Austin (EE.UU.) – El gobernador de Texas, Greg Abbott, ordenó desplegar a la Guardia Nacional en Austin, la capital del estado, en preparación para una jornada de protestas en contra de la Administración de Donald Trump convocadas para este sábado.
«La violencia y la destrucción no van a ser toleradas en Texas», dijo el gobernador en un comunicado que publicó en la víspera y aseguró que las autoridades «disuadirán los actos de vandalismo» y arrestarán a «cualquier persona que participe en actos de violencia o daños de propiedad».
Una coalición de organizaciones opositoras, entre las que hay grupos de defensa a los derechos humanos y sindicatos, convocaron para mañana una jornada nacional de protesta en más de dos mil lugares del país, entre ellos Washington D.C.
Se trata de la segunda ola de manifestaciones ‘No Kings’ (Sin Reyes), la primera se registró en junio y transcurrió de manera pacífica en la mayor parte de Texas y en otras regiones del territorio estadounidense. En esa oportunidad, Abbott también desplegó a la Guardia Nacional.
El gobernador de Texas, además, se unió a otros líderes republicanos que aseguran, sin evidencia, que las jornada de protesta tiene nexos con el movimiento ‘Antifa’, al que le atribuyen una ideología antifascista y que ha sido señalado como «terrorista» por el Gobierno Trump.
En la víspera, el senador Ted Cruz, también texano y republicano, pidió al Gobierno federal investigar la financiación de los grupos que convocaron las manifestaciones.
El pasado mes de septiembre, Trump firmó un decreto presidencial en el que señaló a Antifa como una «organización terrorista», sin embargo, no está claro cómo podrá aplicarse esta decisión, ya que no existe una ley de terrorismo doméstico en EE.UU. que permita designar a un grupo local como tal.
Y es que, Antifa no es una organización formal y estructurada, pese a que el Gobierno la ha señalado así, según afirman organismos expertos en discurso de odio como Southern Poverty Law Center (SPLC, en inglés).
El Servicio de Investigación del Congreso de EE.UU., un instituto no partidista de la Biblioteca del Congreso, señala que la palabra Antifa, que viene de ‘antifascismo’, es un movimiento «descentralizado, formados por grupos independientes y personas afines» con principios que pueden «reflejar ideas del anarquismo, el socialismo o el comunismo».
En 2020, el entonces director del FBI, Christopher Wray, aseguró incluso que se trata de una «ideología» y no de un grupo organizado. EFE