Roma – El Nápoles vivió este domingo uno de los partidos más complicados de su temporada, a merced constante de un Udinese superior (1-0) que mereció claramente esta victoria que puede cambiar radicalmente la parte alta de la Serie A, con el Inter con posibilidad de asaltar el liderato en caso de ganar ante el Génova.
Dos derrotas consecutivas de los de Antonio Conte. Ante el Benfica de José Mourinho en Liga de Campeones y ante el Udinese en el estadio en el que tocó el cielo aquel 4 de mayo de 2023, cuando certificó el tercer ‘Scudetto’ de su historia, el primero sin Diego Armando Maradona.
Se convirtió esta vez ese mismo escenario en una pesadilla. Porque el Nápoles fue incapaz de hacer frente a un Udinese desatado. Se descosió como pocas veces en la temporada el combinado partenopeo, quizá solo peor ante el PSV en aquella abultada derrota (6-2) e territorio neerlandés.
Sobrevivió durante 73 largos minutos al empuje constante de los de Údine, que llegaron a adelantarse hasta en dos ocasiones antes de poder sumar en el marcador. Porque un fuera de juego y una falta anularon, VAR mediante, sus dos primeros zarpazos. Apenas unos milímetros evitaron el tanto de Davis, que cazó un rechace de Milinkovic-Savic en el 52. Y un ligero contacto en el tobillo de Lobotka cuando Bertola robó arriba y facilitó la contra que finalizó Zaniolo.
Dos goles anulados y una parada espectacular de Milinkovic-Savic, ayudado también por el larguero, convirtieron el duelo en una suerte de frontón. El Udinese en área rival, el Nápoles achicando aguas hasta que, en el minuto 73, llegó la merecida recompensa de los norteños. Fue Ekkelenkamp el que marcó el tercer tanto del duelo, el primero válido. El más bonito de todos. Un zapatazo desde fuera del área que colocó en la escuadra derecha de la meta, la izquierda desde el perfil del meta serbio, superado pese a su envergadura debido a lo ajustado del disparo.
No encontró apenas argumentos el Nápoles para intentar levantarse de la lona. Y aún así, en una jugada inesperada, tuvo una ocasión para poder empatar que mandó al limbo en un partido en el que no le salió nada a los de Conte. La tuvo Hojlund a pase de Lucca. Casi bajo palos. Pero la molestia de la defensa del Udinese fue suficiente para entorpecer su definición en el momento clave.
El Nápoles se descosió en Údine. Desaprovechó la gran oportunidad de colocarse líder en solitario de la Serie A tras el pinchazo del Milan ante el Sassuolo. Y podría terminar la jornada en la tercera plaza, pues en caso de victoria del Inter ante el Genova, los Lautaro Martínez y compañía dormirán líderes.
— Ficha técnica:
1 – Udinese: Okoye; Kristensen, Kabasele, Solet; Zanoli (Goglichidze, m.94), Piotrowski, Karlstrom, Ekkelenkamp (Zarraga, m.84), Bertola (Ehizibue, m.84); Zaniolo (Bravo, m.91) y Davis (Buksa, m.84).
0 – Nápoles: Milinkovic-Savic; Beukema (Politano, m.61), Rrahmani, Buongiorno (Olivera, m.75); Di Lorenzo, McTominay, Elmas (Lucca, m.83), Spinazzola (Migue Gutiérrez, m.83); Neres, Lang (Lobotka, m.61) y Hojlund.
Goles: 1-0, m.73: Ekkelenkamp.
Árbitro: Simone Sozza. Mostró tarjeta amarilla a Zaniolo (m.33) por parte del Udinese.
Incidencias: encuentro correspondiente a la décimo quinta jornada de la Serie A, disputado en el Estadio Friuli de Údine (norte de Italia). EFE







