«Un remolcador norteamericano con pabellón italiano fue capturado hacia las 11H00 de esta mañana (08H00 GMT) en el golfo de Adén», declaró Andrew Mwangura, responsable para Africa del Este de un programa de asistencia a los marinos, con base en Kenia.
«Los 16 miembros de la tripulación están sanos y salvos», añadió Mwangura, sin precisar el nombre de la embarcación.
Diez de los tripulantes son italianos, confirmó el ministerio de Relaciones Exteriores de Italia en un comunicado, sin dar detalles.
Por otro lado, los piratas que desde hace cuatro días retienen al capitán del buque mercante estadounidense «Maersk Alabama», Richard Phillips, declararon que iban a trasladarlo a otro barco pirata con mayor vigilancia.
«No hubo nada nuevo», las negociaciones con los estadounidenses están «en punto muerto», declaró el sábado Abdi Garad, uno de los jefes de los piratas que el miércoles atacaron el carguero.
Garad hizo esas declaraciones por teléfono desde Eyl, un pueblo de pescadores a 800 km al norte de Mogadiscio, en la región de Puntland (noreste de Somalia), uno de los principales refugios de los piratas.
«Tenemos previsto trasladar al rehén a un barco que nuestros amigos (ndlr: piratas) retienen cerca de Garacad, para que pueda esperar, si el proceso lleva más tiempo», explicó.
En la actualidad, sólo cuatro piratas mantienen vigilado al capitán Phillips en un bote salvavidas.
El viernes, los piratas exigieron un rescate de un monto no especificado para liberar al capitán, y también «poder regresar sanos y salvos a casa».
La presión se acentuó sobre los piratas de la lancha, vigilados por el crucero estadounidense «Bainbridge». También están en la zona una fragata norteamericana con helicópteros, así como un buque anfibio apostado un poco más lejos.
Según Andrew Mwangura, «jefes tribales y padres de los piratas (que tienen secuestrado a Phillips) pueden resolver el problema de manera pacífica».
«El grupo prometió liberar al capitán sin usar armas ni pedir rescate», precisó el sábado en un comunicado.
El «Maersk Alabama», con 20 estadounidenses a bordo, fue atacado el miércoles hacia las 05H00 GMT a unos 500 km al sudeste de Eyl. La tripulación logró recuperar el control del barco durante la noche, pero el capitán sigue en poder de los piratas.
«Temo que esta historia termine de manera desastrosa (…) Nos informan de que los estadounidenses quieren organizar una operación de rescate como la de los comandos franceses», añadió Abdi Garad.
El viernes, las fuerzas especiales francesas liberaron a un velero francés, el «Tanit», que había sido capturado seis días atrás por piratas somalíes, pero un rehén, el propietario del velero, murió durante la operación.
En declaraciones radiales, el ministro de Defensa francés, Hervé Morin, no descartó que el rehén fallecido muriera a causa de un «disparo francés».
Los piratas somalíes, que convirtieron su actividad criminal en una de las más florecientes y lucrativas del país en guerra civil desde 1991, siguen ampliando su radio de acción para capturar barcos desafiando así a los buques de guerra que las primeras potencias mundiales desplegaron en la zona.
