Tegucigalpa – Luego que el pasado 8 de abril se produjeran cuatro reyertas en las principales cárceles de Honduras, un mes después la intervención en el sistema penitenciario ordenada por la presidenta Xiomara Castro avanza lenta y sin mayores resultados hasta la fecha.
– Cinco balaceras se han registrado en el último mes en las cárceles del país, la mayoría de estos hechos violentos han tenido lugar en El Pozo.
– Villanueva ha reiterado que no será tonta para avisar cuando será el desarme y bloqueo de las comunicaciones en las cárceles.
Con más de una decena de heridos y un muerto, luego de sendas balaceras en las cárceles de Ilama (Santa Bárbara), Morocelí (El Paraíso), Támara y El Porvenir (Francisco Morazán), el Poder Ejecutivo anunció “una dura intervención” en el sistema penitenciario, con el objetivo de recuperar la gobernabilidad y evitar la violencia en estos recintos considerados “escuelas del crimen”.
La elegida para comandar la intervención fue la viceministra Julissa Villanueva, quien desde ese momento ha dado algunos pasos para entrar de lleno al control de las cárceles, que según sus propias versiones, está en poder de los grupos criminales.
En un mes desde los hechos violentos que desencadenaron la orden ejecutiva de intervenir el sistema nacional penitenciario, al menos cinco balaceras -días distintos- se han registrado, especialmente en la cárcel de Ilama, Santa Bárbara, conocida como El Pozo.
En ese mismo periodo otros sucesos han ocurrido alrededor del tema. Para el caso la viceministra Villanueva ha dejado claro que no avisará cuándo hará el desarme y el bloqueo de la señal de comunicaciones en las cárceles, además agentes penitenciarios se declararon en rebeldía por el incumplimiento de aumentos salariales y otros beneficios, pero rápidamente fueron resueltas sus inquietudes por la interventora.
En el último tiroteo -el pasado 3 de mayo en El Pozo- la viceministra Villanueva dijo que se trató de “tres tiritos”, pero que la situación fue resuelta de manera inmediata.
Una de las principales teorías de la inteligencia policial, es que los reclusos se atacan a disparos para ser llevados a hospitales y desde ahí ejecutar sus fugas.
Para la recuperación de la gobernabilidad en el sistema carcelario se anunció el 18 de abril un decálogo de medidas que van desde el desarme, bloqueo de telefonía, traslados y clasificación de internos.
Igualmente el 19 de abril, la interventora Julissa Villanueva ordenó a la Dirección Nacional de Fuerzas Especiales (DNFE) tomar el control de las cárceles hondureñas para evitar nuevas reyertas, aunque las mismas siguieron suscitándose.
Cárcel de Naco ¿es opción?
Hace unos días, como parte de la intervención al sistema penitenciario, el gobierno anunció que habilitará la cárcel de Naco, Cortés, norte de Honduras.
La presidenta Castro y la viceministra de Seguridad, Julissa Villanueva constataron las condiciones en que se encuentra la cárcel del norte del país, cuya infraestructura está inconclusa y deteriorada físicamente tras varios años de abandono.
En noviembre de 2021, la Fiscalía Especial para la Transparencia y Combate contra la Corrupción Pública (Fetccop), comenzó la investigación de la situación de abandono en la cual se encuentra la construcción del centro penal en la aldea “La Acequia” que colinda entre el sector de Naco en los departamentos de Cortés y Santa Bárbara.
De acuerdo a las pesquisas, la obra albergaría a unos dos mil 500 privados de libertad y comenzó a erigirse después del acontecimiento que ocurrió el 17 de mayo de 2004, cuando un total de 107 reclusos murieron calcinados en el desparecido presidio sampedrano.
El presidio se construyó en un terreno de 200 hectáreas en donde supuestamente se habría invertido más de 193 millones, la obra se encuentra en abandono y solo se observa cómo la maleza va arropando las toneladas de hierro y concreto.
La obra empezó a construirse en el gobierno del expresidente Ricardo Maduro (2002-2006) quien juramentó a monseñor Rómulo Emiliani como coordinador del comité para la construcción del presidio.
El censo penitenciario arroja el dato de 19 mil 966 privados de libertad, pero la doctora Villanueva advirtió que se contarán uno por uno para evitar suplantación de identidades.
Balaceras en un mes
1. Balaceras simultáneas en cárceles dejan un muerto y siete heridos (08.04.2023.)
2. Siete heridos en nuevo tiroteo en El Pozo (19.04.2023)
3. En El Pozo 12 heridos en otra reyerta (21.04.2023.)
4. Reclusos siguen armados; cuarto tiroteo en 17 días en El Pozo (25.04.2023)
