Justo cuando sesionaba este viernes el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, donde la resistencia de los zelayistas esperaba la petición de los “cascos azules” de la ONU para invadir Honduras, el ex gobernante acusó al gobierno de Micheletti de haber lanzado este viernes en la sede de la embajada de Brasil, “gases tóxicos” de dimensiones “desconocidas y desproporcionadas” para envenenarlo junto a sus seguidores.
Zelaya se encuentra junto a una centena de seguidores alojado en la sede diplomática en Tegucigalpa, en calidad de “huésped”, tras su sorpresivo retorno a la capital, burlando la vigilancia e inteligencia militar policial, como parte de un plan gestado por los países sudamericanos de izquierda que conforman la ALBA , liderados por Hugo Chávez, de Venezuela, el presidente Ignacio Lula Da Silva de Brasil, así como las naciones centroamericanas de Nicaragua y El Salvador.
Previo a sus explosivas declaraciones y acusaciones, el ex gobernante hondureño se cercioró de que todo estuviera en su lugar, especialmente la prensa nacional e internacional.
“¿Estamos al aire?, ¿Ya están conectadas las televisoras, nos vemos en la televisión local? ¿Ya se enlazaron las radios, cerciórate,” indicaba Zelaya a uno de sus periodistas afines, a lo que éste respondió: todo listo, señor.
Ante el nuevo melodrama
Zelaya inició entonces una nueva fase en sus denuncias. Dijo que producto del supuesto “gas venenoso” que el régimen de Micheletti le habría mandado a instalar a través de unas bolsas, que transportaban los tóxicos por medio de unos tubos, él y sus más cercanos colaboradores empezaron a experimentar ardor en la garganta, dolor en el estómago, evacuaciones constantes, sangrado por la nariz, irritación en los ojos, dolor de cabeza y otras dolencias, sin saberse a ciencia cierta, qué originó los síntomas reportados por esas personas al interior de la sede diplomática. Un equipo de médicos atiende a Zelaya y los suyos.
Sin apariencia de estar enfermo o mucho menos afectado de su garganta, el ex presidente dijo que lo querían envenenar y presentó una pañoleta con sangre, propiedad del ex funcionario y político, Rassel Tomé, a quien de pronto le vino una especie de sangrado de nariz.
| La pañoleta ensangrentada, unas fotografías poco visibles de una computadora, así como un aparato causante de los ruidos e interferencias instalado presuntamente por las autoridades al interior de la sede diplomática, fueron parte de las “evidencias” de la denuncia y acusación presentadas por Zelaya, mismas que fueron reforzadas por el sacerdote Andrés Tamayo, quien sorprendió por su manejo y conocimiento sobre el uso de armas químicas de última generación utilizadas por las fuerzas del orden a nivel mundial. |  |
A su vez, el dirigente liberal, Carlos Reina, leía un dictamen hecho en dos horas por el doctor Mauricio Castellanos, quien habría tomado muestra de la contaminación que rodea a la embajada a más de un kilómetro a la redonda, el cual reportó en forma preliminar que existe una alta contaminación en la zona, presumiblemente por el uso de las bombas lacrimógenas, el gas pimienta y otros elementos utilizados durante los violentos desalojos que se han producido en la zona. La medición no incluyó la sede diplomática pero el ex presidente dijo que “a lo mejor” estaban viviendo los efectos de esos gases, contradiciendo así su versión preliminar que el “rocío del veneno” se hizo en horas de la mañana del viernes; que un helicóptero sobrevoló la zona y esparció vidrio molido para que Zelaya y sus seguidores los ingirieran y que un “carro extraño” pasó haciendo ruido por la embajada, tirando presuntamente el gas mortífero.
Un equipo de derechos humanos, Naciones Unidas y Cruz Roja, según la autoridad policial, investiga la denuncia, tras descartar que los cuerpos militares y policiales estén usando ese tipo de armas químicas. No se reporta, tampoco, por ahora, de alguna intoxicación sufrida por parte de los periodistas internacionales que pernoctan con Zelaya en la embajada como parte de su labor de cobertura profesional, desde el lunes de su retorno.
Los médicos que ingresaron a la verificación son ex miembros de Gabinete de Zelaya ellos concluyeron con que no existen personas enfermas por gases tóxicos dentro de la sede diplomática.
Zelaya no permitió el ingreso a la embajada brasileña de los miembros de la Fiscalía de Derechos Humanos. Así lo confirmó el fiscal Alejandro Hidalgo quien luego de permanecer más de cuatro horas a la entrada de la sede de la misión de Brasil dijo que no sintió ninguna sintomatología que le afectara su salud.
Los reportes preliminares indican que otro de los causantes de esos malestares puede ser el hacinamiento de personas en la sede de la embajada, donde los baños resultan insuficientes para asistir a los inquilinos incómodos de esa sede diplomática. Todo ello está siendo investigado.
Falla estrategia ante Consejo de Seguridad
Lo que sí trascendió por boca del ex gobernante es que la denuncia del “nuevo ataque” a la embajada donde se aloja para arengar a la violencia y la insurrección, es que estos hechos fueron públicos a nivel internacional y al Consejo de Seguridad de la ONU , antes de ser conocidos por la prensa local y extranjera acreditada en el país.
Se desconoce la lectura que de esa denuncia hizo el Consejo de Seguridad, quien resolvió condenar la supuesta “intimidación” a la embajada brasilera en Tegucigalpa por parte del gobierno transitorio de Micheletti, pero declinó pronunciarse a favor de una invasión de “cascos azules” al país como esperaba Zelaya y los miembros de la resistencia. La ex canciller, Patricia Rodas, de momento, no tuvo suerte al parecer en esta gestión, que se caracterizó por fuertes divergencias de criterio en torno a Honduras por parte de los representantes de Brasil y Estados Unidos, según trascendió.
 | La teoría de una invasión a Honduras por parte de las Naciones Unidas, irónicamente fue condenada y rechazada por el líder cubano, Fidel Castro, quien advirtió el jueves que sería un error y una torpeza solicitar tal acción porque se desataría una especie de boomerang que afectaría seriamente la América Central y América Latina, en general. |
Zelaya, quien se encuentra desde el lunes, ha dicho a la prensa internacional que lo quieren matar, que le interceptan las comunicaciones-aunque pasa todos los días colgado del teléfono hablando con la prensa y diplomáticos- que Micheletti lo quiere obligar a “suicidarse” y que un grupo de expertos israelitas al servicio del actual régimen asesoraba el asalto a la embajada de Brasil para sacarlo y “matarlo”.
Sus declaraciones, fueron calificadas por la prensa internacional española como “extrañas” y “alucinantes”, tras considerar que si bien en su regreso no ha sido recibido con ostras y caviar, achacar a Micheletti, la capacidad de organizar “tan sofisticadas operaciones en un país cuyos soldados desfilan con palos de escoba, parece un exceso”.
Malestar por inicio del diálogo
No obstante, el “olor a azufre” que rodea el ambiente en el que pernoctan Zelaya y sus seguidores- a quienes se les dota de medicamentos y alimentación nutritiva según los reportes de prensa internacional- sirvieron para bajar en parte el desencanto suscitado la noche del jueves entre la resistencia de los zelayistas, indignados porque su líder se abrazaba calurosamente con su amigo y ex vicepresidente de su gobierno, Elvín Santos, actual candidato presidencial del Partido Liberal.
Santos, junto a los presidenciables de los partidos opositores, el Nacional, la Democracia Cristiana y el Partido de Innovación y Unidad Social Demócrata, se reunieron con Zelaya como parte de las gestiones para iniciar un primer contacto entre éste y el presidente interino, Roberto Micheletti.
| Los presidenciables indicaron que ese primer acercamiento con Zelaya fue bastante “positivo” y se abordaron algunos puntos vinculados con el proceso electoral, un nuevo acuerdo de reformas políticas, así como los alcances y limitantes de la propuesta Arias, que impulsa el presidente costarricense, Óscar Arias. |  |
La propuesta Arias incluye once puntos que van desde una instalación condicionada de Zelaya en el gobierno, más no al poder, una comisión de la verdad, otra de seguimiento, la renuncia a cualquier propuesta sobre una asamblea nacional constituyente, entre otros.
Previo a la cita con Zelaya, los cuatro presidenciables se reunieron también con el presidente Micheletti, y de acuerdo a sus declaraciones, han solicitado tanto al presidente actual como al depuesto, que antepongan sus intereses personales para pensar en una solución a los problemas del país.
En ambos lados, explicaron, encontraron anuencia al diálogo y este primer acercamiento es solo una fase para auscultar las posibles salidas a la crisis, según lo acordado en una reunión que sostuvieran la semana pasada con el presidente Arias en San José, Costa Rica, quien pidió a estos candidatos, facilitar el proceso interno de diálogo entre las partes en pugna para allanar una solución a la crisis.
Propuesta Arias, un instrumento para un acuerdo
Los presidenciables tienen claro una de sus metas dentro del acercamiento preliminar que están haciendo: blindar el proceso electoral por lo que han hecho un llamado a la comunidad internacional para que no intervenga más en los problemas internos de Honduras, de la forma inquisidora en que lo están haciendo, condenando los procesos antes de iniciarlos. En su pronunciamiento han indicado que no desean que se usen las elecciones como un mecanismo de chantaje para Honduras.
Durante la conversación con el ex presidente Zelaya, éste dijo sentirse complacido por la reunión, ya que Honduras “vive una profunda crisis y en la medida que se acuerden reformas positivas, habrá un mejor futuro”. Zelaya dijo que los presidenciables se mostraron de acuerdo en que el diálogo debe tener como punto de partida las bases de la propuesta Arias, el cual, sostuvo, “es un instrumento para llegar a un acuerdo político”. |  |
Manifestó que se habló de reformas necesarias a las figuras del plebiscito y el referéndum y “vamos a continuar este diálogo y espero que esto se arregle ya que el país necesita de un proceso de diálogo y de cambio”.
Este problema, dijo Zelaya, debe resolverse en el “menor tiempo” posible.
Fueron testigos de esa reunión el sacerdote Tamayo, la esposa de Zelaya, Xiomara Castro, y los políticos liberales, Carlos Eduardo Reina y Rassel Tomé, todos dirigentes de la resistencia zelayista.
Intolerancia de los zelayistas
Todo auguraba un buen avance de cara a la identificación de coincidencias previo a las negociaciones, cuando el ex presidente Zelaya fue ennavajado por sus asesores mediáticos.
“Usted cayó en una trampa al tomarse esa foto con Elvín, porque a éste, seguro le ordenaron que se la tomara para hacer la primera plana de los diarios y los medios golpistas”, le increpó uno en una radio local uno de sus consejeros; mientras el otro le decía: Imagínese, los presidenciables acaban de declarar que no lo reconocen a usted como Presidente, sino que a Micheletti, ni siquiera hablaron de su restitución.
 | ¿Cómo, no hablaron de restituirme? ¿Qué fue lo que dijeron? ¿Tienen ahí sus declaraciones, pónganmelas? Y en ese dime que te diré, el ex presidente Zelaya fue bombardeado por los reclamos de sus simpatizantes en la resistencia que le decían que había “traicionado a los muertos”, que no tenia que dialogar con los políticos, lo que llevó al ex mandatario a salirse de sus casillas y decir que sus visitantes habían “abusado” de su “buena fe”. |
“Los recibí como buen hondureño, me dijeron que apoyan el Pacto de San José, que lógicamente habla de mi restitución, pero si ahora dicen otra cosa, no estamos haciendo nada. El proceso de salida de los golpistas del país no va a cambiar y mi restitución tampoco, porque yo estoy preso aquí”, dijo encabritado Zelaya.
“Si hay un doble estándar en esta cosa, si hay un doble discurso, sino apoyan mi restitución, estaríamos arando en el agua”, acotó.
Sobre su abrazo con Elvín Santos, dijo que era parte de las acciones de diálogo donde “tenemos que hablar con todo el mundo, si yo no hablo con los aspirantes, estaría demostrando que no tengo capacidad de conducir el país; yo tengo que hacer este trabajo, aunque me tenga que tragar cosas amargas o que me resienta. El que de un abrazo no significa que esté cambiando de ninguna manera”.
Zelaya, víctima de su propia cárcel
Zelaya dijo que como parte del diálogo se iba a reunir con los presidenciables César Ham, de la izquierdista Unificación Democrática (UD), que le ha acompañado en su lucha, así como con el candidato independiente, Carlos H. Reyes, quien también es afín a sus ideas.
De las declaraciones de los cuatro candidatos presidenciables, ninguno expresó ofensas hacia Zelaya ni mucho menos a las condiciones que deben regir el diálogo, pero lo cierto es que una lección clara para Zelaya y los políticos, es que este tipo de acercamientos deben manejarse en los términos que establecen las normas de incidencia, donde la prensa no debe ser juez y parte, mucho menos activista tendenciosa en un proceso en donde se juega el destino de una nación, no los intereses personales de grupo.
De ahí que el ex presidente Zelaya debe tener cuidado con lo que dice y hace. No se debe deja manipular para avivar la crisis en vez de buscar la solución. Más tardaron algunos asesores de imagen en manipularlo, que Patricia Rodas y Milton Jiménez en llamar desde Nueva York para “regañarlo”.
| Ellos estaban molestos por el acercamiento, siendo Jiménez el más moderado por considerar que todo diálogo “siempre es bueno”, pero no opina lo mismo Patricia Rodas, quien dijo que “la comunidad internacional no se cree ese asunto del diálogo, yo llamo al Presidente Zelaya a no caer en trampas, todo va bien aquí y seguimos con la estrategia y principios trazados”. |  |
Rodas se soltó a hablar y aunque los conductores de un programa radial afín a Zelaya la querían cortar, ella se atropellaba y se notaba molesta por ese abrazo y acercamiento entre Zelaya y los cuatro candidatos políticos, con quienes, según las fotografías, el ex gobernante se miraba satisfecho y cordial.
