La reunión con el portavoz de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), «Raúl Reyes», ya tiene fecha y será el 8 de octubre, según la senadora colombiana Piedad Córdoba.
«El presidente acepta la reunión, también acepta la fecha (del 8 de octubre) y, obviamente, que ya se irá trabajando sobre la marcha si va a ser en Miraflores, dónde va a ser», afirmó la senadora, tras reunirse el martes por la noche con el presidente venezolano en el Palacio Presidencial en Caracas.
Y agregó: «Pero lo cierto es que tanto las FARC aceptan venir acá (a Venezuela) como el presidente Chávez acepta la reunión».
En declaraciones hoy antes de partir de Caracas, Córdoba dijo que la guerrilla de las FARC le aseguró que tanto la ex candidata presidencial colombiana Íngrid Betancourt como los otros rehenes están vivos y en buen estado de salud.
Precisó a medios caraqueños que en su reciente encuentro con «Raúl Reyes» trató el tema de las condiciones en que se encuentran los 45 secuestrados en manos de esa guerrilla.
«La respuesta de ellos es que (Betancourt) se encuentra viva y se encuentra en condiciones buenas de salud», y «en general todos los retenidos que están en poder de las FARC», declaró a la emisora caraqueña Unión Radio.
Asimismo, reiteró su optimismo por el éxito de la mediación de Chávez y dijo que «lo más importante que ha logrado esta mediación es que, por primera vez en muchos años, plantean las FARC la posibilidad de la paz».
«La voluntad que tiene el presidente (colombiano, Álvaro) Uribe también de avanzar» y la «mediación del presidente Chávez» son razones suficientes para que los familiares de los rehenes tengan «esperanza», agregó la senadora colombiana de oposición.
Córdoba tiene previsto viajar ahora a Estados Unidos para entrevistarse por separado con los guerrilleros extraditados «Simón Trinidad» y «Sonia», con varios congresistas demócratas y con familiares de los tres norteamericanos en manos de las FARC.
Así lo dijo la senadora en declaraciones desde Caracas a radios colombianas.
El martes por la noche, Chávez y Piedad Córdoba se reunieron en Miraflores para un encuentro, cuya primera parte fue transmitida en directo por la cadena estatal Venezolana de Televisión (VTV) durante el programa «Dando y Dando», un espacio oficialista dedicado al análisis político de la actualidad.
En ese enlace directo, Chávez reveló dos cartas que recibió de las FARC: una del Secretariado del grupo guerrillero, del 28 de agosto, y otra de Pedro Antonio Marín, alias «Tirofijo» o «Manuel Marulanda», que le llegó, dijo, el pasado sábado.
Asimismo, se mostró el video en el que Luis Edgar Devia, alias «Raúl Reyes», plantea el 8 de octubre como fecha de un posible encuentro con el jefe de Estado venezolano en Caracas, que sería preparatorio de una eventual entrevista entre Chávez y Marulanda.
En respuesta a las imágenes, el presidente venezolano dijo que «lo que está pendiente ahora, en el corto plazo, es una reunión con el enviado de Marulanda».
Chávez también leyó fragmentos de las cartas de Marulanda y sobre todo del Secretariado de la guerrilla.
Citó textualmente: «en las FARC existe disposición para concretar el acuerdo que permita el canje de rehenes. Para ello, es indispensable el despeje de los municipios de Pradera y Florida para que las partes convengan los términos y procedimientos que conduzcan a la liberación de cautivos».
«Es la posición que ya conocemos», declaró, antes de mostrar parcialmente a las cámaras la segunda misiva, suscrita por el máximo líder de las FARC, de la que leyó: «logré (Marulanda) escuchar su disposición de contribuir a la liberación de prisioneros de guerra».
Y agregó que le estaba escribiendo a Marulanda, sin más precisiones.
Por su parte, Piedad Córdoba consideró que la no mención del tema del despeje en el video que grabó junto a Raúl Reyes la semana pasada sugiere que el proceso «avanza».
A mediados de agosto, el presidente de Venezuela aceptó la solicitud, que le hizo la senadora, de actuar como mediador entre el gobierno colombiano y las FARC para el canje de 45 secuestrados por cerca de 500 guerrilleros presos.