Emigrantes de Honduras, El salvador y Guatemala son los que más crueldad y represión han sufrido en su paso por tierras mexicanas relata el informe.
Las víctimas favoritas de los secuestradores son los niños y niñas quienes realizaban la travesía en la mayoría de los casos para reunirse con sus padres que ya se encuentras en tierras estadounidenses.
Los infantes, entonces, se vuelven presas favoritas de las mafias mexicanas.
Los secuestrados durante seis meses son unos 9, 800 emigrantes por quienes se cobran rescates que andan por los 2 mil 500 dólares indica el informe realizado por investigadores coordinado por un experto en la temática.