Managua – El nuevo embajador de Estados Unidos en Nicaragua, Kevin Sullivan, llegó hoy al país centroamericano, que vive una crisis que ha dejado cientos de muertos en protestas contra el presidente Daniel ortega, quien ha culpado del conflicto al Gobierno estadounidense.
«Un gusto de estar aquí en Nicaragua, muy ansioso de empezar mi gestión, voy a presentar credenciales esta tarde y espero poder conocer mucho de Nicaragua dentro de muy poco tiempo», dijo Sullivan a los periodistas tras su arribo a Nicaragua.
El diplomático, quien el martes fue juramentado en su país para el nuevo cargo, era el representante permanente adjunto de la Misión de Estados Unidos en la Organización de Estados Americanos (OEA), antes de ser enviado a Nicaragua.
Sullivan, relevo de Laura Dogu, se mostró de acuerdo con la realización de «elecciones anticipadas, justas y con observación internacional», como fórmula para que Nicaragua supere la crisis por la vía pacífica.
El Gobierno de Ortega es señalado por la oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos (Acnudh), y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) como responsable de «más de 300 muertos» en actos de «represión» desde abril pasado.
Los organismos humanitarios locales cuentan hasta 535 muertos, así como 552 a 558 «presos políticos», durante la crisis, que comenzó en abril pasado.
Ortega, quien reconoce 199 muertos y 273 reos a los que llama «terroristas», «golpistas» y «presos comunes», afirma que enfrentó un intento de «golpe de Estado» y niega las denuncias de abusos contra los manifestantes.
Sullivan es un diplomático de carrera nacido en Cleveland, Ohio, con experiencia en África y Latinoamérica.









