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La Agencia de Protección Ambiental de EEUU eliminará su brazo de investigación científica

Nueva York – La Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA, en inglés) anunció este viernes que eliminará su brazo científico y despedirá a cientos de empleados, atendiendo a las directrices del presidente, Donald Trump, de prescindir de trabajadores federales y desmantelar agencias del Gobierno.

En un comunicado, EPA indicó que eliminará su Oficina de Investigación y Desarrollo (ORD), que lleva a cabo investigaciones clave para proteger la salud humana y los ecosistemas de la contaminación ambiental, según su página web.

La ORD ha estudiado, entre otras cosas, el impacto del humo de los incendios forestales en la salud pública o los riesgos de sustancias químicas peligrosas para la salud.

Según The New York Times, sus investigaciones han conducido en muchas ocasiones a la creación de normas ambientales más estrictas, lo que le ha llevado a ganarse la oposición de empresas químicas y otras industrias.

«Bajo el liderazgo del presidente Trump, EPA ha examinado detenidamente nuestras operaciones para garantizar que pueda cumplir con nuestra misión principal de proteger la salud humana y el medioambiente mientras impulsamos el Gran Resurgimiento Estadounidense», apuntó en el comunicado el administrador de la agencia, Lee Zeldin.

Según Zeldin, la eliminación de la ORD ahorrará a EPA 748,8 millones de dólares.

En enero de 2025, EPA tenía 16,555 empleados, una cifra que, combinando jubilaciones voluntarias y otras reducciones de personal ya anunciadas, bajará hasta 12,448 trabajadores, de acuerdo a la agencia.

Además, anunció que creará una Oficina de Ciencia Aplicada y Soluciones Medioambientales que le permitirá «dar más prioridad que nunca a la investigación y la ciencia».

Justin Chen, presidente del Consejo 238 de la Federación Americana de Empleados Públicos, un sindicato que representa a más de 8,000 trabajadores de EPA, afirmó en un comunicado recogido por el NYT que la oficina científica «es el corazón y el cerebro» de la agencia.

«Sin ella no tenemos medios para evaluar las repercusiones sobre la salud humana y el medio ambiente. Su destrucción devastará la salud pública en nuestro país», advirtió.

En las últimas semanas, altos cargos de la ORD han dejado sus puestos. De ellos, algunos se dedicaban a supervisar trabajos de medición de contaminantes en la atmósfera o a estudiar emergencias medioambientales. EFE

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