Tegucigalpa – Autoridades de la Iglesia Católica de Atlántida, se pronunciaron este viernes sobre la instalación de las Zonas de Empleo y Desarrollo Económico (ZEDE) y asegura que ese es un proyecto doloso porque afecta la soberanía de Honduras.
En una comparecencia de prensa realizada este día y liderada por monseñor Michael Lenihan, la Diócesis de La Ceiba, en el departamento de Atlántida, indicó que la intención de instalar las ZEDEs es un proyecto que huele desde la raíz a ilegal e inconstitucional”.
El pronunciamiento leído por líderes religiosos de La Ceiba, expresa inicialmente que es un proyecto que afecta a diferentes regiones del país, pero especialmente a los departamentos de Atlántida e Islas de la Bahía y es por eso que el clamor popular rechaza las ZEDEs.
Es por ello -señalan- que el polémico proyecto ha dejado serias violaciones a la Constitución de la República, así como el debilitamiento de la institucionalidad porque en años anteriores se llegó hasta el extremo de quitar magistrados por manifestarse contra ese proyecto.
La iglesia, lamenta que el proyecto se desarrolle en Roatán, en secretividad, sin el conocimiento de autoridades locales, sin el derecho a la consulta previa; manteniendo viva la posibilidad de expropiar tierras, atenta contra el estado de derecho y la seguridad jurídica.
En ese sentido consultan ¿Qué intenciones ocultas hay en todo esto? ¿Qué intereses se mueven y a quiénes se quieren beneficiar? Ya que según los expertos, se vulneran principios esenciales de la Constitución bajo la soberanía e integridad del territorio nacional y forma de gobierno.
De esta manera la Iglesia Católica rechaza que las ZEDEs gocen de autonomías jurídicas en todos los sentidos, además es un mecanismo que coloca grandes recursos en unos pocos en contra posición con la escases dignas de oportunidades para las mayorías empobrecidas.
Las mismas -dice el escrito- que la vida está amenazada y los derechos humanos inherentes a ella, porque el sistema de salud no cubre las necesidades de la población, la educación al borde del colapso por su mala calidad y manipulación política genera desigualdad.
“El proyecto de las ZEDes es la forma más perversa, que es promovidos por algunos políticos que quieren seguir despojando al país de su riqueza, por eso elevamos nuestra voz diciendo no al abuso y al despojo; el país no se vende en pedacitos”, añade el pronunciamiento de la Iglesia.
Consecuentemente, indica que quienes promueven ese proyecto deberían buscar nuevas formas de desarrollo de manera que se permita generar oportunidades equitativas para todos; en el marco de la igualdad, la justicia, la dignidad, la libertad y solidaridad.
Finalmente invita a toda la población ceibeña, para que asistan a un cabildo abierto el próximo 19 de junio, para abordar el tema de la iniciativa que su juicio atenta contra el bien común “los animamos a movilizarse y demostrar su desaprobación a este proyecto”. JP.