Tegucigalpa – En las últimas semanas, el ambiente dentro del Partido Libertad y Refundación (Libre) ha sido tenso, y el resquebrajamiento interno y el desencanto entre las bases y militantes son más evidente que nunca; por lo que para muchos Libre ya va en caída libre.
– Narcovideo y denuncia del Tratado de Extradición agudizan crisis interna y desplome de apoyo popular en Libre.
– Varios dirigentes de Libre se manifiestan en desacuerdo con la decisión del Ejecutivo de eliminar la entrega de hondureños a EEUU por delitos de narcotráfico.
El partido que llegó a gobernar con mucha expectativa, con la primera mujer presidenta en la historia y que prometía refundar Honduras, ha ido perdiendo credibilidad y unidad, y con los últimos acontecimientos se suma la decepción de que Libre, es más de lo mismo, de lo que los hondureños querían borrar.
Desde que la presidenta Xiomara Castro asumió el poder, se han acumulado críticas internas por la falta de cambios sustanciales en áreas clave, como la seguridad, la lucha contra la corrupción y el desempleo y casos particulares como la instalación de la Comisión Internacional Contra la Corrupción y la Impunidad en Honduras (CICIH).
Si bien se han implementado algunas políticas progresistas, gran parte de la ciudadanía considera que las promesas más ambiciosas han quedado en el aire o han sido diluidas por otros compromisos.
Para muchos analistas vendieron una refundación pregonando el socialismo y han entregado un remiendo del sistema que decían combatir.
A esto se suma la creciente percepción de que el liderazgo de Libre está cada vez más centralizado en la figura de la familia Zelaya-Castro y en segundo lugar Moncada Godoy.
Incluso voces militantes que prefieren el anonimato lamentan que se unieron a una causa, no a una dinastía, aludiendo a la creciente influencia de la familia presidencial tanto en el partido como en el gobierno. Esta concentración de poder toma más notoriedad, según expertos, con los últimos acontecimientos donde a costa de la defensa de la familia, la mandataria se lleva de encuentro a todo el país con la decisión de denunciar el Tratado de Extradición con Estados Unidos.
Analistas políticos y sociales consultados por Proceso Digital destacan que la falta de cohesión interna, junto con la gestión criticada en temas sensibles del país, ha mermado la imagen del partido.
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Libre es un partido narco
“El involucramiento de Libre, con el crimen organizado está en la médula del partido, está en la célula primaria del partido”, remarcó la exrectora de la UNAH, en entrevista con Proceso Digital, la socióloga Julieta Castellanos.
A otros aspectos negativos “a Libre se le ha sumado ahora el golpe durísimo de ser un partido narco, porque LIBRE, es un narco partido con esas acciones que ha hecho la presidenta de exigir o de pedirle al canciller que denuncie el tratado con eso el partido se está colocando del lado del crimen y del delito los está protegiendo no hay otra forma de llamarlo, sino que Libre no quiere que le extraditen a su gente”, remarcó.
Recordó que Libre tuvo esa intención desde el año pasado cuando la presidenta de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), la primera intervención que tuvo fue en ese sentido y luego cuando la Universidad envió una propuesta de ley de extradición al Congreso Nacional, y no pudieron hacerlo y tuvo que salir la presidenta (Xiomara Castro) a poner su imagen y su rostro para hacerlo.
Para el analista Raúl Pineda los últimos acontecimientos del destape del narco-video es un golpe para Libre porque ahora es señalado como un ‘narco-partido’, lo cual, en su opinión, es indiscutible. Las acciones de la presidenta, al pedir que se denuncie el tratado de extradición, muestran que Libre se está alineando con el crimen organizado», afirmó.
«La política hondureña está profundamente vinculada con el crimen organizado y necesita una depuración urgente», dijo el analista político Luis León.
El exdirector del Instituto Holandés para la Democracia Multipartidaria (NIMD) en Honduras, además expresó su preocupación, tras las recientes revelaciones que involucran a un secretario del Congreso en una reunión con narcotraficantes. «Creo que lo que pasa en Libre es lo que vemos en todos los partidos políticos, y nos lleva a pensar que necesitamos una depuración política seria y un relevo generacional bien definido», comentó Luis León, a Proceso Digital, subrayando la necesidad urgente de una reestructuración del sistema de partidos políticos en el país.
Para León, la crisis en el partido Libertad y Refundación (Libre) es un reflejo del fracaso generalizado del sistema político hondureño, que ha permitido que los partidos se conviertan en propiedades de pequeños grupos o familias, sin garantías para evitar la corrupción y el crimen.
El desmoronamiento
El declive de Libre ha sido gradual y son varios momentos que han contribuido para llegar a la crisis actual, los problemas se vieron desde la toma de posesión con los problemas con Jorge Cálix, en el Congreso Nacional.
Esa brecha se fue agudizando hasta la actualidad con la salida de Jorge Cálix y su grupo, esto vino a debilitar significativamente a Libre, y se agravó con la persecución de empleados en instituciones donde él tenía influencia y luego la decidida voluntad que se le ha visto a Calix de ir con todo contra Libre, apuntan los analistas.
En un análisis de la situación política que enfrenta el partido en el poder, Libertad y Refundación (Libre), el analista político Raúl Alvarado expresó que Libre está en un proceso de decadencia y división dentro de la bancada oficialista.
La renuncia de Carlos Zelaya, exsecretario del Congreso Nacional y hermano del expresidente Manuel Zelaya, junto con su hijo José Manuel Zelaya, exsecretario de Defensa, ha desatado una tormenta política que amenaza con fracturar aún más al partido, dijo a Proceso Digital, el analista Raúl Pineda.
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Además, los analistas comparten que, el video que vincula a líderes de Libertad y Refundación con narcotraficantes ha provocado una nueva confrontación interna en Libre.
Y ahora mismo se está viendo una bancada de Libre que está empezando a dividirse más por el respaldo que le están dando al señor Rafael Sarmiento, mientras en la Casa de Gobierno están promocionando a otra persona con descrédito.
En este punto señalan que es evidente el descontento que hay entre los parlamentarios de la bancada rojo-negro particularmente por el tema de la extradición, donde muchos ya lo han expresado públicamente e incluso piden a la presidenta que se retracte, eso deja una bancada más débil.
En este punto, no se puede dejar de mencionar el otro que ha venido a restarle credibilidad a Libre donde ha mostrado la misma presidenta su falta de coherencia. Y es el nombramiento de la precandidata de Libre Rixi Moncada como ministra de Defensa.
Los entendidos en la materia analizan que la convocatoria electoral es este 8 de septiembre, lo que implica que ella podría hacer campaña política permanentemente utilizando ventajas que le da el poder y más estando en una institución que es parte fundamental en las elecciones, por lo que está decisión también fue recibida con mucho recelo, por parte de muchos sectores del país, que coinciden que es un golpe a la legitimidad del proceso electoral.
Incluso hay quienes argumentan que con este nombramiento hay algo turbio que suma a la incertidumbre nacional, pero también le resta puntos a Libre.
A esa caída de Libre también se agrega que todos esos conflictos particularmente los últimos acontecimientos están haciendo qué sectores más académicos y decentes dentro de Libre se distancien de esa afiliación.
La pérdida de votos
Pero la crisis de Libre, no se quedará solo en los simples argumentos, sino que se materializará en las próximas elecciones con la pérdida de votos, anotan los politólogos.
Se recuerda que, si bien es cierto la presidenta Castro, llegó al poder con una amplia ventaja electoral, no fue por sí sola, sino que hubo circunstancias del momento que le favorecieron.
La exrectora Castellanos, detalló que el partido Libre ahora se enfrenta a la pérdida de una gran cantidad de votantes en cuatro bloques claves: el grupo que se fue con Cálix, los votantes que apoyaron a la presidenta por la alianza con Salvador Nasralla, los que deseaban la salida de Juan Orlando Hernández con el clamor del fuera JOH, y los independientes, que ahora están desencantados con la gestión de Castro. A estos grupos ahora mismo se suma otra cantidad de votantes perdidos para Libre por la denuncia del tratado de extradición que ha generado una indignación generalizada.
En este contexto los conocedores del tema político advierten que, si esta situación no se maneja con inteligencia, Libre enfrentará una derrota electoral inminente. Ya en los últimos días, el malestar pasa de las críticas y comentarios a fuertes manifestaciones y pronunciamientos incluso pidiendo la renuncia de la mandataria.
Tampoco le ha funcionado a Libre la teoría que han querido posicionar de un posible movimiento para gestar un golpe de Estado. Y más bien la opinión se inclina porque son ellos mismos los que pudieran darse un autogolpe, ya que quieren quedarse a toda costa en el poder. Situación por la cual la oposición deberá manejar la situación con astucia y transparencia, y de igual forma la ciudadanía a través de la sociedad civil está llamada a estar alerta para garantizar que se respete la democracia. LB
