Tegucigalpa – Las autoridades de la Secretaría de Salud (Sesal) prevén que la entrada de la nueva variante del coronavirus ómicron al territorio hondureño será “suave” y estiman no tendrá mayor presencia de la variante delta u otras que ya circulan a nivel nacional.
Así lo expresó a periodistas en Tegucigalpa el jefe de la Región Metropolitana de Salud del Distrito Central, Harry Bock, quien comentó que antes de la entrada de la variante delta toda la población estaba alarmada y pasó desapercibido.
Comparó que de igual manera sucederá con ómicron, variante cuya presencia en Honduras aún no se confirma.
“Es cierto, es una cepa más virulenta y más infecciosa, pero todavía no está demostrada su capacidad de mortalidad”, declaró el jefe de la Región Metropolitana de Salud.
El galeno también comunicó que los triajes que actualmente funcionan en el instituto Jesús Milla Selva, Universidad Católica de Honduras y Mayangle funcionarán hasta el 31 de diciembre.
La anterior decisión ha sido ampliamente criticada por el gremio médico que prevé una nueva ola de la pandemia a causa de las fiestas decembrinas y por la presencia de ómicron en el país.
Actualmente existen 25 mil capitalinos que cuentan con la dosis de refuerzo de la vacuna contra la COVID-19, por lo que consideró que la estrategia a seguir es acelerar los procesos de vacunación.
“La propuesta es que sigamos incentivando a la población para que se vacune”, acotó Bock.
Seguidamente, lamentó que existe una gran parte de la población que no quiere vacunarse aunque se les acerque la vacuna contra la COVID-19 a sus comunidades. (RO)
