Tokio – El mayor fabricante mundial de vehículos, Toyota Motor, informó hoy de que en el trimestre abril-junio logró un beneficio neto de 897.800 millones de yenes (6.935 millones de euros), un 465,36 % más que hace un año, cuando la pandemia golpeó con dureza sus ventas.
La empresa logró además un beneficio bruto de explotación (EBITDA) de 1,25 billones de yenes (9.711 millones de euros), lo que implica un 963,62 % interanual más.
En abril-junio, primer trimestre del año fiscal en Japón, Toyota logró incrementar su ganancia operativa en más de un 7.000 % hasta los 997.400 millones de yenes (7.704 millones de euros) y facturó 7,93 billones de yenes (61.298 millones de euros), un 72,48 % más que en el mismo periodo de hace un año.
Más allá del enorme efecto base debido a los estragos que sufrió la empresa en la primera mitad del año pasado debido a la pandemia, Toyota aseguró en un comunicado que estas cifras son el resultado de del trabajo realizado con sus proveedores y concesionarios.
Esto, según la compañía, permitió asegurar «ventas y suministro estables, pese a la escasez de semiconductores y a la propagación de la COVID-19».
Toyota aseguró que en el anterior trimestre mejoró la competitividad de sus productos y «mejoró los modos de trabajo eficiente» durante la pandemia.
La empresa mantuvo sin cambios su previsión de resultados para todo el actual ejercicio, que concluye el 31 de marzo de 2022, «debido a las incertidumbres que se plantean durante y después del segundo trimestre (julio-septiembre)», en las que se incluyen la pandemia y la actual escasez global de circuitos integrados.
De este modo, prevé un beneficio neto de unos 2,3 billones de yenes (17.762 millones de euros) para todo el año fiscal, lo que implica un 2,44 % más que en el ejercicio anterior.
Del mismo modo, espera que su ganancia operativa crezca un 13,75 % hasta los 2,5 billones de yenes (19.306 millones de euros) y que sus ingresos por venta aumenten en un 10,23 % hasta sumar unos 30 billones de yenes (231.666 millones de euros).
JS