Las fuentes dijeron que la única evidencia encontrada hasta ahora es la canoa de uno de los desaparecidos.
En la búsqueda participan elementos de la Fuerza Aérea y la Fuerza Naval hondureñas, una avioneta privada contratada para apoyar estas labores, y otra contratada por la embajada de España en Guatemala.
Asimismo se han integrado a estos trabajos un barco del servicio de guardacostas de Belice y la Marina mexicana.
Los barcos pesqueros que navegan la zona donde desaparecieron los españoles, siguen estando en alerta, indicaron las fuentes.
Los desaparecidos son Francisco Romaní Hom y María del Carmen Arenas, ambos de 49 años de edad.
La pareja zarpó en una canoa con la intención de bucear, ya que iban provistos de aletas, gafas y ‘snorkel’ (tubo para respirar bajo el agua), según las fuentes.
Una fuente de la embajada de España en Tegucigalpa dijo a periodistas que las autoridades de Honduras, personas particulares y el Ejército de Estados Unidos entre otros sectores, han estado aportando una valiosa cooperación en la búsqueda de los españoles.