promoción de charlas y conferencias en centros educativos y universidades, otorgar premios a las zonas urbanas más arborizadas…etc.
Es decir, en otras palabras usarlo para lo que se constituyó, de lo contrario es fomentar la dependencia o el paternalismo en las personas, sin que se logre ningún beneficio de cara a la reducción de la temperatura en el planeta; Honduras esta dentro de las naciones más vulnerables a los cambios climáticos, pero no se ha observado nada serio por parte del gobierno, al contrario, se han solicitado recursos en nombre del ambiente y hasta la fecha no se sabe dónde están resultados y los fondos adquiridos no se sabe en que se han utilizado.
Toda acción tiene su efecto, y en este caso el efecto a todas luces es y será negativo, las personas serán golpeadas nuevamente por alguna acción climática, ya sea ésta de sequia o exceso de agua, entonces, ¿cuál será la reacción de las personas? será extender la mano otra vez, es decir, una especie de adaptación no climática sino más bien monetaria, siguiendo el esquema desarrollado por el actual gobierno.
Para finalizar, no vayan a presentar esta actividad en la próxima cumbre mundial de cambio climático a desarrollarse en la ciudad de Belém do Para, Brasil, porque además de hacer el ridículo nos ponen en vergüenza a todos los hondureños, y no es correcto asistir a estas cumbres a mentir y pretender engañar a un conglomerado muy técnico y científico.
Recuerden, que tienen 20 incomodas verdades ambientales que reflejan su actividad en el presente gobierno, todas ellas mencionan acciones y proyectos que alteran y/o destruyen el medio ambiente, la biodiversidad y los medios de vida de una gran parte de la hondureñidad. A manera de conclusión se puede decir con toda seguridad que ha sido la peor gestión ambiental gubernamental de todos los gobiernos “democráticos” que han tenido el honor de rectorar la nación.
La cantidad de L. 661 millones de lempiras es la cantidad que se tiene destinado a invertir en Honduras, con la diferencia que este fondo se regala y no se invierte para mitigar el impacto climático, el cual se usa para apoyar a las familias afectadas por los efectos del cambio climático. Este fondo se deriva de un préstamo que BCIE aprobó a Honduras de aproximadamente $70 millones de dólares (L1,833.3 millones), sin embargo, las familias afectadas no invertirán el mismo en actividades especificas relacionadas con temas de mitigación y adaptación al Cambio Climático.
El tema tiene otras causas que no se están atacando de una forma planificada y con la asistencia técnica debida, y es la forestación sistemática que día a día se realiza en la nación por diferentes causas y que obedecen a un impulso de políticas de desarrollo agrícola sin evaluar su impacto en el medio ambiente.
De seguir con esta practica implementada no alcanzarán los recurso financieros porque la vulnerabilidad climática de la población tienen su origen en otros temas de raíces más profundas y que aún no se están enfrentando como lo es el tema de la educación formal, el cual no sensibiliza a las nuevas generaciones en esta temática; mientras tanto, el tema cada día se agudiza y no es regalando plata a lo caballo que se resolverá el problema, es con la realización de un gran plan nacional de ordenamiento del territorio en el cual debe contener los grandes temas como : educación, políticas, restauración…etc.
En conclusión, se debe de entender que la afectación sobre los efectos del cambio climático no solo son las inundaciones, se trata de: sequias, seguridad alimentaria, destrucción de la biodiversidad incluyendo las especies marinas, la invasión del mar a tierra firme…etc. es decir un espectro grande en donde hay cientos de personas afectadas, lo que significa que hay que revertir la forma de beneficiar a los perjudicados por ser un conglomerado muy amplio, quiere decir que la inversión es en proyectos que beneficien a todos y no aún sector especifico en donde los criterios de selección dejan mucho que pensar…
“Hay que estar vigilantes, porque esto aún no termina y el pastel puede repartirse más sin enterarnos, hay algunos recursos que los tienen en la mira…”.








