San Salvador.- La defensa del sacerdote español Antonio Rodríguez, acusado de apoyar a pandillas salvadoreñas, espera que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) resuelva pronto la petición de medidas cautelares para la liberación del religioso, dijo hoy su abogado, Nelson Flores.
La defensa también espera una pronta resolución del recurso de apelación que presentó el pasado 20 de agosto ante una cámara especializada de lo penal de San Salvador, indicó Flores a Efe.
La solicitud de medidas cautelares para que el religioso pueda seguir el proceso en su contra desde casa se envió a la CIDH, con sede en Washington, hace varios días, «pero aún no hemos tenido respuesta; sólo nos manifestaron que sí habían recibido la denuncia», agregó.
Flores comentó que habitualmente la CIDH resuelve «de manera rápida, a veces en 24 horas», este tipo de solicitudes, dependiendo «de la urgencia del caso», pero que en este todavía no lo ha hecho.
Recordó que, en el caso de la apelación, el recurso se interpuso contra la decisión del Tribunal Especializado de Instrucción B de San Salvador de dictarle prisión provisional al sacerdote el pasado 5 de agosto.
Dicho tribunal trasladó el proceso al Juzgado Especializado de Instrucción de Santa Ana (oeste), que este martes recibió el caso, confirmó en un comunicado el Centro Judicial Isidro Menéndez, sede de los tribunales de Justicia en San Salvador.
Flores apuntó que Rodríguez «está bien de salud» en una dependencia policial y sigue tomando medicamentos después de haber permanecido hospitalizado entre el 8 y el 15 de agosto por problemas de hipertensión y diabetes.
El sacerdote está recluido en la División Antinarcóticos de la Policía Nacional Civil (PNC) en San Salvador, en un cuarto en el que dispone de baño, refirió.
La Fiscalía General de la República (FGR) acusa al religioso de los delitos de asociación ilícita, tráfico de influencias e introducción de objetos ilícitos en centros penitenciarios, supuestamente para favorecer a pandilleros.
Rodríguez fue detenido hace casi un mes, el 29 de julio pasado, como parte de una operación de la FGR y la PNC contra pandilleros en varias zonas del país.
La FGR vincula al sacerdote español en dos casos de supuesta colaboración con pandillas, pero en uno de ellos el Tribunal Especializado de Instrucción A de San Salvador le dictó medidas cautelares el 3 de agosto, aunque dos días después el otro juzgado ordenó que continuara en prisión preventiva.
Rodríguez es párroco de Mejicanos, un municipio cercano a San Salvador, donde desde hace varios años dirige un programa de rehabilitación de pandilleros, y tras su detención ha recibido la solidaridad y el apoyo de la Iglesia católica y diversas organizaciones sociales, religiosas y de derechos humanos.